-Es así como pasa-
Me tocó el ojo izquierdo, esta sangrando, no me duele pero la sangre fluye, es de noche, no hay estrellas, aún así puedo ver claramente el color de las hojas de los árboles del parque, el viento sopla, es normal tener miedo, sangre en mis manos y no recordar de quien es, un objeto en mi Palma, lo presiono con fuerza como si al soltarlo caería a un abismo oscuro y quizás así sea poreso la sujeto hasta que mi mano se torna blanca, no la soltare por nada del mundo, ella me salvará de lo que venga dentro de tres días, tres horas, tres minutos, tres segundos, no me importa, sólo se que este objeto inanimado y sin existencia es lo único, lo único que me mantiene con vida, si la suelto, moriré, vendrá, lo se, pasaron tres segundos y no apareció, aún tengo tiempo, el tambaleo de mi andar me da a entender que el sueño y el hambre me dominan, salgo del parque, la acera es más fría, el viento sigue soplando, ahora los árboles no me abrigan y quiero volver al parque, pero no puedo, una pierna se arrastra, la otra entumecida, los tobillos descubiertos a la noche gelida¿ qué paso?¿En que punto llegue a esta situación? El sueter blanco bajo el abrigo que tengo se tornaba gris, lo paso por mi ojo y se tiñe de rojo, sigue sangrando,pasaron ya tres minutos,aún no, seguiré vivo un rato más, llegue con esfuerzo hasta la esquina con un poste de luz, me recoste en ella, respire profundamente y mis pulmones casi se congelan, no quería llorar, o más bien no podía.
El objeto en mi mano me alivia, ella es todo mi mundo por ahora, trato de entender donde está, ¿llegare antes o después?¿sera tarde?¿porque hace tanto frio? Viví mil noches calurosas ¿porque ahora tenía que congelarme? Yo no lo decidí, fue el o al menos eso creo, un reflejo amarillo y esto¿cuanto falta para llegar? No lo se pero estoy aun lejos,despues de treinta calles de mi paso desagradable llegó a otro parque, la banca de este me llamaba.
Me siento sólo un momento,dejó caer mi cabeza hacia atrás, el cielo sigue sin estrellas, por cada una faltante hay una nube, mando mi mano libre al rostro, sigue sangrando, si me quedo sin sangre no servirá de nada el camino recorrido,suspiro, ya pasaron tres horas, no pasa nada ¿que espera? Tengo sueño pero al cerrar mis ojos ahí está, cabello por todas partes, quiero dormir, quiero comer, no se cuanto más poder aguantar, con suerte sólo serán tres días, son las tres treinta de la mañana,escucho un llanto que me pone alerta, me levanto de la banca y al mismo tiempo casi caigo al suelo pero logró mantenerme en pie,levantó la vista, un niño llorando me señala, desde su ventana, un cuarto piso en el edificio frente al parque, de reojo a media ventana me observa una mujer, la madre, con una expresión de desagrado, unos veinte metros pasando la calle y aún así puedo ver su expresión, un sonido ensordecedor en medio de la noche, una sirena? Ubiera querido que sea una mujer pez pero no, las luces rojas y azules me lo decían, debía irme y no podía, tres pasos y caí, no solté el objeto en mi mano, me arrastre tras un árbol, la patrulla se detiene bajan dos hombres con un paso fuerte, me delataron, debo correr ya no recuerdo como hacerlo, una mano en el árbol, la otra sostiene el objeto de rigides extrema y alargado, se acercan, puedo hacerlo, unas linternas cegaron mi ojo derecho, el izquierdo cubierto de sangre aún los ve, un giro de mi muñeca , uno esta está en el suelo, un golpe en la cabeza, el otro desenfunda un arma y me está apuntando, levantó mi mano y su muñeca esta rota, realmente este objeto me mantiene vivo, me voy como puedo, no me detengo hasta creer que estoy...seguro no es una palabra que pueda usar, seguí hasta no poder más,un callejón me resguarda del viento, cartones y periódicos acolchona el suelo,no la encontraré me digo,los primeros rayos del sol entran por el callejón miro mi mano ocupada,¡es sólo una barra de hierro!, esto no me salvará de nada, me recuesto, sólo dos días más,mientras de mi ojo izquierdo cae sangre de mi ojo derecho caen lagrimas
