Nuevo Propósito Del Año

Fiesta De Año Nuevo Por Los Mitchell

Mi madre siempre hace una fiesta por el fin del año e invita a todo el que se le ponga en frente, mi padre por otro lado no se opone, con que sea una fiesta y exista una justificación para beber alcohol, está bien.

En mi caso por más que no quiera tener gente en la casa no puedo opinar, mi opinión no es válida para ellos, mis padres solo quieren que socialice pero eso nunca va a pasar, en las fiestas siempre salgo de mi habitación solo para saludar y robar uno que otro bocadillo.

Espero con ansias a que la abuela haga sus galletas y su rompope es lo único bueno que sucede en estas fiestas.

Y aquí estamos saludando a cada persona que entra por la puerta principal.

Ya que había saludado a los mismos invitados de cada año, mi madre se fue para atenderlos y mi padre a convivir.

Escucho el timbre de la casa sonar antes de moverme de la puerta.

-¡Abre Por Favor Beca!- grita mi madre mientras veo que pasa con algunas botanas.

Al abrir la puerta principal, miro que son personas desconocidas para mi, en mi vida lo había visto, como dije anteriormente, mi madre invita a la persona que se encuentre.

-Buenas noches, somos la familia Beale. Ellos son mi esposo Mike y mi hija Chloe, yo me llamo Isabel. ¿Está es la estancia de los Mitchell?-

Estaba perdida en los ojos de aquella chica, muy azules, eran más claros que los míos, y yo que creí que mis ojos eran lindos.

La familia Beale era pelirroja y muy amables por cierto. ¡O rayos! Tengo que darles el paso.

-Sí, es un placer. Me llamo Beca Mitchell, soy hija de los anfitriones jeje. Pasen y pónganse cómodos- me hice a un lado para que pasaran.

-Es una casa muy linda-

-Muchas gracias. ¿Les ofrezco algo de tomar?- no soy mucho de modales pero no quería irme para poder ver más a Chloe. Cualquiera lo haría ¿no?.

-¿Tienen vino?- pregunta el señor Beale.

-¡Mike!- la señora Beale lo mira mal.

-Descuide, aquí se tiene de todo tipo de bebidas. Así que siéntanse con toda la libertad de pedir cualquier bebida-

-Oh... pues en ese caso yo te pediré un agua mineral si no es mucha molestia-

-No es molestia- les sonreí.

-Yo solo agua, gracias - dijo Chloe devolviendo la sonrisa.

-A la orden. Si gustan ponerse cómodos, yo en unos momentos volveré con sus bebidas-

-Muchas gracias querida-

-Es un placer-

Ya que fui para servir sus bebidas al volver estaban dónde los había dejado al irme.

-Un vino para el señor, agua mineral para usted y agua para ti-

-Gracias- dijeron los tres al mismo tiempo.

-No hay problema. Oh señor Beale mi padre quiere que vaya con él, está pasando el pasillo a mano derecha-

-Gracias. Con permiso- el señor Beale se fue dejándonos a su esposa e hija conmigo.

-Y si ustedes quieren tener una conversación muy alocada sobre bolsos y ofertas, pueden pasar a la sala de estar. Ahí están amigas de mi madre, vecinas y algunas tías que vienen a saber de dichosas ofertas- les dedique una gran sonrisa ya que ellas habían sonreído por mi comentario.