Era jueves, la princesa Carmen se encontraba en su castillo ya que sus papás habían salido a cenar con su hermana, pero ella no había querido. Su mejor amiga, Jennifer, llegaría hasta mañana, así que la princesa estaba sola.
La princesa Carmen no podía dejar de pensar en qué pasaría mañana a las 7 de la tarde, ¡era su primera cita con el chico de sus sueños!
Germán Garmendia le había robado por completo el corazón.
De pronto Carmen cayó en cuenta, ¿qué diablos usaría mañana para su cita? Necesitaría los súper consejos de Jennifer para poder vestirse adecuadamente.
En un intento de desesperación, Carmen le marcó a Jennifer desde su teléfono real.
-¿Hola?- se escuchó del otro lado de la línea- ¡Carmen!- dijo Jennifer, Carmen pudo adivinar que su amiga había visto el ID en su celular.
-Hola, Jennifer- Carmen soltó un suspiro- Necesito tu ayuda
-Usa siempre condón, no quiero ser una tía aún- dijo Jenny rápidamente. Carmen hizo una mueca.
-¡Iugh! Eso es desagradable- dijo riéndo Carmen- Necesito que me ayudes para lo de la cita con...- fué interrumpida.
-¡Ah, claro, con Germy!- respondió una Jennifer entusiasmada del otro lado.
'¿Quién es Germy?' la sexy voz del novio de Jenny se escuchó del otro lado.
Carmen escuchaba cómo le explicaba que era el chico con el que saldría, y después siguieron hablando por teléfono.
-No te preocupes, Carmelita. Mañana estaré ahí con muchas compras- dijo emocionada.
Carmen sintió un alivio al escucharla decir eso. Después de agradecerle y despedirse, Carmen colgó.
Tres golpes en la puerta de su habitación la hicieron sobresaltarse. La puerta se abrió dejándo ver un chico rubio entrar a la habitación.
Rubén Doblas, rubio, alto y, aparte de Jenny, mejor amigo de Carmen desde hace mucho tiempo.
-Rubius- dijo Carmen, llamándolo por su apodo que ella misma había inventado- ¿Qué haces por aquí?
-Pasaba por acá y quise venir a visitarte- dijo Ruben con su raro acento.
-¿Y qué hay de nuevo?- dijo Carmen.
-¿Son ciertos los rumores que corren por la aldea?- le preguntó su mejor amigo.
-¿Cu...cuáles rumores?- dijo Carmen nerviosa.
-Los rumores de que vas a salir con un plebeyo, Carmelita- dijo Ruben.
-Ehh, sí- dijo finalmente- Saldré mañana con él, su nombre es Germán- Carmen sonrió.
Al mencionar el nombre de Germy, Ruben palideció. Abrió los ojos como platos y se llevó las manos a la cabeza.
-Ru, ¿qué te pasa?- dijo Carmen preocupada. Nunca había visto a su mejor amigo así.
-Yo...nada- Ruben se levantó de donde estaba sentado- Me tengo que ir- y salió por la puerta sin decir más.
Aunque Carmelita no podía parar de preguntarse qué era lo que le había pasado a su amigo, no podía negar que tenía un sueño terrible, pues ya era tarde.
Carmen acomodó su cama y se acostó sobre ella. Se quedó dormida pensando en aquel chico de ojos color café. Aquel chico que le sacaba suspiros y sonrisas. Aquel chico en el que Carmen no podía dejar de pensar. Y durmió aún más feliz, con el pensamiento de que mañana por fin lo vería.
