Antonio.-
—¡Listo, eso es todo por hoy muchachos! —anunció el entrenador haciendo que todo el equipo saliera de la cancha y se reuniera fuera del rectángulo de césped a recuperar el aliento e hidratarse.
Tomé un contenedor azul y me alejé unos metros del equipo, no necesitaba estar cerca, sobre todo cuando algunas de las novias de los muchachos habían venido a ver el entrenamiento, menos aún si ella estaba presente. Así que, con la vista fija en el atardecer suspiré intentando no pensar mucho. Mi intento fue fallido claro, cuando Sofía, la mujer que aún amo entró corriendo al campo de fútbol siendo juguetonamente perseguida por Omar, sí, mi gran amigo Omar. Suspirando miré al cielo agradeciendo al karma por el bonito recordatorio ¿qué había hecho yo?
—¿Cuánto tiempo más estarás así? —cuestionó Karly sentándose a mi lado. La miré unos segundos y luego desvié la vista encogiéndome de hombros.
—Debe estar por pasar —mentí. Seguía doliendo como el primer instante.
—Los que te queremos esperamos que sea así, queremos al Pollo de antes, al buen tipo Toño y justo ahora, así cómo estás —exhaló—, no me culpes por odiar a esa maldita y a ese adefesio porque la verdad es inevitable no hacerlo, me choca ver a mi amigo así por culpa de dos seres miserables que no valen la pena —Karly tenía razón, no valía la pena, pero algo que había aprendido en los últimos meses es que por más palabras de aliento que te den cuando tu corazón está roto ninguna repara el daño.
—Quieres saber cuánto tiempo más estaré así —cuestioné, Karly asintió— el tiempo que ustedes tarden en aceptar su amor —respondí sonriendo, y mirando distraídamente a mi amigo Daniel que nos inspeccionaba a su manera de ser "disimulado".
—Tú... no sé de qué me hablas —murmuró mi amiga.
—Lo sabes, ambos —respondí sin evitar la sonrisa que aquella situación con mis amigos me causaba.
—Que no, ahora, ¿vamos a comer?
—¿A dónde?
—Hamburguesas, las que están aquí cerca —explicó poniéndose de pie.
—Me agradan tus ideas mujer, vamos —cedí poniéndome de pie.
—¿Al fin? —cuestionó Daniel a Karly luego de darme una breve mirada.
—Ajá, ya nos vamos —respondí antes de que mi amiga lo hiciera.
—¡Chicos! —me detuvo la voz de Sofía.
—Hola —y después la de Omar.
—¿Tienen planes para esta noche? —cuestionó Sofía.
—No creemos presentarnos en la fiesta de la zorra de Tamara si es lo que quieres saber —adelantó Karly.
—Ah... no lo decía por eso, tal vez nosotros tampoco vayamos —respondió Sofía y Karly rio sarcástica, pues claro, Tamara era como la mejor amiga de Sofía, si hacía una fiesta ella estaría ahí.
—¿Entonces tienen planes? —intervino Omar intentando que esto no terminara en una pelea.
—Sí Omar, tenemos planes —inquirió Karly, notablemente exaltada, Daniel colocó su mano alrededor de su espalda, pero ella pareció no darse cuenta— planes entre amigos, ya sabes, esas personas que se apoyan, no se mienten o se traicionan así que, cómo notarán nuestros planes quedan entre nosotros —finalizó Karly colocando una pequeña sonrisa en su cara.
¡Demonios! Quería aplaudirle a la mujer.
—Nos vemos después —agregó Daniel comenzando a caminar hacia la salida.
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Mentiras de Amor
Novela Juvenil¿Qué haces cuando intentas reparar un corazón roto por tu propia cuenta? ¿Le lloras día tras día a la chica que te dejó por uno de tus mejores amigos? Porque claro, la sigues amando. ¿Sales con un montón de chicas para olvidarla? No, ninguna de la...