C I N C O

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Entro al colegio y todos me miran, yo solo sonrío porque eso siempre hago, no son las primeras bromas que Alan me hace ya vienen bien viejitas sus bromas. Solo que lo habíamos dejado un tiempo porque me enojé con la penúltima que hizo. Mintió diciéndole a mi ex novio que yo lo engañaba, y hasta obtuvo pruebas, el era otro nivel cuando se lo proponía.

–¡Que miran ineptos!–grito seria la ver que me seguían mirando, quizá no me molestaría, pero ellos ya se pasan.

Llego a mi casillero y puedo ver que aún hay marcas de la última broma que me hizo Alambrito, solo lo abro y dejo cuadernos. Saco los que si son acertados para usar y ruedo los ojos al ver que Alan estaba mirándome.

–Yo se que suelo ser irresistible aveces niño, pero tampoco me ojees–le digo sonriendo con arrogancia.

–Oh en tus sueños Castillo–dice el con su tono amargado para seguir caminando.

Estaba de mal humor porque el tinte no salía, juro que le dije a los escoltas que le pongan uno que salga con agua y con jabón, aunque creo que le pusieron el de quince días y eso si que era jodido.

Yo seguía en modo Hulk, pero no me quedaba mal hasta me veía más sexy. O eso es lo que me dice mi papá, con su amor de padre.

Camino detrás de Alan solo con un metro de distancia por si le llega dar una arranque de ira y se gire a matarme, tener tiempo para decir mis ultimas palabras, que serían "En el infierno me encargaré de jalarte las patas". Si una buena muerte para Mikeyla Castillo, anoten.

Llegamos ala clase, y me siento en la parte de atrás, nadie nunca se sentaba conmigo y, ¿quieren saber el porque?. Soy demasiado molestosa y hago ruidos con todo lo que veo, hace que la gente se harte de mi y se cambie, para mi mejor ya que todos me caen al huevo, solo cuatro o cinco me caen bien.

En este momento estaba mirando hacia Alan enojada, ya que se encargaba de tirarme unos malditos papeles como si fuera que, y estaba cabreada la verdad no me gustaba que la gente me molestara solo yo podía molestarlos.

–¡Joder Alan que te den!–grito y me salgo del salón hechando humos. Por un momento me sentí rara ya que mi mal humor no es tan normal, yo soy una persona muy alegre y me valen tres hectareas de pepinos lo que la gente piense de mí, pero hoy no era mi día.

Me senté fuera en la cafeteria y me puse a ver mi celular, pase así como por dos horas hasta que sonó la alarma indicando que ya era hora de irnos a casa, el colegio era así, por lo menos en temporadas bajas era así.

No tuve clases hoy, y la verdad me valía, a pesar de que mi conducta era un completo asco, era muy buena estudiante y eso hacía que cuando faltara a clases me sienta mal pero hoy no estaba de humor.

Ni siquiera pregunté a nadie si quería que lo llevara solo quería estar sola.

***

Ahí está la respuesta a mi mal humor. Les contaré.

Llego a casa muy malhumorada y voy directamente hacia mi cuarto, me acuesto y comienzo a pensar en una vida sin Alan, se veía todo bien y hasta los unicornios existían, luego me levanto y siento un dolor en mi vientre, un puto dolor y es llamado de una forma tan fea, los cólicos malditos. Siento que algo baja a velocidad máxima por mi cuerpo, me apresuro para llegar a el baño y si, señoras, Andrés haciendo una presencia muy buena.

–Maldigo el día en que me hice señorita–hablo resoplando.

Me meto a bañar aún así sabiendo que era peor porque más cólicos me iban a dar, pero no me importaba solo necesitaba urgentemente sentirme limpia.

Veinte minutos después estaba peinando mi pelo de Sherk. La verdad me gusta un poco el color, pero hoy se salió más con el baño que me di. Así que no queda mucho tiempo querido pelo color a verde moco de mi corazón.

Mi celular comienza a sonar y puedo ver que es Nadia, contesto rápidamente y ella habla.

–Hola apestosa

–Que tal rata de biblioteca–digo riéndome y ella gruñe. Odiaba que le diga así.

–Te llamaba para decirte que, a mi hermano no le sale eso porque yo agregué un ingrediente más a su shampoo ese día, era tinte para cabello azul, permanente–dice riéndose.

–¡Por la mierda! ¡Te pasas!–exclamó y sonrió.

–Se lo merecía, daño mi maquillaje nuevo, y tú sabías que yo no tengo nada. Reuní como nadie para poder tener la línea completa de Rihanna y el daño gran parte de todo solo porque yo le dije a mamá que el se saco C en un examen–gruñe de nuevo.

–Bueno entonces merece eso y más, porque a mí tampoco me sale la mierda verde que me puso aunque me gusta.

–No te queda tan mal moquito–se ríe.

A pesar de ser nerd y esas bobadas, era burlona y muy segura de si misma Nadia, era solo nerd para el colegio pero fuera es súper diferente, sexy y recta es sus par de cualidades.

Alan es muy celoso, así que no la deja vestirse muy abierta en el colegio, pero por ejemplo cuando salimos a la playa o a el mall, ella sale mejor vestida que yo y aveces hasta siento que me opaca. Lo sé soy muy rara, aveces me paso de egocéntrica o aveces odio hasta los dedos de mis manos.

–Eres igual a ese pitufo, pero bueno, te dejo querida mía. Debo pensar en que mismo hacer, o retorcerme del dolor por que me llego el de cada mes–digo quejándome.

–Que Dios te acompañe victima–se ríe y me cuelga.

Dejo el celular en el baño y decido acostarme un rato, no me doy cuenta y en un segundo me quedo profundamente dormida.

Me levanto con el sonido de algo caerse en el baño. Y decido caminar hacia allá, entro y veo a el mismísimo Alan en el suelo medio muerto, al parecer se había resbalado el muy gil.

–¿Que haces aquí papá Pitufo?–pregunto y el solo me mira mal.

-Pensaba hacerte una broma y al parecer haz dejado la puta llave abierta y me resbalé–dice serio.

–¡Santa mierda mi celular!–exclamo y lo veo empapado– Ya valió madres esto–digo mirándolo un poco avergonzada a Alan.

–No puedo vengarme nunca bien.

–Déjate de tonteras y paremos con esto por esta semana Porfavor.

Al decir eso Alan me mira sorprendido, se que no se lo esperaba pero no estaba de humor para bromas durante este tiempo.

–Sabía que estabas con Andrés, algo raro tenías–había riéndose y yo solo lo miro mal divertida.

Lo más feo que un hombre le puede decir a una chica es eso, así sea tenga razón.

***

OH REGRESE GENTE
Nadia en multimedia
Ahora si adiósito 🤪

NARCOTRAFICANTE.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora