Desde hace 2 días estás molesto conmigo, no te culpo, yo también lo estoy conmigo misma.
Cuando discutimos ninguno quiere perder, somos iguales.
La mayoría de las veces decimos cosas que hieren a los demás sin que nos importe, somos iguales.
Estás frente a mi y no te das cuenta de mis ojos llorosos, no quieres ni mirarme... Está bien, cuando me miro yo misma al espejo, me doy asco.
Lo siento. Quisiera decírtelo sin llorar.
Hace 2 días me dijiste una palabra queriendo decirme otras mas, pero no lo hiciste porque creíste que habría sido demasiado, no importa. Lo merezco.
Mamá me dijo que empiezo a parecerme a ti y me gustó escuchar eso, porque me gusta tu forma de ser; la firmeza que tienes al decir las cosas, tus bromas, la mayoría de las veces tienes razón, antes de hacer algo piensas todo. Pero me dijo que eso es malo porque muchas veces Hieres a las personas sin importarte lo que sienten, pero yo pienso que sólo dices la verdad.
Debes pensar muchas cosas de mi, la mayoría negativas.
Debes pensar que soy una mierda por lo que hice, o por lo que hago todo el tiempo.
Crees que nada de lo que hago está bien, o que valga la pena y lo que si vale la pena, no lo hago bien.
Estoy derramando lágrimas frente a ti, y no quieres mirarme.
Está bien, aún te quiero mucho y no dejaré de hacerlo... Papá.