11 de Febrero de 2012

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No sé donde estoy. Todo está muy oscuro y no veo absolutamente nada. He encontrado el aparato de milagro y no se oye ni una mosca. Huele un poco raro, como a perro mojado. Creo que la fortaleza con la que me he revestido estos últimos días se deshace en pedazos. No sirvo de superviviente ni luchadora. ¡Yo sólo quiero volver con Morgan a Brisbane y vivir tranquila! Pero sé muy bien que nada de lo que quiero volverá. Es más, tengo el presentimiento de que todo acabará pronto. Me siento como un animal de camino al matadero. Ahora lamento no haberme vuelto vegetariana... Lo que me parece extraño es que Naia no quisiera ayudar a ''cazarme''. Si soy lista, puede que tenga una oportunidad de sobrevivr gracias a esto. Intentaré darle pena...

CATACRASH!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! POM POOOOOM!!!!!!!!!!!!!!!

¿Qué ha sido eso? Parece el típico ruido de un forcejeo. ¡Eo! ¿Qué está pasando ahí fuera!

-Alyson, ven conmigo rápido

-¿Naia? ¿Qué haces? ¡Déjame!

-No seas tonta. Estoy intentando salvarte la vida.

-Ya claro. No soy una niña pequeña. ¡Sé que las mentiras existen!

-Ven ya. Luego te lo explicaré todo...

-¡Oh, vamos! ¿Cómo puedes creerte que te voy a seguir de buena gana?

-De acuerdo.

Oh, Dios Mío. Que dolor de cabeza... Me va a estallar. ¿Qué ha pasado?

-No te venías conmigo y te he dado un golpecito de nada. ¿Ya estás mejor?

-De acuerdo, Naia. Ya me tienes donde querías, así que cuéntame de una vez lo que ha pasado.

-Bien. Como sabes, tus padres murireron a manos de los mafiosos italianos. Antes de eso, habían pedido ayuda a otras mafias. Acudieron a nosotros, la mafia licantrópica, pidiéndo dinero. Y se lo dimos. Fueron felices durante años, hasta que se lo volvieron a gastar y pidieron a otras personas. No saldaron la deuda y, puesto que están muertos, te toca a ti pagarla.

-¿Qué?

-Oh, que tonta puedes llegar a ser... Que te íbamos a comer, pero hay otras cosas y decidí salvarte.

-¿Qué cosas?

-Bueno, ya te irás enterando... El caso es que tu vecina borracha se ha presentado aquí intentando matarnos... Quizás deberías hablar con ella

-¿Marie? Esto se escapa de mi entendimiento. Es como una película, ¡esto no pasa en la vida real!

-Bueno, la verdad es que esto empieza a parecerse a Alicia en el País de las Maravillas.

-Tú sigues con tu humor negro...

-¡No te enfades!

-¿Qué no me enfade? Esto es increíble...

-¡Alyson! ¡Sal de aquí!

-¿Marie? ¿Qué está pasando?

-Prometí a tus padres que te cuidaría... Y voy a hacerlo.

-Pero Marie,  ¡que alguien me cuente lo que pasa!

-Pero si te lo he explicado con pelo y señales.

-Venga ya, lo tuyo no era una explicación, Naia.

-¡No seas grosera! ¡Te estoy ayudando!

-¿Tú? ¡Qué la vas a ayudar, lobo de alcantarilla!

-¿Qué me has llamado? Te vas a enterar.

-¡No, Naia! ¡No la mates, por favor! Em... ¡la sangre con alcohol sabe mal!

-¿En serio? Bueno, entonces puedes irte.

-Gracias, pero si no te importa, me llevaré a Alyson conmigo.

-¡Claro que me importa! ¡Oscar me va a matar! Nos ha costado mucho cazarla...

-Cuanto lo siento. Alyson, corre.

-Está bien. No pienso perseguiros, pero creéme Aly, lo quieras o no, volveremos a vernos

Caperucita, me debes un favorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora