Si te das cuentas los detalles te puedes dar pequeñas sorpresas.

¡Hola todos!

Vengo a dejarles este pequeño fic okikagu que escribi, pero desde la perpectiva de nuestro comandante demoniaco y adicto a la mayonesa :'D ya que las perpectiva de Gintoki son muy mainstream :'v
Tambien es se la dedico a MusumeAnon 7u7

Espero que le guste y lo disfruten :'D

Los derechos de los personajes es del gorila sorachi.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

No le sorprendió cuando aquel par de bestia declararon su noviazgo a los cuatros vientos.

"Ya era la hora", pensó mientras inhalaba el humo del cigarro para luego expulsarlo de sus pulmones, mostrando que era el único que tenía la menor impresión dentro de los que estaban presente.

Porque él había visto las señales que nadie pudo captar.

Pudo darse cuenta como se comportaba aquel mocoso sádico que le fastidiaba la vida, delante de la única mujer de la yorozuya. Vio aquel brillo en aquellos ojos carmín, ese mismo brillo que sólo se podía ver cuando Mitsuba estaba cerca. Aquella pequeña y sincera sonrisa que aparecía en la cara de su subordinado cuando estaba cerca de la chica yato. El cómo a su manera infantil buscaba la atención, tal cual como lo hacía cuando era un niño.

Con todo aquello pudo entender que Sougo Okita se había enamorado de Kagura del clan yato.

Cuando se dio cuenta de aquello no lo podía creer, nunca espero que aquella situación pasará. Siempre pensó que si aquel mocoso tuviera un corazón, se enamoraría de alguien parecida a su hermana. Sin embargo, se había enamorado de la chica que era lo opuesto a lo que fue la dulce Mitsuba. Solo con el tiempo se dio cuenta que era la china, quien con su inocencia combinada con esa altanería que tenía, hacia que Sougo dejará sus defensa para mostrar aquellos sentimientos que guardaba en los profundo de su corazón.

Tal vez no se parecía en nada a Mitsuba, pero desprendía la misma calidez cuando le sonreía al castaño de ojos carmín.

Una pequeña parte de él le pedía aconsejar a aquel sádico de que se alejara de esa chica, que no la hiciera sufrir por los asuntos del Shinsengumi y la muerte que los perseguía por su trabajo. No obstante, había un fuerte deseo de que Sougo no siguiera sus pasos, que no fuera tan idiota e inseguro como lo fue él. Que no temiera en mostrar sus sentimientos por esa china, ni mucho menos tuviera el mismo remordimiento que el sentía ahora por no tener a su amada.

Él deseaba que la historia no se repitiera.

Por eso no pudo evitar sentirse orgullosos al ver que ese mocoso siguió su propio camino. De ver a ese par de bestia felices por su actual relación, aunque lo ocultaran insultándose como sabían hacer.

"Mira Mitsuba, Sougo es feliz" Con esos pensamientos salió de aquel bullicioso salón para observa las estrellas con una satisfacción que llenaba en todo su ser.

Al fin y al cabo, los mocosos podían aprender de los errores de los adultos.