Apagón

Sólo en casa.

.-No, definitivamente no fue mi imaginación - dijo la parte irracional de mi cabeza, la parte que estaba muerta de miedo.

Una vez más, como siempre, estoy sólo en casa. Mis padres y hermanas fueron de fiesta y yo, debido a la terrible jaqueca que me molesta desde hace ya varios días, tuve que quedarme aquí, solitario, sin más compañía que mi música, proveniente de una pequeña radio que yace conectada en mi velador, al lado de mi cabecera. Trato de dormir escuchando algo de música relajada, con todas mis luces encendidas. Desde pequeño que fui un niño bastante sensitivo, sobre todo con lugares de atmósfera cargada, y esa casa no era para nada de mi agrado. Desde el primer momento en el que pusimos un pie en esa casa tuve la sensación de que había algo más... Y me preocupaba mucho ese "algo". Las cosas eran mejores cuando Thor, mi perro, estaba vivo. Era toda la compañía que necesitaba al momento de estar sólo... A ambos nos aterraba esta casa, sobre todo a oscuras. Esta es la primera vez que pasaré una noche aquí totalmente sólo.

Estoy acostado tratando de dormir, acurrucado en una esquina y con suave música sonando de fondo. Estaba a punto de entrar al reino de los sueños cuando ocurre el peor escenario posible para mi... Un apagón.

El repentino golpe de oscuridad me aterra, al punto de comenzar a sudar frío, con la piel erizada, totalmente paralizado en un rincón de mi cama. Oigo una tabla crujiendo y mi miedo se transforma en pánico, pero algo suprime el movimiento de mi cuerpo, como si dos gigantescas manos me estuviesen sosteniendo fuertemente, atrapado entre mis sábanas, y mi jaqueca volvía todo peor.

Otro crujido, esta vez mucho más claro.
Pasos.
No estoy sólo...

.-No es nada, me estoy imaginando todo esto, demasiadas películas de terror - trataba de decir mi parte racional, pero incluso esa voz sonaba trémula en mi cabeza, como si no estuviese ni siquiera un poco convencida de aquello. Mientras la parte irracional de mi se imaginaba los peores escenarios posibles, formas de terror indescriptibles, seres paranormales sacadas de un buen libro de terror...

Otro paso más, fuerte y firme, siento que mis pulmones se vuelven cada vez más y más pequeños, me falta el aire y estoy sofocado en el rincón de mi cama en la cual decidí acurrucarme. Siento que moverme puede llegar a ser el fin de todo. Moverme sería darle señales de vida a lo que sea que me acompaña en estos momentos.

Un paso más, cada vez se sienten más cercanos. Aprieto mis dientes, estoy cubierto totalmente de sudor frío, ese sudor que sólo puede provocar el pánico, el sentimiento de enclaustro se vuelve cada vez más y más fuerte.

.-Es el fin - pienso, aterrado. Esta cosa me tiene, y no puedo hacer nada al respecto más que esperar mi final. Desearía que estuviesen mis padres. Desearía que estuviesen mis hermanas. Desearía estar con Thor, mi fiel perro guardian. Desearía estar en cualquier lugar menos aquí.

Mi puerta, dejada entreabierta, se abre muy lentamente, como si un frío viento del infierno estuviese empujandola... Sólo que todas las ventanas y puertas de la csa estan cerradas, y estando en pleno verano hace un clima seco y sin nada de viento. Este es mi fin...

De repente vuelve toda la luz de golpe a mi casa, apenas siento la luminosidad entrar por entremedio de mis párpados siento un alivio extremo. Recupero mi movilidad, ya no tengo esa sensación de parálisis que tanto me aquejo durante el apagón.

Mi radio vuelve a encenderse y, de la nada, comienza a sonar una canción la cual no sabía que tenía. Pero la reconocía, el pavor que causa Marilyn Manson es muy fácil de reconocer.

"Sweet dreams are made of these... Who am i to disagree?..."

Me volteo para apagar la radio cuando mis ojos se topan con una figura horrorosa. Lo que parecía ser una cara, blanca como la nieve, con dos ojos enormes, inyectados de sangre, mirandome fijamente. Y su sonrisa... Una enorme y roja sonrisa de oreja a oreja, con el semblante más tenebroso que haya visto nunca.

"Dulces sueños, Ignacio"