Perdóname, perdóname por todo lo que te he hecho, perdóname por las veces que te he fallado, perdóname por las veces que te he odiado y perdóname por todas esas veces en las que me he rendido, lo siento, lo siento mucho, si no puedes perdonarme no te culpo, soy una persona odiosa- Decía ella mientras rompía el espejo y temblaba de dolor.