Complicado. ||LarryStylinson

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HARRY

Un suspiro salió de los delgados labios del ojiverde mientras dejaba su abrigo sobre el pequeño sofá que había en la sala.

Su día hasta ahora empezaba bastante atareado, el restaurante se llenó y esa era la razón por la cual no soportaba sus pies en aquel momento.

—¡Harry! —Una voz aguda le hizo sonreír, una pequeña niña de cabello castaño se acercó corriendo a él por lo cual se agachó para estar a la altura de su hermana menor.

—Hola cariño. —Murmuró saludando.

—¿Qué tal te fue, cielo? —Anne se unió a la interacción de sus hijos enternecida al ver como los brazos de la pequeña Gemma rodeaban al más alto.

—Bien, mamá. —Respondió— El señor Horan aceptó adelantar mi paga y así podremos pagar el alquiler. —Le informó mientras cargaba a su hermana.

Anne sonrió con algo de nostalgia mientras que se acercó a aquel hombre y lo abrazó.

—Gracias. —Susurró ella— Por todo lo que haces por nosotras.

Harry sonrió y cerró sus ojos sintiendo los brazos de las dos mujeres más importantes de su vida rodearlo mientras le agradecían y allí, en ese momento, no sentía el dolor de sus pies, ni el leve dolor de cabeza que tenía, se sentía fresco.

•••

Harry acomodó su toalla al rededor de su cintura y con otra secó su largo cabello, tenía que cortarlo, pero a él en realidad le gustaba mucho tenerlo así.

—¡Harry, Harry, ven! —Gemma gritó y el rizado no dudo para correr hasta la pequeña cocina.

"Seguro se golpeó o algo la asustó" —Pensaba Harry mientras corría.

Al llegar al lugar vio a Gemma y esta señalaba con su pequeño dedo un platillo servido en la mesa.

Anne miró a Harry y rió por lo bajo mientras acomodaba a su pequeña hija en su silla.

—Ve a cambiarte, cielo, te esperaremos para comer. —Decía ella luego de regañar con la mirada a Gemma pues esta había tomado un poco del glaseado del postre de chocolate que Anne había hecho.

Harry asintió antes de volver a su habitación.

•••

—Mami, quiero pastel. —Pedía Gemma sin querer terminar de comer sus pastas.

Anne negó seriamente mientras le servía un poco más de pasta a Harry y este le sonreía en forma de agradecimiento.

—¿Cómo han ido las cosas con...? —La puerta sonó interrumpiendo la pregunta de Anne y Harry limpió su boca antes de levantarse e ir a atander.

Los ojos verdes del joven observaron el reloj de pared que había en la sala y este marcaba las 3:30 de la tarde, a esa hora nadie visita, todos están volviendo al trabajo o durmiendo una siesta de media tarde, así que a él se le hizo un poco extraño.

Harry abrió la puerta encontrándose con Liam, el hijo del portero el cual era bastante sabio como para traer a su joven hijo y que este caminara lo que él ya no podía.

—Hey Harry. —Saludó sosteniendo un paquete, ellos tenían una muy buena relación, habían ido una que otra vez de fiesta y cuando acababa el turno de su padre a Liam no le importaba pasar un rato en el pequeño pero acogedor apartamento de su amigo.

—Hola Payno, ¿qué traes allí? —No les voy a mentir, Harry estaba algo cansado del turno que había hecho en la mañana en el restaurante, y ahora solo quería terminar las deliciosas pastas de su madre e ir a dormir.

—Lo envió... —Comenzó a buscar un pequeño papel en su pantalón y al sacarlo rodó los ojos para leerlo en vos alta— "Louis Tomlinson, el más guapo de todos, por siempre y para siempre" —Leyó lo que decía en el papel mientras le entregaba este al rizado.

—¿No podías esperar a que lo recogiera como de costumbre? —Preguntó Harry entre risas mientras lo recibía y releía el pequeño papel notando la escritura de su novio.

—Lo mismo le dije yo pero...

—¿Louis estuvo aquí? —Se apresuró a preguntar el más alto asomándose al largo pasillo pero no, estaba vacío, a excepción de claro, algunos juegos, pequeñas bicicletas o cajas que estaban afuera de algunos apartamentos vecinos.

—Tranquilo, pequeño enamorado. —Se burló Liam posando las manos en el pecho del otro para devolverlo dentro de su apartamento— Como te decía. —Sus ojos rodaron una vez más— También le pregunté lo mismo pero insistió en que era importante y al final papá aceptó con tal de que dejara el alboroto. —Terminó de explicar mientras se encogía de hombros.

—Entiendo, yo te iba a... —Harry empezó a hablar pero una voz interrumpió aquella conversación.

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