HEART ATTACK

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Sehun se encontraba caminando sin rumbo alguno, en la oscuridad de lo más profundo de la noche, donde sólo tiene la compañía de las estrellas y el ruido de los carros pasando. Miraba boca abajo pero sin razón aparente cambió su vista hacia el frente, posando sus ojos en un joven que se encontraba a unos pocos centímetros de distancia, dándole una espléndida vista de su espalda, y complexión de cuerpo, que sin percatarse de la presencia de Sehun detrás suyo, seguía su camino hacia la misma dirección a la que se dirigía esté. En ese instante, la respiración de Sehun se agitó, parecía estar en muy mal estado ahora, como si de un solo jalón se le fuese arrancada la vida, no podía creer con lo se encontraba frente suyo, de inmediato miles de recuerdos se le vinieron a la mente, recuerdos que se prometió guardar en lo más profundo de su ser y jamás pensar en ellos pero eso claro está, no lo logró.

“-Sehun, amor, gracias, no tenías porque hacerlo, te dije que no lo necesitaba.”

Mencionó su pequeño novio con una deslumbrante sonrisa desde su camilla, aun en ese estado seguía con su hermosa sonrisa, tan resplandeciente, mientras Sehun por otro lado estaba devastado pero le devolvía la cálida sonrisa para no arruinar el hermoso momento que estaba viviendo en esos instantes.

-Oh, no, no, no puede ser, no puedes ser realmente tú -. Dijo en un susurro casi imperceptible pero aún así la persona que se encontraba frente suyo, logró escucharlo con claridad.

Sehun pensó que no lo escuchó, y lo prefirió así pero inmediatamente la otra persona se giró a verlo, demostrando que tan equivocado estaba. Traía una mirada cálida y comprensiva en su pequeño rostro con facciones finas y delineadas, su rostro era de ensueño, podría hacer que cualquiera cayera rendido ante él sin necesidad de hacer nada, pero en vez de dejar embelesado con su belleza a Sehun, solo logro que derramara un par de lágrimas al ver el hermoso rostro que creyó nunca volver a presenciar.

-¿Luhan?,¿De verdad eres tú?

El chico seguía parado frente suyo sin decir palabra alguna, solo inspeccionaba a Sehun de pies a cabeza, y a éste le estaba hartando su silencio pero no dijo o hizo nada, solo se limitó a ir hacia Luhan con paso lento pero decidido.

Una vez frente al bello chico, no hizo más que dejar descansar su palma en el rostro del joven, dejando caricias más específicamente en su mejilla. Mientras tanto, el tiempo pareció ir demasiado lento o así lo catálogo Sehun, no hacían nada más que conectar la mirada intentando leer al otro y descifrar que puede estar pensando su contrario, y el silencio es lo único que reinaba en esos instantes, sin embargo no era incomodo para ninguno de los dos, pareciera que las palabras sobraran, no sentían la necesidad de decir algo, con la simple presencia del otro bastaba.

Sehun deseaba con todas sus ganas que el tiempo se detuviera en esos precisos instantes pero para su mala suerte no podía ser así, lo sabía y es por lo mismo que trataba de disfrutar lo máximo que podía de ese momento para poder guardar ese recuerdo en una caja de cristal dentro de su corazón de acero inoxidable.

El momento fue roto por Luhan, no con palabras, no dijo nada pero sí que hizo mucho con un simple abrazo que para ellos realmente no fue simple, significó mucho, demasiado a decir verdad, tanto fue que Sehun una vez más se quedó sin aliento, su corazón que estaba a mil por hora paró, se tranquilizó y en vez de que Sehun volviera a llorar, solo correspondió el abrazo con tranquilidad, y ya no había rastro de las lágrimas que con anterioridad derramó. Sehun seguía triste, sí y por lo mismo sintió una opresión en el pecho, tanto fue que sentía que tarde o temprano le daría un ataque al corazón, y la verdad no le importó si eso de verdad le llegara a ocurrir, de hecho por más loco que suene, lo deseó.

Estaba jodido, lo sabía, en esos mismos instantes de verdad deseó que le diera un ataque al corazón y así terminar por fin con aquel sentimiento de opresión, que solo lograba dejarlo peor, y todo eso no le importó, la verdad es que dejó de importarle tanto su vida desde que su novio se marchó de ese mundo para ir a uno mejor pero tampoco se atrevía a acabar con ella él mismo, no tenía el suficiente valor, aparte de que realmente no quería morir por aquello, ya que le había prometido a su pequeño novio, el hombre más preciado para él, que no se dejaría ir por algo así, que saldría adelante.

Pero ahí estaba, deseando aquello. De verdad creyó poder con la promesa que le hizo a Luhan pero no podía, no ahora que está abrazado a su difunto novio, haciendo que recordara lo tanto que le hacía falta en su vida monótona y aburrida, sin ni un motivo para seguir con ella. Y todo parecía tan irreal pero a la vez tan real para Sehun, creía estar volviéndose loco, le afectó tanto la pérdida que ya hasta alucinaba con su difunta pareja.

-¿Puedo creerte si dices que es un sueño?

Por fin Sehun rompió el silencio que parecía eterno. Luhan no respondió de inmediato, solo se apartó un poco para poder conectar una vez más su mirada con la de Sehun sin tener que romper el abrazo, y así se quedaron por un instante, Sehun esperando que por una vez en todo ese rato que llevaban, que Luhan mencionara algo pero Luhan seguía sin emitir sonido alguno, manteniéndose casi igual, solo con la leve diferencia de que pareciera tratar de encontrar alguna respuesta, procesando las palabras antes dichas. Suspiró bajo antes de que al fin hablará.

-No te dañaría de esa forma -. Dijo sin más.

Sehun no lo comprendió, no estaba entendiendo nada, y nunca quiso comprender nada en realidad, fuera sueño o no, quería aprovechar de ésto, antes de que tal vez todo vuelva a ser como antes, sin la presencia del chico al que amaba.

Luhan parecía haberse percatado de la confusión, por lo qué, en vez de decir alguna otra cosa para dar explicaciones, decidió mejor explicar o dar a entender la situación con acciones.

Se apartó con cuidado de Sehun para que continuamente tomará la mano de éste y así dirigirlo unos pasos atrás, retrocediendo los pasos que habían dado para llegar al punto en el que se encontraron. Al llegar a donde sea que Luhan guiaba a Sehun, el segundo se quedó sin aire por tercera vez en la noche pero no le dio tristeza o felicidad lo que se encontró frente a él, solo no sintió nada de inmediato, se quedó ahí parado, procesando las cosas aún tomado de la mano de Luhan.

Así se mantuvieron por otro rato pero no tan largo como los que se dieron hace unos momentos, no, éste fue cortó, Luhan lo hizo así, ya que con una maniobra rápida saco a Sehun del escándalo que se había formado en la carretera, para llevarlo lejos de todo, y todos para que así pudieran estar juntos una vez más por un tal vez largo tiempo. Solo los dos.

Sin que ninguna enfermedad se interponga, ni una persona, ni los problemas que surgían con continuidad para separarlos otra vez. Nada, ahora nada podía separarlos, nada ni nadie porque no eran nada, ya no existían, supuestamente. Solo se la pasarían vagando por ahí hasta que vuelvan a renacer en otra vida y así lograr reencontrarse, hacer su vida, su historia, terminarla y volverla a empezar. Tal y como paso en ésta.

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»Está es la primera historia que publicó, aunque no la primera que escribo, espero sea de su agrado y si tengo faltas ortográficas o de narración, díganme para poder modificar aquello y así poder mejorar en ésto ^^

También esté fic lo hice por el cumpleaños de una amiga, espero te haya gustado yunmi120

HEART  ATTACK [HunHan] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora