¿Qué nos hace realmente felices?
Esa pregunta ronda día a día mi mente.Abro mis ojos y lo primero que logro ver es su hermoso rostro con una expresión cálida y ese aura de paz que solo ella puede brindarme.
-Mierda, es muy tarde.
Salgo de la cama sin hacer ruido alguno, entró en la ducha y mientras el agua recorre mi cuerpo no puedo evitar pensar -Acaso hoy será otro día gris, a qué jugaré hoy?.
Saliendo del baño, visto mi ropa de trabajo y salgo a coger transporte.
-Oh por dios, que despertar tan perfecto como puede dañarse todo con solo salir de casa.
Un día más.
He llegado a mi destino, todo se torna verde.
Cierro mis ojos por un instante, al abrirlos estoy en la mitad de un hermoso campo, miro al cielo y es un atardecer maravilloso, todo su color hace de este momento una imagen en mi cerebro. Recorro un poco aquel campo siento el sol en mi piel, suave y muy sutil, entró a una hermosa casa llena de obras literarias, cuadros y algunos artistas -un ciclo de oro diría yo.-
En ese instante recuerdo mucho como el mundo pudo condenar a estos talentosos personajes? Acaso debe uno morir para ser reconocido? Acaso llegamos a sitio llamado el paraíso, y si es así que tan feliz se puede ser?-No puede ser, malditasea acaso uno debe de sacrificar su mundo por los demás, no está mal ser feliz.
No dejare que el mundo me condene.Saliendo de mis pensamientos, empecé una travesía hacia lo que yo llamaría mis siete vida y un mundo condenado.
ESTÁS LEYENDO
Siete vidas del gato.
FantasySiempre buscamos la manera de ser un poco aceptados en la sociedad tan de mierda en la que vivimos, tenemos maneras de aceptar lo que llamamos vivir y felicidad en una misma oración. Aquí creando historias.