No se es nada en un mundo tan perdido, ya nadie sabe a donde dirigirse luego de tanto tiempo.
Una luz que se creía, llevaba al descanso eterno del alma mortal termino siendo el túnel de la mayor desesperación.
Ya pasaron tantas veces que nací y morí que ya perdí la cuenta, pude presenciar la muerte de quienes ame y pese a las infinidad de veces que he estado en este mundo, nunca las pude volver a encontrar.
-Ya es la hora -como siempre a las 22:00 viene la misma criatura antropomórfica a anunciarme que es él final de esta vida-.
Nuevamente comenzare otro ciclo, espero que sea mejor que este.
- Creí que esta vez te habías olvidado- dije sarcástico- siempre a la misma edad, no puedes buscarme antes o después de esta para variar un poco-.
- Son las reglar, así decidiste tu-.
- Buen punto, ya vamonos-.
Deje mi cuerpo nuevamente, a la edad de 87 años, la única variación en esta vida fue que tuve un hijo, pero no va a extrañar a un viejo que lo encerró en una escuela pupilo y el cual muy pocas veces le demostró afecto. A su vez aunque él creyera que no me importaba, le deje todo lo que en esta vida hice, la fortuna que forje con esfuerzo y la cual no me arrepiento de dejarle.
Otra vez ingreso al mismo maldito túnel, otra vez la luz y todo comienza otra vez, entre gritos y llantos vuelvo a ser un infante recién llegado, otra vez, en una familia acomodada, con padres presente-ausentes por tanto trabajo y viajes al extranjero.
El tiempo pasa rápido, pero no cambia que siempre sea lo mismo, crecer entre niñeras y empleados de la casa, ir a las mejores escuelas, siempre igual.
Entrando ya en él ultimo año de secundaria, por primera vez, paso algo diferente, no logre entenderlo.
-Vamos a irnos a vivir lejos, ya tenemos los arreglos para tu transferencia a otra escuela- mi padre siempre fue un hombre cerio y sin tapujos- mañana nos vamos, ve a empacar-.Esa noticia fue lo primero que en toda mi vida había logrado que cambie mi fría expresión.
-Ya se que es muy repentino hijo -Mi madre una mujer su emanaba ternura siempre muy sentimental y atenta a todo en mi vida- ya veras que todo estará bien y te adaptarás rápido.
No cuestione la orden y subí a mi habitación a empacar, estaba desconcertado. -Nunca en la infinidad de veces que nací había ocurrido esto- pensé para mi mismo mientras acomodaba mis pertenencias en las maletas.
- Tengo noticias para usted- aquella criatura estaba parada en una esquina oscura de mi habitación- esta es tu ultima vida, habrá muchas diferencias con las anteriores-.
- ¿Que? ¿Porque?- no podía ser posible- ¿Acaso eso significa que ya soy libre?-.
-Han decidido los superiores, no se los detalles pero tal parece que si esta vez tendrás tu descanso eterno-. Luego de darme la noticia, por primera vez lo vi partir sin mi.
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Mil Veces
Teen FictionNo importa cuantas veces haya nacido, no estoy Preparado para esto