Parte 1

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La nieve cubría todo a su alrededor, todo era tan malditamente frio y blanco. Se sentía en un cubo de hielo, pues de eso estaba hecho todo lo que los rodeaba... las ramas y hojas de los arboles estaban cristalizadas, el río junto al que pasaban en ese momento, azulado, tanto como los ojos de quien estaba sentado junto a él. El camino por el que transitaban en ese momento se veía peligrosamente cubierto por una capa de fino hielo y hasta el viento parecía estar hecho de cubos de hielo.

Aunque no todo ese frío era tan malo, le recordaba a ese chico serio y tranquilo que estaba sentado junto a él en uno de los asientos del autobús que ahora los llevaba a ellos a uno de los lugares donde los jóvenes de Bigbang decidieron tomarse un descanso de los conciertos por unas semanas.

No sabía cómo se llamaba el lugar ni le importaba, sólo sabía que no había visto más que blanco y celeste desde hace ocho horas.

Deslizó su mirada hacia los demás asientos del autobús. SeungHyun y Daesung estaban sentados en el final del autobús, solos, en un cómodo silencio, hasta que el mayor comenzó a comerse a besos al menor. Luego estaba Seungri revisando cosas en su celular.

Taeyang se ruborizo y alejo la vista a la velocidad de un rayo ¿Cómo SeungHyun podía estar haciendo eso en público?...

Aunque, seguramente él fuera el único público que tenían, pues era el único que no se estaba brindando besos y caricias con su pareja. Lo que lo hizo volver la vista hacia ese chico de cabellos verdes y alborotados, que miraba al frente con su mirada fría, perdido en sus pensamientos.

El de rastas lo miro por unos minutos, detallando sus finos labios, la curva de su cuello, su cabello verde, su piel, de apariencia suave, y esos hipnotizantes ojos azules, que ahora lo miraban con un ceño fruncido... ¿Ceño fruncido?

Parpadeo unos segundos, tratando de aclarar sus pensamientos.

En efecto, el chico delgado lo miraba a los ojos con expresión molesta y una clara interrogante en su mirada.

-¿Qué rayos estas mirando?- pregunto en un susurro molesto, pues el moreno ya llevaba unos buenos minutos mirándolo embobado, lo que ponía nervioso al de cabello verde, que sentía como su corazón se aceleraba y como un pequeño rubor amenazaba con evidenciarse en sus blancos pómulos.

El de rastas sintió como la sangre subía por sus mejillas, sin embargo, logro controlarla antes de que se sonrojase.

-Yo puedo mirar a quien me plazca- dijo en un susurro igual de venenoso y con su típica mirada de superioridad. Estas peleas no eran raras entre los dos amigos, y, muchas veces, eran ocasionadas para ocultar los sentimientos que ambos chicos tenían, sentimientos que no eran normales siendo sólo amigos. Algo que ya era obvio para todos menos para ellos mismos.

-Pues a mí no, Negro con Rastas- le gruño, girando su cuerpo hacia él y cruzándose de brazos, su amigo a veces podía ser tan infantil.

-¿A quién llamas Negro con Rastas? Palo de escoba- dijo con un ligero rubor, que ya no tenía nada que ver con la vergüenza de que lo descubrieran viendo a su amigo y, a la vez, amor platónico... este rubor era de pura rabia, odiaba que alguien le llamara "Negro con Rastas" y más aún si ese alguien era G-Dragon.

-¡Vete al demonio! ¡Negro Estúpido! – contraatacó el de cabellos verdes, en un estado idéntico al de Taeyang.

-¡Palo con piernas!- los insultos y tonos de voz comenzaban a alzarse, arruinando el romántico clima de todos a su alrededor.

-¡Carbón!

-¡Palito Chino!

-¡Cállense par de idiotas!- gritaron, en perfecta sincronía, todos los demás viajeros el autobús, interrumpiendo a ambos chicos justo cuando se iban a lanzar a pelear allí dentro.

Amo el frío -Taeyang x G-Dragon [ Adaptación ] GDYB ver.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora