Capítulo II

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En las afueras de la aldea, el territorio permanecía tranquilo y se podía observar el típico sendero que solemos coger, bueno, suelen coger normalmente los trastos que se llaman "automóviles". De momento, no he estudiado lo que son, pero tampoco es que tenga muchas ganas por aprender lo que es. Los grandes árboles tapaban el aire que venía del exterior, por lo que sentía una leve brisa bastante inquietante. Me percaté de un banco que estaba situado al lado de la pequeña muralla que conyugaba con el interior de la aldea. Me senté en el y permanecí en silencio.

-Oh, por fin llegaste, pequeño. -Hablo una voz desconocida y ronca.

Me levanto y giro la cabeza hacia los lados, pero no encontré a nadie. Mi nerviosismo iba en aumento. Cada vez más asustado y tembloroso, decido preguntar.

-¿U-usted quien es?, ¿Que quiere de mí? -pregunte con miedo.

Pensaba que no me escucharía, ya que normalmente cuando hablo bajo nadie me escucha, por lo que cuando quiero decir algo importante para que no me escuchen, bajo la voz.

-Mi existencia no es importante, lo que busco... Eres tú. -Dijo-. Supongo que no te habrás percatado del por qué force la puerta para entrar, ¿No?- Termina de hablar y aparece de la nada.

Al verlo, me quedo muerto.
Su medio rostro, que únicamente se le veía el hocico era blanco como la luna, y posee un bastón raro que sobresalía de su cabeza, aún sosteniéndolo desde el suelo. Lleva puesta una túnica lila y una capucha. Cuando baja su capucha de la cabeza, lo que veo es un tigre blanco con abundante barba. Ha decir verdad, estaba bueno. Me excite un pelín. Sus ojos, fijados en mi, eran de color azul cristalino. Su expresión se torno sería.

-Porque si no forcejeabas la puerta, no hubiera venido aquí, ¿Verdad?-Concluí.

-Exacto.

Nos quedamos los dos en silencio durante unos instantes, hasta que el habló.

-Se que vas a pensar que soy un majara o algo parecido, pero lo que te voy a explicar... Es muy importante. ¿Sabes lo que sucedió hace tiempo en tu pueblo, verdad?.

-¿Lo de la plaga de ratas?-Asocié.

-Sí. Ahora otra cosa, ¿Sabes que las personas con un porcentaje superior de propiedades en su cuerpo, pueden llegar a ser portadores de la magia?

-¿Magia? -pregunte confundido.

-La magia es un poder que pocos pueden poseer, es un elemento que reside en el individuo siendo el o ella a una temprana edad o avanzada. La magia puede aparecer en cualquier momento dentro de un mundano. Y por lo visto, tu ya la tienes en tu interior. Y tú magia es bastante más alta que el resto de los mortales.

Me quedé atónito. No entendía nada, ya que no me había explicado bien y soy un poco corto de mente.

-Dejemonos de discursos, vas a comprobar ahora mismo lo que posees en tu interior. -Da unos pasos atrás y empieza a hablar en un idioma que desconocía.

-¡Shyrel Magnus Hiureid! -De repente, alrededor de sus manos empiezan a haber chispas cada vez más abundantes. Hasta que pone sus manos frente a mi y esos relámpagos vienen de forma instantánea.

-¡¡AGHHH!! -Cerre los ojos y solo pensé: Voy a morir.

Cuando los abrí de nuevo, no estaba herido ni nada, me pareció verme dentro de una burbuja de plástico por un instante. Observe al hombre tigre y estaba sonriendo. Bajé las manos y noté un calor bastante alto en ellas.

-¡¿QUEEE?! -Grite del miedo.

Cai al suelo del terror. Estaban quemados mis guantes y parte de las mangas de mi ropa. Pero por otro lado, no me había quemado nada de la piel. Me pareció muy extraño todo.

-¿Ya te has dado cuenta, muchacho?

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-¿Ya te has dado cuenta, muchacho?

Me miraba las manos mientras las giraba de un lado a otro, observándolas.

-¿Que es esto? -le pregunté mientras intentaba levantarme y me ponía de pie.

-Magia.

Mis ojos se abrieron como platos. El ambiente empezaba a ser más tenebroso y las hojas de los árboles empezaban a moverse cada vez más fuerte.
Solo tenía algo en mente: ¿Que está sucediendo aquí?

-Eres un ser excepcional. ¿Sabias?

-No se lo que está sucediendo aquí, pero yo me largo. -Le dije apresuradamente y di media vuelta hacia la entrada de la aldea.

Camino unos cuantos pasos y me comenta:

-Pronto tú y tu aldea estaréis en grave peligro, yo que tú, empezaría a investigar un poco más sobre la magia.

-No digas chorradas y lárgate. Ya he tenido suficiente. No me creo tus juegos baratos—le grite alterado.

Ahora sí me decidí por entrar a la aldea sin echar ningún vistazo atrás. Llegue a mi casa, cerré la puerta con las cerraduras y puse un mueble pesado en ella, por si las moscas. Camine hasta mi cuarto, me puse el pijama rápidamente y me acosté. No tarde ni un minuto en dormirme.

***

Supuestamente, yo seguía dándole vueltas a lo que sucedió días atrás, pero casi sin importancia. Me centraba más en mis problemas: trabajo a media jornada, dejar como los chorros de loro mi vivienda y prepararme comidas ricas como hacia siempre. Pero seguía con la incertidumbre.

-¡No! ¡¡No te caigas!! -grite antes de que se cayera una taza.

En el vuelo, mis ojos empezaron a sentirse raros, la visión de la taza en mi estaba cambiando. En ella aparecían cuadritos pequeñitos de color grisáceo y lila blanquinoso. Cuando me di cuenta, la taza estaba flotando.
Me quedé atónito, por lo que cuando me despierto del trance, la taza de cae inmediatamente rompiéndose en mil pedazos.

Por un segundo pienso que el me estaba contando la verdad. Ese felino tenía razón, puedo usar eso que el llamaba "magia" y no me había dado cuenta hasta ahora. Entonces eso quiere decir que no me estaba mintiendo y estaba diciendo la verdad.

Por la tarde, no dude ni un segundo en ir a todas las zonas eruditas de mi aldea. Haber si encontraba algún libro que pudiese ser de utilidad para mí. Para mi poca suerte, rebusque y rebusque y no encontré chapa.
Me empezaba a frustrar mientras seguía mirando libro por libro hasta que en la estantería más vieja y putrefacta, por decirlo de alguna forma, encontré un libro bastante ancho en páginas, que se llamaba el Grimoire. Lo tenía escrito en el lomo.
Lo abrí y me quedé petrificado de lo que había en su interior.

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¡Buenas a todos/as!
Quería preguntaros si os gusta mi historia o no. O es un pelín aburrida y le falta más chicha. Primeramente, no tengo ni papa de escribir, es súper amateur. Por lo que no esperéis mucho de mi. ( O sí, quien sabe xd)
¡Sorpresa! El capítulo siguiente tendrá una ilustración y pronto pondré la ilustración respectiva de este capítulo. Tengo las dos terminadas y entintadas :3
Nos leemos!

Trewion: El Poder De AshunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora