El timbre del instituto retumbó en los pasillos, pero Alex no se movió. Estaba apoyado contra la pared, los brazos cruzados y esa sonrisa despreocupada que siempre lo acompañaba. Para él, el mundo era como un videojuego: más puntos, más diversión.
Los estudiantes caminaban a su alrededor, riendo, discutiendo, algunos incluso corriendo para no llegar tarde a clase. Él solo se apartó para dejar pasar a Sara, que le lanzó una mirada rápida antes de desaparecer al final del corredor.
—¿Vienes o qué? —le preguntó Marcos, su mejor amigo, dándole un leve empujón en el hombro.
—Ya voy. —Alex bostezó y estiró los brazos, como si tuviera todo el tiempo del mundo.
Entraron al aula justo cuando la profesora empezaba a hablar. Había un murmullo inusual entre los estudiantes, y pronto entendió por qué. En la primera fila, un chico nuevo estaba sentado, mirando al frente con los hombros tensos.
Era Daniel.
Alex lo observó un segundo más de lo necesario. Tenía el cabello algo revuelto, gafas que se deslizaban por el puente de la nariz y una expresión nerviosa, como si estuviera atrapado en un lugar que no le correspondía.
—¿Y este quién es? —murmuró Alex a Marcos mientras tomaban asiento al fondo.
—Chico nuevo, creo. —Marcos se encogió de hombros, más interesado en su móvil que en el nuevo estudiante.
Sin embargo, Alex no podía dejar de mirarlo. Algo en Daniel le llamó la atención de inmediato, aunque no supo qué.
—Silencio, por favor. —La voz de la profesora cortó el murmullo. Señaló al nuevo. —Daniel acaba de llegar. Espero que lo traten bien.
Los ojos de Daniel recorrieron tímidamente la sala, y cuando llegaron a Alex, este no pudo evitar una media sonrisa, como si intentara tranquilizarlo. Daniel apartó la mirada enseguida, ruborizado.
"Interesante", pensó Alex, aunque no le dio mucha importancia. La vida seguía siendo un juego, y Daniel, al menos por ahora, no parecía una pieza clave.
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Filofobia
RomanceAlex y Daniel, atrapados en un torbellino de secretos oscuros y traiciones, luchan por sobrevivir en un mundo que los quiere destruir. ¿El amor y la amistad serán su salvación o su perdición?