Encerrados

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Antes de empezar, pido perdon, porque se que los personajes no se adaptan a su personalidad real. El problema reside en que hace mas de 2 años que no veo Yu-Gi-Oh. Sin nada mas que decir, espero que disfruteis leyendo esta historia.

Pov. Jounouchi

Ya habían pasado varios meses desde que Seto y yo empezamos a salir. Ya no me acuerdo ni de como ocurrió, pero yo le confesé mis sentimientos, los cuales resultaron ser sorprendentemente correspondidos. Desde entonces ya era costumbre que pasase de vez en cuando a ver a Set en su oficina. *Toc,toc*
-Set, puedo entrar?- Pregunté, aunque ya sabía que la respuesta iba a ser sí.
-Pasa- Me respondió secamente. No se cuantas veces habia ido ya a su oficina, pero siempre me maravillaban las enormes cristaleras que daban a la calle. La oficina de Set era enorme, probablemente para no sufrir por su claustrofobia. No hacia mucho que había descubierto la fobia de Set. De hecho, fue pura casualidad. Mi dragón fue a coger algo de un armario y se quedó encerrado. No llevaba ni dos minutos ahí dentro para cuando le abrí la puerta, pero estaba mas blanco que una sabana y no paraba de temblar. Habia dos posibilidades: miedo a la oscuridad o claustrofobia, y por experiencia puedo prometer que la oscuridad no asusta a mi novio. Desde entonces siempre tenía cuidado de no llevarle a sitios pequeños ni muy llenos de gente. Lo que me extrañó desde que descubrí ese temor fue el hecho de que no le importaba usar los pequeños y cerrados ascensores. Es verdad que se ponía un poco tenso, pero nada en comparacion a esa mirada de terror puro que tenía cuando salió del armario (capten el doble sentido).
-Hoy no has venido a clase- Comenté naturalmente.
-Tenía una reunion importante. Dame cinco minutos y podremos irnos.
-Pensaba que no ibas a poder dejar el trabajo- Dije con sinceridad.
-He aprovechado que he venido esta mañan para dejarlo todo hecho- Sabía que me estaba mintiendo. Set y yo llevabamos mucho tiempo sin salir juntos a dar una vuelta, y yo era consciente de cuanto se estaba esforzando para conseguir tiempo libre de vez en cuando. Y se lo agradecia silenciosamente.
-Vamos.
-Eh?- Dije sorprendido. Me habia perdido en mis pensamientos
-Ya he terminado. Venga vamos- Salimos de su oficina y entramos al ascensor.

Todo parecía ir bien, y ya casi habíamos llegado abajo cuando el ascensor se paró repentinamente. Las luces estaban funcionando, por lo que probablemente se trataba de una avería, y no un apagón. Miré a Set y rápidamente me dispuse a pulsar el boton de emergencia del ascensor.
-Sí?- Preguntó una voz un tanto despreocupada.
-El ascensor se ha parado repentinamente y estoy aquí encerrado con una persona.
-En estos momentos mantenimiento esta realizando otra tarea. Se encargarán del ascensor tran pronto como terminen.
-No puedo esperar. La persona encerrada conmigo es claustrofobica y está empezando a sufrir un ataque de pánico. Necesito que nos saquen de aqui tan pronto como sea posible- Mire a Set otra vez, quien ahora estaba temblando.
-Esta bien. Mantenimiento se dirige hacia allá- Y la chica colgó. Oí como Set respiraba rapidamente y como se deslizaba por la pared hasta quedarse sentado. Me acerqué a él.
-Set, estas bien? Mantenimiento esta en camino para sacarnos de aquí.
-No... Necesito salir de aqui... ya...- Realmente estaba fuera de si. Podía notar el pánico en su voz y su mirada.
-Set, necesito que te calmes. Estas empezando a hiperventilar- Cada vez estaba mas preocupado. Cuando descubrí la claustrofobia de mi novio decidí investigar en caso de que algo como esto ocurriese. Si empezaba a hiperventilar podía terminar desmayándose, y eso era lo último que quería.
-No puedo... No puedo respirar...- Noté como Set empezaba a llorar. Queria abrazarlo pero me daba miedo empeorar la situación.
-Set, quieres que te abrace? Puedo abrazarte?
-Si... Por favor...- Vale, esto estaba llendo demasiado lejos. Mi amado dragón estaba actuando como si fuese una persona completamente diferente. Le abracé, sentandome junto a él.
-Set, necesito que respires a la vez que yo, tienes que dejar de hiperventilar. No pasa nada, están a punto de sacarnos de aquí, tu solo concentrate en respirar.
-No puedo... Tengo que salir de aquí... No hay suficiente aire...- Su respiración era cada vez mas elaborada, y para mejorar las cosas; el ascensor soltó un pequeño crujido.
-Por favor... No quiero...- Empezó a llorar mas.
-Set, calmate, no pasa nada, esto no se va a caer- A pesar de mi insistencia en que se calmase, yo mismo estaba ocultando mis nervios para ayudarle. No podía permitirme el lujo de entrar en pánico yo también.
-Jou... No puedo...- De repente Set cayó inconsciente sobre mi. Ese era mi momento de entrar en pánico.
-Set? Set, despierta!- Le tumbe en el suelo y coloque sus piernas sobre mis hombros. Cuanta mas sangre le llegase a la cabeza mejor. Realmente había hecho los deberes.
-Set, estas bien!? Despierta!- Le di unos pequeños golpes en la cara, intentando despertarlo. Su respiración seguía igual de acelerada, y si no estaba consciente no podía ayudarle a normalizarla.
-Set! Set! Por favor, despierta! Set!!
-Mmm... Jou..?- Baje sus piernas de mis hombros.
-Estas bien? Te has desmayado. Sabes donde estamos?- Sus ojos se abrieron como platos al darse cuenta. Mala pregunta.
-Jou... Cuando nos... van a sacar de aquí..?- Su respiración seguía siendo rápida y superficial, y ademas ahora tenía las manos sobre el estómago.
-Esta bien? Vas a vomitar?- Asintió con la cabeza. Justo en ese momento el ascensor volvió a moverse, y a los pocos segundos estabamos en la entrada. Para cuando las puertas del ascensor se abrieron, Set y yo ya estabamos de pie.

Mi novio no tardó en salir corriendo hacia el baño tan pronto como se abrió la puerta, y yo le seguía de cerca. Lo siguiente que recuerdo es que Set estaba vomitando en el baño, mientras que yo acariciaba suavemente su espalda a la vez que le decía cosas para tranquilizarle. No dejé que la puerta se cerrase en ningun momento, manteniendola entornada con mis pies. Una vez estaba seguro de que no iba a seguir vomitando ayude a mi pequeño gran dragón a ponerse de pie.
-Por qué no vamos al parque? Creo que deberías alejarte de los sitios cerrados un rato- Él solo me asintió en respuesta.

Ya sentados en un banco del parque cerca de Kaiba corp., Set apoyó su cabeza sobre mi hombro, exhausto, y aun sufriendo los sintomas del ataque de pánico de antes. Su ritmo cardiaco seguía siendo muy rapido y su respiración elaborada, pero cada vez estaba mejor.
-Set, voy a llamar a Mokuba para que se asegure de revisar que el resto de ascensores y la empresa están bien. Alguna objeción?
-Yo me... Encargo de eso...- Hizo ademán de levantarse, pero le fallaron las piernas.
-No, tu ahora vas a descansar y luego nos vamos a ir casa- Saqué el teléfono y llame a Mokuba, puesto que Set no me daba ninguna razón para no hacerlo.
-Mokuba? Dónde estas? Necesito que me hagas un favor.
-Que ocurre, Jou-nii?- Sonaba confuso, pues no solía llamarle a menudo.
-Necesito que vayas a Kaiba corp. y hables con mantenimiento sobre el estado de los ascensores. Que te cuenten todo lo que sepan.
-No va a encargarse mi hermano? Y además, porque tendría que preocuparme por los ascensores?
-La cosa es que antes tu hermano y yo hemos estado encerrados en un ascensor durante mas de un cuarto de hora, por eso lo de los ascensores. En cuanto a tu hermano-
-Esta bien Nii-sama!? Por favor, dime que no le ha pasado nada!
-Tranquilo, está bien. Estamos sentados en un banco en el parque en frente de la empresa, puedes venir a verle antes de ir a ver lo de los ascensores.
-Vale, voy para alla- Mokuba colgó sin darme tiempo a decir nada mas, y como buen miembro de la familia Kaiba que es, apenas tardó unos minutos en llegar a donde estabamos sentados su hermano y yo.
-Nii-sama!- Mokuba se tiró a abrazar a su hermano, pero le detuve rápidamente. Set todavía se estaba recuperando del ataque de antes, y no creía que una abrazo fuese una buena idea.
-Mokuba, preguntale primero. No estoy seguro de si un abrazo es una buena idea despues de lo que acaba de pasar. Crees que te va a pasar algo si te damos un abrazo, Set?- Pregunté al chico que seguía apoyado en mi hombro, intentando normalizar su respiración.
-No pasa nada. Probablemente un abrazo sea justo lo que necesite ahora mismo- Set abrió los brazos en dirección a su hermano, que lo miraba sorprendido al ver que el frio Seto Kaiba estaba buscando contacto humano. Aun asi se tiró a los brazos de su hermano. Yo me limite a pasar mi brazo por detras de sus hombros. Para cuando se rompió el abrazo, la respiración de mi novio ya casi se había normalizado, pero aun así seguía palido, y su estómago se revolvia, haciendo unos sonidos desagradables.
-Nii-sama, voy a ir a hablar con mantenimiento sobre los ascensores. Jounouchi, llévatelo casa y asegurate de que no le pase nada- Asenti y vi como el pequeño de los hermanos Kaiba se alejaba.
-Crees que puedes caminar? Si es así, deberíamos irnos.
-Si, ya estoy mejor.
-Eso es relativo. Estas tan pálido que pareces un fantasma, y tu estómago hace ruidos, haciéndome saber que tienes nauseas. Vamos a empezar a caminar, y si es necesario pararemos a mitad de camino a descansar.
-Nadie puede contigo en modo sobreprotector, verdad?- Me sonroje un poco. Set estaba siendo muy sincero.

Tardamos alrededor de hora y media en llegar a la mansión que era nuestra casa. Solo hacía dos semanas que me había mudado allí, dejando atrás a mi padre alcohólico, pero ya me sentía en casa. Acompañé a Set a su habitación. En ese momento el sueño ya se había apoderado del cuerpo de mi novio.
-Tengo sueño...
-Metete en la cama. No te preocupes por mi, yo me acostare mas tarde- Intenté alejarme en dirección a la puerta, pero algo me lo impidió.
-No te vayas. No me dejes solo- Podía ver el miedo reflejado en los ojos de Set.
-Esta bien, tu ganas. Me quedare aquí.
Incluso cuando te duermas. Le pediré a Mokuba que me traiga la cena.
-Arigato...- Se durmió nada mas darme las gracias, y yo me quedé allí, cumpliendo mi promesa.

Cuando me desperté a la mañana siguiente Set seguía dormido. Eran las 11, pero no me importó a pesar de ser miércoles. Nos habíamos ganado un descanso, aunque a los profesores no les fuese a parecer bien.
-Mmm
-Buenos días Set. Que tal te encuentras?
-Mejor- Miró el reloj- No deberíamos de estar en clase?
-Hoy vamos a descansar. Nos lo merecemos después de lo de ayer- Le besé suavemente. Rodee su cuerpo con los brazos y le acerqué hacia mi. El hundió su cabeza en mi pecho y ambos nos volvimos a dormir, disfrutando de la presencia del otro.

Y hasta aquí esta historia. Creo que es la primera vez que investigo tanto para escribir algo, y la primera vez que me queda así de bien escribiéndola en un solo día. Espero que vosotros hayáis disfrutado leyéndola como yo escribiéndola. Nos vemos! 😁

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