sintonía ; 튜닝 ( jinhwi ) adaptación

Prólogo

Bae Jinyoung era un loco apasionado por el baile. Sin embargo, se encontraba ahí, en ese teatro y en ese concierto, que para él era algo sumamente aburrido.

¿Qué hacía ese chico apasionado por el baile y el hip hop en un concierto de música clásica e instrumentista? Ni el mismo lo sabía, estaba en uno de sus intentos desesperados por obtener un nuevo ritmo. Pronto sería el concurso de baile nacional, en el cuál, cada año participaba con un estilo diferente y nuevo. En los cuatro años que participó, tomó los estilos de Break Dance, Tectonic, Locking y Krump, respectivamente. Ganó la victoria año a año, pero esta vez quería mostrar algo diferente. Quería ser un BaeJin distinto.

Se sentía frustrado y cansado, pues había intentado de todo. Ballet, Folklore, danza tradicional. ¡Simplemente nada le daba! Nada le convencía, y además sentía que se veía ridículo. Igualmente, se rehusaba a participar con las canciones típicas que se usan en esos tipo de concursos, pues el año anterior estuvo a punto de perder debido a que cuatro personas más usaron la misma pista que él. Este año no pensaba en darle el lujo a alguien de empatarlo, y muchísimo menos ganarle.

Estaba a punto de caer dormido. Por ende, estaba a punto de irse. O mejor dicho, ya se estaba yendo, la música instrumental no era lo suyo.

Caminando con lentitud, percibía cómo ya iban pasando de un instrumento al otro, y cómo presentaban al músico siguiente. Pero cuando dicha melodía sonó, se detuvo de golpe.

Conocía esa canción. ¡Claro que la conocía! Era la que había bailado antes. Wake me up de Avicii comenzó a sonar, y un interesado BaeJin se dio media vuelta, y por un momento pensó que el chico que estaba en el escenario cantaría. Pero en lugar de eso, al acercarse notó cómo un muchacho de delicadas facciones tocaba el saxofón en vez de estar por cantar.

El saxofón conectó con él, de tal manera que hizo que su cuerpo se paralizara. Al instante un choque eléctrico abundó en su persona, aquella melodía hacía que inconscientemente dé ligeros movimientos corporales. Hasta que logró acoplar sus movimientos a la perfección.

En un momento la melodía se detuvo. BaeJin hizo movimientos más marcados hasta que de nuevo el sonido del saxofón se adueñó del lugar.

La presentación había terminado, y todos aplaudían a excepción de Jinyoung. Ni él entendía lo que acaba de ocurrir. Él se había conectado con las notas del saxofón y al sonido de esa música. En ese momento, lo descubrió.

Ese era el ritmo, esa era la melodía; necesitaba a ese saxofonista. Volvió a su lugar anterior, aún observando al chico que tocaba en ese escenario. Se sorprendió al ver cómo cambiaba la melodía tan moderna y comenzaba a tocar sin compañía de un sonido más. Eran sólo él y el instrumento.

Jinyoung se tomó la libertad de observar detalladamente a ese chico. Arriba de ese escenario destacaba a tal punto de que él y su saxofón, parecían uno. Daba la impresión de que aquél músico no notara que lo estaban observando. Como si no hubiera público. "Era la imagen perfecta".

Un presentador salió al escenario, y dijo algunas cosas que Jinyoung no prestó atención. Después, todos comenzaron a levantarse de sus asientos y decir una que otra cosa, como "Ese último chico... Los mitos no son mitos", o "él realmente tiene talento". Y uno que otro prometía volver si él se presentaba, pero ninguno dijo su nombre.

BaeJin estaba frustrado. Decidió esperar a que ese chico saliera. Pero el recinto comenzó a vaciarse, y era más que obvio que ya no saldría. Así que fue a buscarle.

— Disculpa... Estoy buscando a un chico, tocó el saxofón y se presentó solo.

Había un hombre del staff, así que no dudó en dirigirse hacia él.

— Oh, él salió por la parte trasera.

BaeJin suspiró.

— Gracias.

Entonces ahí, fue directo a la salida que e habían indicado. No tardó tanto en ello, y emocionado caminó un poco más cerca de él. Pero al notar que el chico de nombre desconocido volvió a sacar su instrumento, se quedó estático. Y como un acosador decidió esconderse detrás de un árbol.

Él comenzó a hacer sonar su instrumento, y BaeJin se sintió vacío en sí mismo. La manera en que tocaba el músico realmente le afectaba.

Aquella melodía era tranquila, pero con aires de tristeza y melancolía. Eso hacía sentir triste a Jinyoung.

Una muchacha de cabello castaño y vestido blanco lo hizo salir de su trance que había creado con el saxofón.

— Daehwi-ah, es hora de irnos.

La chica le había hablado, pero el saxofonista no la había oído. O a ojos de Jinyoung, la estaba ignorando con toda la extensión de la palabra. En ese entonces, ella cambió su semblante dulce y tranquilo a uno más demandante.

— Lee Daehwi, deja de tocar en este instante. Recuerda el horario, debemos irnos.

Él le hizo caso. Paró de tocar de inmediato dejando una nota al aire y cortando toda la atmósfera que había creado.  Guardó su instrumento y siguió a la dama que lo ha iba ido a buscar, alejándose ambos del lugar.

— Lee.. Daehwi... Bueno, al menos sé su nombre.

Dijo dando un suspiro al aire y volviendo a casa.