Mi verdad

Preparatoria - ¿Una mala decisión?

Han pasado unos cuantos días del pequeño incidente con Diana y hoy es jueves de contra turno en la prepa, el contra turno se refiere a quedarnos más tiempo después de la hora de salida para tomar otra clase, en este caso es Cultura Física y Orientación.

Entro al salón y dos de los amigos de Diana, Esteban y Miguel, se acerca a pedirme que les haga una tarea, sin pensarlo acepte ya que es de TIC y son las tareas más fáciles, no logro entender porque todos piden ayuda para esta materia, en fin.

Estoy en clase de Biología cuando mi celular vibra y veo que es un mensaje, pienso en que debo esperar a que termine para poder revisar quien es, ya que a la clase no le falta tanto para terminar, luego de unos 10 minutos es cambio de hora y reviso mi celular, es Brandon, un antiguo compañero de la secundaria; ya llevamos unos días platicando lo cual se me hace un poco extraño ya que no éramos cercanos, muy apenas y nos dirigíamos la palabra, pero ahora que me siento tan sola sin mis antiguas ''amigas'' no hay porque hacerle el feo a nadie.

Brandon es todo lo contrario a mí, si a estatura nos referimos, para darme a entender es un poste de luz, no es muy guapo que digamos, no es que yo sea una modelo (claro está que no), pero no sé, como explicarlo, bueno, es feo. Podría decir que su personalidad es la mejor y eso lo salva, pero, todo lo contrario, me he dado cuenta con sus conversaciones tan superficiales y banales, que si no fuera porque me siento sola no seguiría con ellas.

Ademas algo quiere y no es solo una amistad, digamos que no es muy sutil con sus indirectas de querer tener algo conmigo, pero, aunque no es guapo, no logro entender porque se fijaría en mí, es una broma, pienso, pero al mismo tiempo me encanta que me den la atención que siempre he pedido, el sentirme querida, ¿a quién no le gusta que alguien la corteje? así que sin pensar en las consecuencias respondo su saludo de igual manera.

-Hola pequeña❤

-Hola❤

Ya llevamos todo el día ''conversando'', hablando de nada, es sorprendente como en tanto tiempo la conversación sea tan estúpida, tan sin chiste, pero hay algo en mí que quiere seguir hablando, y no es amor, de eso estoy segura, nuevamente, quiero hacerme sentir apreciada por alguien.

De pronto en la conversación me dice que me aprecia y quiere tener algo conmigo, me toma un poco por sorpresa, pero era algo que venía venir, no sé porque, pero le respondo de igual manera, que también me atrae y que podríamos intentarlo, antes de eso le aclaro que no estoy segura porque aún estoy dañada por lo que paso con Keenan. Días anteriores tuvimos la mejor conversación hasta la fecha, le conté todo lo que paso con Keenan y aunque son amigos me supo entender y dar la razón, pero por dentro estoy segura de que el ya conocía una parte de la historia; así que con ese preámbulo el sabia lo dañada que había quedado y que una relación tan rápido, aunque ya habían pasado meses, no era tan sencillo. Sin embargo, me aventure a algo que no sabía cómo terminaría.

Después de esa charla de sentimientos encontrados en la que termino cediendo a darle una oportunidad, todo se empieza a volver un poco empalagoso, no, mas bien un muy empalagoso, por no decir un chingo. Las conversaciones estúpidas y banales se incrementan pero con un detalle adicional, romanticismo en exceso, con palabras y frases como ''bebe'', ''mi amor'', ''chiquita'', ''preciosa'', ''me encantas'', ''te adoro'', ''eres lo mejor'' cada que termina una frase y no tengo en nada en contra del romanticismo, pero es que es demasiado exagerado, han pasado escasos 5 minutos de decirle que podemos intentar algo, ni siquiera ser novios y el ya me esta bajando la luna, las estrellas y hasta Pluton, solo falta que me pida matrimonio.

Llego a mi casa pensando en que ha sido el transcurso a mi casa mas largoooo de la vida y solo pienso en despedirme, le digo que llegue agotada de la prepa y me dormiré ya, el ingenuamente y con un -buenas noches mi amor- se despide de mi. 

Empiezo a creer que ha sido una muy mala idea decir que podemos tener algo, pero siento que tengo la soga en el cuello y solo aprieto mas al responderle -descansa mi amor-.