El Cielo Baja a la Tierra

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FLOR: -Me muero de ganas de hacer el amor con vos-

JAZ: -Flor...no quiero que te sientas presionada ni nada. Sabés que yo no espero nada de esta noche. Me conformo con tenerte así-

Y ahí estaba Jazmín nuevamente cuidándola. Siempre pensando en los sentimientos de Flor.

FLOR: -Jaz, jamás en la vida estuve tan segura de algo. Y si estoy así es porque vos me transmitis seguridad, confianza. Y estoy dispuesta a todo con vos-

No dejaban de mirarse. Así abrazadas, moviéndose lentamente al vaivén de la música. La mirada de Jazmín era tan penetrante que Flor sentía que podía ver a través de su alma. La podía leer como a un libro.

JAZ: - (la tomó del cuello y la besó) -Te quiero tanto Flor-

FLOR: -(pegando su frente a la de Jazmín y tratando de calmar sus rápidos látidos)  Yo también Jaz, dejame que te lo demuestre-

Ambas llegaron a la habitación sin dejar de besarse. Jaz sintió la cama detrás de ella y se sentó atrayendo a la morena junto a ella.

JAZ: -Flor...prometeme que si en algún momento sentís la necesidad de parar, me lo vas a decir. Lo último que quiero es hacerte sentir incómoda-

FLOR: -Ya lo sé mi amor. (Acariciando su rostro) Y sé también que pase lo que pase vos siempre me vas a cuidar. Pero vos no tengas miedo de tocarme Jaz, no me voy a romper-

Flor se acercó nuevamente para encontrar sus labios, besándola con hambre y mucha pasión. Jaz le devolvió el beso con la misma intensidad. Dejando que todos sus sentimientos que había escondido hacia la morena todos estos años corran libremente. Ya no tenía que esconderlos o tener miedo que no sean recíprocos. Ellas sabían en sus corazones y en sus almas que era un amor que tenía que ser.

Los besos iban aumentando la pasión que las consumía.
Jaz se separa lentamente de Flor. La morena se acomoda para quedar parada enfrente de Jaz y muy lentamente lleva la mano hacia la tira del vestido. Primero de uno y luego del otro. Lo hacía sin dejar de mirar a la colorada. El vestido se desprendía de su cuerpo tocando el suelo. Quedando la morena en ropa interior.
Jaz se levantó de la cama como un resorte atacando nuevamente los labios de la morena. La giró con suavidad y la acostó en la cama.

FLOR: -Necesito sentirte-

Ante aquellas palabras la colorada posó sus manos en el vestido con la intención de sacárselo pero la morena la frenó.

FLOR: -Esperá, dejame hacerlo a mi-

Se incorporó en la cama quedando de rodillas sobre ésta y delicadamente empezó a sacarle el vestido a Jaz.
Se sorprendió porque la colorada no llevaba corpiño.
La observó de pies a cabeza. Aquella mujer era la belleza pura.

FLOR: -Dios mio...sos hermosa. (Todos esos deportes que siempre hacía la colorada le pasaron factura. La colorada tenia un cuerpo tallado por los mismos dioses y Flor estaba eternamente agradecida)

JAZ: -(acercándose a ella) ¿Estás bien?

FLOR: -Si- (sintiendo que no era justo la ropa que llevaba. Llevó sus manos hacia su espalda y desabrochó el corpiño dejando que cayera al suelo junto a las demás prendas. Su primer instinto era taparse pero la colorada se lo impidió).

Jaz no paraba de mirar a la morena. La miraba con deseo, con admiración.

JAZ: -Sos lo más hermoso que ví en la vida. Nunca te escondas de mi-

Esta vez fué Flor quien la atrajo hacia ella para besarla y ambas se dejaron caer en la cama.

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