¿Quieres morir? Lo se, yo también...

A nadie le importas, ¿no?

¿Te sientes mal?

¿Te quieres morir?

Solo piensa en esa posibilidad un segundo:

Estas sentada en tu habitación, con la puerta cerrada, un lápiz y un papel en blanco frente a ti. Estas temblando, y las lágrimas no dejan de caer desde hace horas. 

"Para mi familia"... Pero es una mala manera de empezar tu carta...

Pruebas de nuevo, una y otra vez, pero no sabes como comenzar.

Nadie te entiende, nadie entiende lo que estás pasando, estás sola...

A nadie le importaría si estás viva o muerta...  

...O al menos eso es lo que tu piensas. 

...

Es de noche, te deslizas por la cama. "Adiós" le susurras a la oscuridad...

Porque a nadie le importas, ¿no?

Te equivocas...

...

A la mañana siguiente, a las siete, tu madre llama a tu puerta para levantarte. No sabe que no puedes oírla. No sabe que te has ido...

Entra, y se desploma en tu habitación, mientras tu padre corre para ver que sucede. Tus hermanos ya se habían ido al colegio. 

Tu madre reúne toda la poca energía que le queda para acercarse a tu cama. A ti...

Se derrumba sobre tu pálido e inmóvil cuerpo. Llorando. Apretando tu mano. Gritando...

Tu padre trata de ser fuerte para ella, pero las lágrimas escapan de sus ojos. 

Tu madre se culpa a sí misma. Todas esas veces que te dijo no, esas veces que te envió castigada a tu cuarto o que te gritó por alguna estupidez. 

Tu padre se culpa a sí mismo. Por no estar cuando le pedías ayuda. Por dejar la casa por tanto tiempo para irse a trabajar.

A nadie le importas, ¿no?

...

Las ocho y media de la mañana. Golpean la puerta de tu clase, y al abrirse entra seria el director. Luce más preocupado que nunca. Llama a tu profesora para hablarle a un costado. Todos tus compañeros están asustados, "¿que estará pasando?"

El director capta la atención de los estudiantes, y les cuenta la trágica noticia de tu suicidio. 

La chica popular que siempre te llamaba gorda y fea ahora se culpa. 

El chico que te copiaba la tarea y te trataba como la mierda ahora se culpa. 

El chico que se sentaba detrás de ti, y que siempre te tiraba cosas ahora se culpa. 

Tus compañeros gritan, lloran, están en shock, arrepentidos por lo que hicieron. 

Todos están devastados, incluso aquellos con los que nunca habías hablado y te conocían de lejos. 

Y todavía a nadie le importas, ¿no?

...

Tus hermanos llegan a casa, y tu madre tiene que decirles que te has ido, para siempre... 

Tu hermana menor, no importa cuantas veces te haya gritado, dicho que te odiaba, o robado tus cosas... Siempre te quiso y te admiró, viéndote como su heroína, su modelo a seguir. Ahora empieza a culparse a sí misma: "¿Por qué no hice lo que ella me pidió que hiciera? ¿Por qué tomé sus cosas cuando ella me había dicho que no? Es todo mi culpa..."

Tu hermano, ese chico que nunca llora, ahora está en su cuarto con lágrimas corriendo por su rostro. Está enfadado consigo mismo por tu muerte. No sabe cómo lidiar con el hecho de que te fuiste, para nunca más volver. 

Pero a nadie le importas, ¿no?

...

Ya ha pasado un mes, y la puerta de tu cuarto ha estado cerrada durante todo este tiempo. 

Todo es diferente ahora...

Tu hermano ha tenido que ser enviado a clases de control de ira.

Tu hermanita llora todas las noches esperando a que vuelvas. 

La chica popular ahora es anoréxica. 

El chico que te copiaba dejó el colegio.

El chico que te tiraba cosas ahora se corta. 

Tu padre tiene depresión.

Tu madre no duerme por las noches, "es todo su culpa". Estuvo llorando y gritando semanas enteras deseando que volvieras. 

Nadie sabe cómo lidiar con el dolor que están sintiendo. 

Pero... A nadie le importas, ¿no? ¿O me equivoco?

...

Finalmente tu madre decide limpiar tu cuarto... Pero no puede. Estuvo dos días ahí encerrada tratando de recoger tu ropa, tus libros, tus cosas...

Pero no puede. No puede decirte adiós. No puede despedirse. No ahora. Nunca. 

...

Es tu funeral, y todos van. Nadie sabe que decir, hay un inmenso silencio. 

Esa chica con la hermosa sonrisa se fue. 

Todos lloran. Todos te extrañan. Todos desean que vuelvas... Pero no lo harás. 

¿Todavía piensas que a nadie le importas?

Piénsalo de nuevo. Incluso si las personas no lo demuestran, les importas. Ellos te quieren. Te aman. 

Si te suicidas detienes tu dolor, pero dañas a todos los que te rodean por el resto de sus vidas. 

El suicidio es una solución fácil, pero incorrecta. 

La vida es hermosa. Sí, puede tener altos y profundos bajos, dias horribles y momentos muy difíciles... Pero aun así la vida sigue, y tú también.

Así que mantente fuerte, que el mundo necesita a gente así.