Vecino!?

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▢▲Ésta historia obviamente contará con weas homosexuales y mucho amor del bueno.. yia tu saeh eve. Pero, no en este capítulo." ▲▢

Piero Barone, no era más que un simple trabajador de Salvatore Cabreira. Un pequeño taller de reparación de automóviles de Madrid. No daban una gran cantidad de dinero, pero tenía que ganarse la vida para poder sobrevivir en ese mundo desgraciado.

•Pov Piero•

07:03pm
Había trabajado todo el maldito día, uno de los cacharros estaba peor que el culo de Mía Khalifa después de ser penetrado por 6 negros a la vez. Y el dueño insistía con que yo sacaría una bendita varita mágica y gritaría "Reh-PAH-roh", mientras saldría una luz blanca. Dios mío, casi me tiraba a estrangularlo para que se callara. Menos mal que llegó Gian, mi compañero y mi mejor amigo, para atender a el puto del Sr.
Pero bueno, por fin pude salir de ese calabozo, y disfrutar de la libertad... al menos eso pensé, hasta que me llegó una llamada de Gianluca, el muy hijo de perra no me deja caminar tranquilo. Y sin más contesté.

"Pronto? Ahora qué miércales te pasó? no ves que intento tomar un respiro?" − Dije de una, ya me estaba cabreando.

"Ay pues lo siento señora, sólo le quería avisar que tenía un regalo pah ustéh, pero si anda con la regla mejor venga mañana" − Soltó Gian al otro lado del celular, parecía divertido.

"Agh, ya voy, espérame un poco, que tomo un taxi, addio, Ci vediamo dopo/Adiós, hasta luego" −  Fué lo último que dije, antes de cortar la llamada. Y entonces, no me quedó de otra que ir para la casa de Elvis moderno.

20 minutos después
"GIAAAAAAN!!!! MALDIIIITOOOOO!!! ME ESTOY CAGANDO DE FRÍO ACÁ FUERA POR TU CULPA!!!!" −Grité mientras golpeaba la puerta de su casa. Una muy bonita vivienda a decir verdad. Estaba contruida por troncos apilados y contaba con dos niveles. El ante jardín lo mantenía limpio y tenía una planta por aquí y por allá, bastante decente comparado con el apartamento en que hospedo.

"VENGA GIAN!! LEVANTA TU CULO DE DONDE SEAS QUE ESTÉS Y VEN A ABRIRME!!" − Seguía gritando, no me iba a quedar afuera. Era 5 de Enero, estábamos en pleno invierno y yo sin chaqueta. − "GIAA-" − Sonó la puerta empujarse.

"Pedazo de imbécil que tengo por amigo, estaba abierta, sólo tenías que tirar" − Dijo Gian, con una mano en la cara, como si yo fuera un dolor de cabeza.

"Tsh, déjame, el frío me tiene tonto" − Solté con un bufido.

Apenas entré, me golpeó la calidez de la sala, fue todo un cambio de temperatura, tenía la nariz y las manos congeladas producto del tremendo frío del exterior. Al revisar toda la sala, me di cuenta de donde provenía la deliciosa fuente de calor, era la chimenea. Así que fui directo al frente de ésta. Se sentía tan bien, sólo faltaba la taza de chocolate caliente con malvaviscos, así como en las películas, y sería feliz.

"Oye Pié, te parece si vamos a algún bar o pub? últimamente sólo nos mantenemos encerrados por culpa del clima... Pero te apuesto a que veremos chicos lindos cariño." − Insinuó Gian, haciendo puchero para que aceptase.

"Acaso estás loco? crees que algún mino o papazote saldría con el clima así? ni loco, además no traje ni abrigo. Así que no" − Comenté desde la cocina, terminando el chocolate caliente que tanto anhelaba en estos momentos.

"Uhm, yo voy a salir, así que sí cariño, un papazote saldrá con este clima, ahora, tómate ese chocolate y nos vamos.  Capisci?" −  Decía Gianluca al tiempo que sacaba unos abrigos, uno negro, tipo cruzado, que de seguramente sería para él. Y otra verde militar, de marca ZHAN DI JI PU, estaba bastante bonita. Y además, sacaba un jersey  gris, un gorro, bufanda y guantes negros.

Ti Amo, Amore [Pignazio]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora