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Sam.

Me desperté acostado en el sillón con la figura de Elizabeth a mí lado, ya me había olvidado como era amanecer con ella, ver su hermoso rostro descansando conmigo y la manera lenta en que abría los ojos mientras se le formaba una pequeña sonrisa.
Me fijé la hora en mí celular, recién eran las cinco de la mañana, ¿qué hacía despierto tan temprano? Me levanté para comer algo, tenía hambre, creo que de noche no comí nada por quedarme con Elizabeth.
Sentí como los brazos de Elizabeth me agarraban para que me quedara con ella, no me podía resistir a eso, no podía decirle que no.

-Quédate.-susurró con su voz adormecida.

-Vuelve a dormir.-dije acostándome nuevamente y acariciando su cara lentamente.

-Sam.-susurró.

-Dime.

-Gracias.

-¿Por qué, babygirl?- la mire fijamente a sus ojos aun cerrados.

-Por todo. Te quiero, Sammy.

-Yo más, pequeña.

Cada parte de su rostro era hermosa, sus labios tenían una la proporción exacta, sus cejas eran completamente envidiables y a sus mejillas le daban ganas de llenarlas de besos. Simplemente era la chica más perfecta que había visto.

-Tengo hambre.-dijo sentándose en la cama.

-¿Queres ir hasta McDonald's?-pregunte mientras le acariciaba su cabello oscuro.

Ella asintió mientras se levantaba de la cama. Fui hasta mi cuarto el cual estaba idéntico a la última vez que estuve acá con los chicos, habían tantas fotos con ellos pegadas en la pared que me daba un poco de miedo. Me puse un sacó y me lave los dientes, no tenía la necesidad de cambiarme demasiado debido a que me acosté ya vestido.
Baje las escaleras y pude apreciar como Elizabeth estaba sentada con su mirada perdida en algún lugar, se podía notar cuanto le había dolido el fallecimiento de la abuela de Taylor. Ayer, mientras Elizabeth estaba dormida, pude hablar con él y pude comprender mejor la situación aunque Taylor dos por tres lloraba demasiado como era de esperarse. Ambos ideamos un gran plan, los chicos vendrían una semana antes de que nos vayamos, eso sería dentro de dos semanas o por ahí, así ambos estarían juntos para apoyarse. Tengo que admitir que no me gustaba tanto este plan, debido de que la palabra "chicos" incluía a Shawn en ella y eso no me ayudaba a enamorar a Elizabeth. Mierda.

-Vamos.- dije agarrando la llave del auto pero ella me la sacó de las manos dejándola en el llavero.

-Mejor vamos caminando.- dijo sonriendo.

-Será un placer, señorita Dallas.

Empezamos a caminar lentamente por vereda, Elizabeth iba con su mirada fija en el piso, parecía que a cada paso que daba le gustaba un cacho más verlo. Raro.
Estaba todo silencioso, necesitaba sacar un tema de algo para hablar y creo que tenía uno que me iba a librar un poco de culpa. Era momento de disculparme.

-Oye.- dije mientras paraba de caminar.

-¿Qué?-dijo parando cerca mío.

-¿Qué pasa si hago esto?

La agarre de sus piernas y la puse encima de mí hombro izquierdo, la llevaba cargando como si fuera una bolsa de papas. ¿Por qué lo hice? Prefería hablar sobre ese tema en un lugar más tranquilo y tal vez sentados ambos, como en un lugar donde la paz habitara.
Empecé a correr mientras Elizabeth no paraba de reír, supongo que no le incomodaba nada que todo el mundo pusiera su vista en su culo, pero a mí sí me molestaba y demasiado, pero todo eso empeoro cuando un grupo de adolescentes con sus hormonas alteradas se lo quedaron viendo.

-¡Ustedes!-grite señalándolos mientras ellos se hacían los imbeciles.- ¡Dejen de hacerse los idiotas!¡Saben que estoy hablando de ustedes!

Baje a Elizabeth quien estaba demasiado entreverada con esta situación y fui directo a los chicos, ella me quería acompañar pero con mi cabeza le indiqué que se quedara un segundo ahí.

-¿Qué les sucede?-dije acercándome a los chicos quienes se miraban confundidos.

-¿Qué te sucede a vos?-preguntó un rubio que aparentaba tener entre 15 años o por ahí.

-No sé, díganme ustedes qué tenía su vista clavada en el culo de mí novia.-mentí con lo ultimo, pero en cualquier momento se iba a convertir en realidad.

-Lo sentimos, dude. Pero tienes que aceptar que tiene un buen culo.- en el momento que aquel morcho dijo eso lo puño se alojó en su rostro.

-Imbecil.-dije mientras me iba y Elizabeth me miraba sorprendida.

La agarre de la mano a Elizabeth y caminé demasiado rápido hasta poder alejarnos de aquella escena, pude notar como cada minuto que pasaba ella miraba hacia atrás buscando algún indicio de lo que sucedió.

-¿Qué mierda pasó allá?- preguntó cuando estuvimos demasiado lejos.

-Ese chico es un idiota.

-¿Qué hizo?¿Te daño?

-No importa, solo vamos a desayunar y después a la plaza.

Aumente la velocidad de mí pasos cada vez más, necesitaba llegar ya a comer y no porque tuviera hambre, sino porque necesitaba estar tranquilo en algún lugar descansando y quedarme tranquilo con Elizabeth a mí lado.
Cuando por fin llegamos hice mi pedido y busqué la mesa más alejada de la gente y cerca de una ventana. El paraíso.

-¿Me puedes contar qué pasó allá?-preguntó Elizabeth sentándose en la mesa.

-No importa.- dije dándole un mordisco a mi media luna.

-No digas que no importa cuando estás involucrado vos. Importas sí, idiota.

Al decir aquellas últimas palabras podía sentir como había una pequeña oportunidad de que ella me amara todavía, necesitaba que ere pequeño destello de luz iluminara mi oscuridad. Sentía la gran necesidad de besarla ahora pero ella seguía con Shawn y la verdad que eso no me servía demasiado.
La extrañaba, cuando la perdí supe que ella era la mujer de mí vida, con la que quiero pasar todos los segundos hasta morir, con la que quiero tener hijos.
Era momento de disculparme.

-Lo lamentó.-dije mientras bebía mi jugo de naranja.

-¿De qué hablas?-preguntó confundida.

-Aquel día en la casa de Skate. Lamento haberte dejado sola sin saber que hacer. Tuve que haberme quedado ahí contigo, haber respondido tus llamadas. Pero estaba muy asustado, sé que vos también y que estuve mal. No sé qué mierda me pasó por la cabeza en aquel momento.-

-Te perdonó, no sabes cuanto estuve esperando que dijeras eso.

Elizabeth se paró y me abrazo. En ese momento supe que vale la pena seguir luchando por ella.

Instagram Girl || Old MagconDonde viven las historias. Descúbrelo ahora