No sé cuánto tiempo llevamos de camino pero lo que sí estoy segura es que vamos fuera de la ciudad. Porque el ambiente que nos rodea es cálido lleno de paz. No entiendo porque Zac hace todo esto por mí, si lo único que yo hago es insultarlo, se preocupa por mí porque antes de salir de la cuidad pasamos por una farmacia y el compro agua oxigenada una cura y alcohol. Eso deja mucho bueno que decir de él, solo tal vez no están malo como yo lo tacho porque en otro chico me hubiera visto tirada en la calle y gritando lo desagradable que era, pero él se acercó a mí y me ayudo.
-Llegamos. -habla trayéndome a la tierra de nuevo salgo del auto.
-¡Qué! hermoso Zac esto.. esta tan mágico. -exclamo sorprendida. Es un hermoso atardecer acompañado con toda la cuidad y al horizonte se ve como el sol se esconde es tan hermoso, estamos como en una gran roca que queda un poco lejos de la carretera. Me acerco un poco más y me siento sobre ella para apreciar esto tan hermoso, Zac se sienta a mi lado en silencio en sus manos tiene la bolsa de la farmacia.
-Siempre vengo aquí cuando necesito estar solo, casi nadie conoce este lugar no es por nada pero, eres a la única que he traído aquí. -comenta viendo al horizonte, es difícil de creer pero en su voz hay mucha sinceridad nos quedamos en silencio la verdad no sé qué decir odio no saber qué decir.
-Es mejor que te cure esa herida. -susurra solo asiento con todo esto se me había olvidado lo de hace rato. Abre la bolsa y saca los analgésicos, los pone sobre el suelo se voltea hacia a mí y se sienta en forma de indio.
-Esto dolerá pero solo un poco. -dice acercando un pedazo de algodón empapado de agua oxigenada a mi cuello, al sentir el tacto en mi piel me da un escalofríos.
-Te duele.
-No.
Lo hace suavemente como si mi piel fuera un cristal. Siento su aliento fresco chocar contra mi cuello, lo he visto que ha tragado saliva varias veces me provoca gracia pero no digo nada. Aparta el pedazo de algodón de mi piel y lo desecha agarrando otro más limpio y empapándolo de alcohol y lo pasa lentamente por mi herida.
-¡Ay! -grito cerrando fuertemente los ojos, duele demasiado.
-Tranquila solo será un poco más. -anuncia.
Siento un alivio cuando quita el algodón y ahora pone una pequeña cura sobre la herida guarda todo en la bolsa y le hace un nudo la pone a un lado.
-¡Gracias! Zac.
-De nada, no fue tan profunda, solo fue como un roce, ni se nota. -charla volviéndose a sentar hacía el frente encogiendo sus largas piernas y poniendo sus brazos alrededor de ellas apoyando su mandíbula. Lo observo se ve tan débil hasta tierno, pero que cosas estoy diciendo.
-Zac -murmuro solo para que él me escuche solo hace un "mmm" -Porque haces todo esto por mí, si siempre te trato mal.
-Porque, me gustas Sky desde que te vi el día que te encontré en el baño. -suspira. Abro mis ojos y mí boca no sé qué decir suena muy sincero en lo que dice, no hay ni una pizca de broma en su voz.
-Zac, yo... -me interrumpe poniendo su dedo índice en mis labios, sentí algo muy extraño como una sensación de electricidad en mí estómago porque carajos siento eso.
-No digas nada, yo sé que tu solo me ves como un idiota y que no te gusto.
Se acerca más a mí, me quedo paralizada sí es cierto lo creo idiota pero creí que él no lo creía cuando se lo decía.
-Yo sé que lo soy y quiero cambiarlo -susurra muy cerca de mí cara tragó saliva -Porque me gustas mucho Sky, si tú supieras como palpita mí corazón en este momento. -pega su frente con la mía, no entiendo porque mí mano toca su pecho ¡Que estoy haciendo por dios! Y toco su corazón efectivamente late muy rápido como si se le fuera a salir. Lo veo directamente a los ojos le brillan tan bonito me ve muy bonito, no quiero que me vea así no Zac él no. Lo siguiente que pasa me deja paralizada no puedo creer lo que estoy haciendo. El une nuestros labios en un suave beso, lo peor es que yo le estoy correspondiendo.
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Todo Se Desmorona.
Teen Fiction-Sky detente, Sky para por el amor de dios.... -grita Liam mientras me sigue lo ignoro y sigo corriendo como si de eso dependiera mí vida es una sensación muy escalofriante como si todo se estuviera desmoronando en mí interior. Volteo hacía atrás...