+18 💥 Luchando Juntos [LevixReader - Lemon]

Especial 1: Corazón quebrantado parte 1

(Hola a todos, no entiendo porqué se cargó demasiadas publicaciones de la historia pero ya borre las innecesarias, así que ésta es la definitiva ^^ comenten y voten!!!, estoy de regreso)

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Narrador Omnisciente

Un día común y corriente dentro del Distrito de Orvud, un poco de frío en el aire y las personas cubiertas con grandes abrigos. Su gente amigable y servicial, siendo uno de los lugares más felices de los distritos dentro de las Murallas. Los robos eran ocasionales, algo que agradecer, por que éste es una de las ciudades con mayor cantidad habitantes.

En específico, una casa pobre, pequeña y muy deteriorada, pero que aguardaba una feliz familia: Samm [t/a] el padre, Tina [t/a] la madre, [t/n] [t/a] la hermana mayor y Finn [t/a] el más pequeño. El hombre de la familia con 30 años de edad, trabajaba como carpintero, mientras Tina hacía todas las labores del hogar.

Comúnmente Samm llegaba a casa y era bien recibido por una maravillosa cena, aunque no lujosa, deliciosa y llena de amor. Tina procuraba preparar comida para todos, con buenos nutrientes e ingredientes sumamente baratos, hacía milagros con el poco dinero que su esposo ganaba.

[t/n] tenía tan sólo 10 años de edad y su hermano Finn 7 años. Ambos jugaban el uno con el otro, reían, lloraban, discutían, pero siempre juntos. Era muy común ver a los hermanos salir a jugar o acompañar a su madre a las compras, no había más que hacer. Tristemente ellos dos no asistían a la escuela, debido a que Samm no podía cubrir esos elevados gastos, así que Tina era quien les enseñaba, desde leer hasta matemáticas, entre otras muchas cosas que debían aprender de la vida.

Tina-: [t/n], necesito que vayas con tu hermano a comprar una gallina, la más pequeña que tengan - la amorosa madre le entregó el dinero a su linda hija - Por favor, no demoren! - en un ruego con sus ojos acarició las cabezas de sus pequeños.

Ambos infantes asintieron al mandato de mamá y salieron de la pobre vivienda, tomados de la mano. Tina les había trazado desde mucho antes la ruta más segura y era la que siempre seguía, hasta ese día.

[t/n]-: Mira Finn, un perro, no es adorable? - ambos hermanos se acercaron al peludo y lo acariciaron, pero el gusto no les duró mucho, ya que el perrito se fue - Vamos a ver hacía donde va!!! - jaló a su hermano de la muñeca y éste se opuso.

Finn-: Mamá siempre ha dicho que no tomemos otro camino, nos regañará - La dulce hermana puso los ojos en blanco.

[t/n]-: No seas cobarde Finn, sólo iremos y volveremos aquí, anda no seas una niña!!! - el pequeño dudo un poco, pero la ternura del perro fue más fuerte que él, además también su orgullo.

Se adentraron en un callejón angosto donde el peludo se fue, pero por mucho que lo buscaron nunca lo encontraron. Se dieron por vencidos y cuando decidieron volver, estaba tan adentro que no supieron el camino de regreso.

Finn comenzó a ponerse muy nervioso ya que el lugar donde se encontraban era totalmente desconocido para ambos. También [t/n] estaba indecisa sobre que camino tomar de regreso, todo estaba lleno de casas deterioradas y gente mirándolos extrañamente.

No les quedó de otra que elegir un camino y comenzar su búsqueda de regreso, a pesar de que aún había sol y pronto la oscuridad reinaría. En cada paso, la calle se hacía mas angosta y llena de suciedad, basura en todos lados y personas extrañas.

Lo peor no fue eso, sino que para mala suerte de los chicos fue que comenzó a llover y no pequeñas gotas, sino un chubasco fuerte de agua que caía del cielo. En el momento que [t/n] sintió las primeras gotas caer sobre ella, miró a su alrededor y divisó escombros de metal. La pequeña tomó a su hermano y corrió hacía aquellas láminas que podrían ayudarles a cubrirse. Soltó la mano de Finn y con los escombros, hizo un pequeño refugió contra la lluvia.