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No había visto a JungKook de esta forma. O sea, él siempre es un poco reservado y frío, es raro verlo sonreír, a pesar de que siempre está serio y da un poco de miedo él es así y eso lo hace especial. Pero ahora es diferente, estoy presenciando un JungKook enojado, verlo así por primera vez me da miedo no sé de lo que sea capaz.

—JungKook vámonos ahora —sugerí.

—Y, ¿Dónde piensas ir?. Es tarde —contestó.

No sé que debo hacer ahora. Uno de esos chicos se está acercando.

—JungKook, vámonos.

Lo tomé de la mano, gracias al cielo llegó el tren así que lo obligué a subirse conmigo. Me senté y él se sentó a mi derecha.

—¿Estás loca? —cuestionó.

—No, tú estás loco.

—¿Por qué?

—Sí los hubieras podido matar con la mirada lo hubieras hecho —reí.

—Mejor no recordemos eso —hizo pausa —El lugar más cercano es mi casa.

—¿Conoceré tu casa?

—No te emociones.

—¿Ah? ¿Por qué no?.

—Llegarás tarde a tu casa, todo por arrastrarme contigo.

—Estabas a punto de hacer un show, todo por unos tontos.

—¡Te cuido tonta!

—Eres un Kookie sobreprotector—sonreí.

—Tonta, por cierto —hizo pausa —Tenemos un perro en casa, se llama Jjanggu. Verás donde metes a tu gato.

—Se llevarán bien —sonreí.

(...)

Creo que tal vez si estoy loca por venir a la casa de un amigo a esta hora (9h00 pm). JungKook vive en un departamento un poco más grande que el mío; su perrito Jjanggu es muy bello, me ha contado que este es de Jin pero le pidió que lo cuide. No había nadie en casa, JungKook me dijo que su mamá salió así que estamos solos. Me senté el sofá sin soltar el bolso en el que sostenía al gato.

—Ven a mi cuarto —dijo JungKook.

Lo miré extrañada... pues es una propuesta un poco rara ¿verdad?

—¡Tonta! ¿Quieres qué Jjanggu se coma a tu gato? ¡Ve a darle de comer allí dentro!

Me dirigí al cuarto de JungKook, me dió un platito con un poco de leche. Entré y cerré la puerta, saqué al gato del bolso y puse el platito en suelo para que pueda tomar la leche.
El cuarto se JungKook es muy... ¿Varonil? Está todo tan organizado y aseado, dejé al gatito y me dirigí a la cama para sentarme, es bastante cómoda.
Luego me acosté, es muy cómoda enserio. JungKook abrió la puerta.

—¿Tienes sueño?, porque si quieres dormir lo harás en la cama de Jjanggu.

—Eres un tonto —sonreí.

Mi teléfono comenzó a sonar, levanté de golpe. Lo había dejado sobre el escritorio de JungKook. Él se adelantó y tomó mi celular.

—JungKook no vayas a hacer nada —me levanté para ir hacia él.

—Sólo es Kim Taehyung —le colgó.

—¿JungKook? ¡Tae se enojará mucho!

—¿Tengo cara de qué me importa? —cerró la puerta con fuerza.

Él muy idiota se llevó mi celular.

(...)

Tengo que admitir que JungKook cocina muy bien, dijo que su hermano le había enseñado. Sigue sin devolverme mi celular y ya estamos llegando a la estación para tomar el tren que me lleve a mi casa, y sí, él va a acompañarme.
Nos subimos en el tren, las personas que hay son contadas con los dedos de la mano.

Chico Ilegal. [Kim Taehyung y Tn] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora