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– Ashton me llamó hoy. Te comportaste bien, hablaste con el.– mamá me sonrió y asentí rápidamente.

No, mamá. No sabes lo qué pasó hoy.

– ¿Mañana vendrá otra vez cierto?– alcé una ceja y está asintió sonriendo.

– Sophie... Verás, estaba pensando en invitar un café a Ashton. Me parece muy simpático y por alguna extraña razón creo que el siente algo por mi.– esta me agarró la mano y abrí los ojos sorprendida.

– Mami, mamá... Yo, yo he hablado con el y me dijo que estaba interesado en una chica que había conocido en... En la iglesia, si.– trate de sonar lo menos nerviosa y está frunció el ceño.

– ¿De veras?– esta abrió su boca y asentí.

– Lo lamento mamá.– torcí mis labios y esta soltó un quejido.

No. Mi madre no me podía quitar a Ashton.

– Pero hay que intentarlo por lo menos ¿no lo crees, Sophie?– esta entrecerró sus ojos y mordí mi labio inferior.

Mi propia madre me estaba probando...

– ¡Papá murió hace poco, y ya piensas salir con alguien!– exclamé y esta abrió su boca. Tal vez me estaba pasando, pero Ashton es mío ahora. De nadie más.

Corrí subiendo las escaleras hacia mi habitación, solo ignoré los gritos de mamá llamándome.









Desperté y abrí la ventana, vi como Ashton caminaba al porche, sonreí y le llamé.

– Nos vemos en la tarde.– exclamé y este me guiñó el ojo para luego lanzarme un beso en el aire.

Me dirigí al armario y me desvestí, elegí un conjunto de terciopelo color beige. Luego me puse mis zapatillas y baje las escaleras.

– Buenos días, amor. ¿Estás bien luego de lo de ayer?– mamá me miró y suspiré.

Me giré ignorándola.

Entré a la cocina y del refrigerador saqué la caja de leche y me serví un poco en un vaso.

– Tu mamá cree que tú no quieres que jamás tenga un nuevo acompañante, es decir, un padrastro para ti– de repente Ashton entró a la cocina y me sujeto de las caderas.

Me sobresalté causando que la caja de leche cayera al suelo.

– ¡Ashton!– grite y este me apretó el trasero, subió su mano a mi abdomen y lo acaricio.

– ¿Cómo me llamaste?– susurró en mi oído y lo miré. Se veía tan jodidamente bien con esos lentes.

Jadee al sentir sus manos subiendo a mis pechos y enterré mis uñas en un pañuelo de cocina.

– Pa...papi– gemí suave cerca de sus labios y este besó mi cuello lentamente.

Su lengua trazaba círculos, eso me excitaba más.

– Ella quiere contigo, pero tú eres mío. Solo mío, de nadie más– susurré esa última frase y este soltó una risita amarga. Me volteé y miré sus labios.

– Eso lo sé, y tú eres solo mía. Te castigaré si te veo con alguien más– este me señaló y asentí sonriendo–. Limpia eso, ahora.

Señaló la leche derramada en el suelo y sonreí.

Este desapareció de la cocina y me apresuré en limpiar el desorden que había hecho.

















volví de la muerte perras, me extrañaron ¿no? y extrañaban mi smut okno. llegamos a los 2k waaaaaaaaaaaaaahhhh en fin no borren esto de sus bibliotecas, esto solo comienza *risa malvada*

desire;afiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora