Hacía muchísimo frío y sus manos congeladas eran muestra de ello. Su nariz estaba teñida de un leve color rojo por las bajas temperaturas y su cuerpo se mantenía cubierto por varias capas de ropa que tenían como objetivo guardar su propio calor.
El cielo ya estaba oscuro y las calles eran iluminadas únicamente por la luz artificial proveniente de los adornos que indicaban la víspera de navidad y por los postes de luz puestos ordenadamente.
Se encontraba recorriendo las calles en plena navidad visto que en la puerta de su departamento notó la presencia de una diminuta carta la cual no demoró en leer. En esta se le pedía que cuanto antes se presentase en un conocido puente con hermosas vistas y que ahora solo lucía más bello con las recientes decoraciones puestas de navidad, mismas que se reflejaban en el río que descansaba en paz bajo el puente.
Aunque esto a Baekhyun no le hacía mucha gracia. Que un anónimo lo citase en aquel lugar que albergaba importantes recuerdos alegando que era algo de suma importancia no le causaba ni un poco de confianza. Mucho menos siendo consciente de la hora. 11:36. ¿De verdad pasaría navidad a fuera de su casa y sin su familia? Baekhyun era curioso en muchos niveles. Dicen que la curiosidad mató el gato. El solo esperaba que el dicho no se cumpliese en el 100% de las ocasiones.
Aún así no sabe por qué accedió a acudir al lugar, sobretodo sabiendo que aquel sitio solo le proporcionaba recuerdos que si bien eran hermosos, formaban parte de su pasado, un pasado que no volvería aunque le rogase a todos los santo habidos y por haber.
Tres años atrás.
— Sabes que te amo ¿No?
— Sí JongIn, sí que lo sé. Incluso si es navidad ¿Es necesario repetirlo durante toda la noche? — le cuestionó el pequeño rubio con una leve sonrisa burlona adornando su suave rostro.
— ¡Claro que lo es! Si no lo dijese ¿Lo sabrías? — preguntó igual de divertido que el otro, aunque la culpa comenzaba a consumirlo.
— Por supuesto bobo. Si siempre me lo has demostrado — Sostuvo sin borrar su sonrisa — ¿Qué tienes eh? ¿Por qué me sueltas esto tan de repente? — Su sonrisa seguía allí pero se había fusionado con un semblante de preocupación, formando una mueca bastante extraña y graciosa a los ojos del moreno.
— Baekhyun... Necesito que estés consciente de todo el cariño que te tengo antes de decirte esto ¿Si?
— ¿Qué pasa? — dijo un tanto más preocupado.
— Mis padres... No sé como, pero han conseguido algo increíble. Tengo una beca para ingresar a una de las mejores universidades... En Japón, durante tres años.
Ya no había rastro de aquella sonrisa tan deslumbrante en el fino rostro del más bajo.
— Baek...
Quiso añadir algo más, pero se detuvo al sentir los brazos del menor rodeándole con tantísima fuerza que parecían querer asfixiarle. Dado el detalle, pensó en decir una broma al respecto para ver si podía respirar un momento, pero nuevamente se contuvo al sentir como la tela en la parte de su hombro se humedecía y el cuerpo que lo sostenía firmemente ya no contaba con un agarre tan intenso, sino que había comenzado incluso a temblar.
— ¿Me amas, no?
— Más que a mi vida.
— ¿Volverás después de 3 años?
— Lo haré, y solo contigo en mente. Volveré por ti, y espero que estés preparado para entonces.
Baekhyun no logró contactar con JongIn luego de su partida. No supo nada más de él una vez que este se alejó.
La carta en la que lo habían contactado ni siquiera estaba escrita a mano. Podría ser cualquier asesino con malas intenciones, pero de todas formas Baekhyun quería correr el riesgo. Algo dentro de él sentía la necesidad de volver al puente en donde su ex novio se le había declarado hace 6 años. Manteniendo así una relación de unos largos 3 años. 3 años que le supieron a poco, y que le recordaban amargamente que luego de la despedida que tuvieron, no volvieron a hablarse nunca.
Siguió caminando con pasos inseguros. Por extraño que parezca no sentía prisa alguna, quería tomárselo con calma, admirando la belleza de las calles y el cálido ambiente que transmitía la gente que transitaba feliz y libre de preocupaciones cerca del rubio.
A medida que se acercaba a su destino, la curiosidad se acrecentaba considerablemente apoderándose de él. ¿Quién lo citó? ¿Por qué allí? ¿Con que fin? ¿Quién?
Sin darse cuenta la paz que lo consumía lo fue abandonando lentamente y sus pasos se hicieron cada vez más presurosos y cargados de ansias e ilusiones que no sabía si era correcto sostener. Siguió caminando a esa velocidad hasta que sus pies tocaron el refinado material que marcaba el principio de aquel puente.
Un par de personas se hallaban cercanas al lugar, unas disfrutaban de la vista al río, otras miraban las estrellas con fijación y admiración. Pero solo una silueta podía visualizarse en medio del puente. Una silueta igual de abrigada que él.
Su cuerpo se encontraba cerca de la baranda y sus brazos se apoyaban en esta con su espalda levemente encorvada. Miraba con atención las calmadas aguas debajo de la firme estructura sin dar crédito a la presencia del más bajo.
Baekhyun se acercó un poco mejor al sujeto con su corazón agitándose incesante sin poder distinguir aún a la persona, solo se acercaba creyendo que era esta quien lo había citado.
Lentamente la figura del más alto se fue haciendo cada vez más clara en los lindos ojos marrones del rubio, quienes al reconocer la ancha espalda que visualizaban se llenaron de lágrimas.
Instintivamente, con las lágrimas bajando por sus mejillas debido a la sorpresa y felicidad de su encuentro, recortó la distancia que lo separaba del castaño y lo abrazó por la espalda, sorprendiendo al más alto, quien inmediatamente al notar quien lloraba abrazado a él, solo logró darse la vuelta y recibir el abrazo de frente, llevando su mano derecha con lentitud hacia los sedosos y rubios cabellos del contrario. Jugó un poco con ellos y podía jurar que se le escapó una que otra lágrima a él también. Con su mano disponible frotaba en círculos la pequeña espalda del más bajo transmitiéndole absolutamente todo el cariño que llevaba reprimiendo desde hace 3 años.
Quería decir miles de cosas, habían muchos de temas de los que ambos debían conversar. Y de seguro, existían un millón de palabras que hubiesen sido adecuadas para el reencuentro. Pero para él, no podía haber escogido algo mejor, sencillamente porque fue lo primero que tuvo el valor de pronunciar cuando el reloj dio las 12 y la gente a su alrededor comenzaba a festejar. Así que solo pronunció aquellas palabras.
— Feliz navidad Baekhyun.
Juntó sus labios en un casto beso que si bien no era del todo apasionado, era el encargado de transmitir todo aquello que sentían y que no habían dicho durante tanto tiempo. Una vez se separaron, el rubio solo pudo responder.
— Feliz navidad JongIn.
¿Existen los milagros de navidad?
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Christmas Miracle |KaiBaek| [OneShot]
Fanfiction¿Te suenan los milagros de navidad? Deja que te demuestre cuan reales pueden llegar a ser. 🌸Créditos por la bella portada a: @YaniVargasCastro🌸 Prohibida cualquier tipo de copia/adaptación sin mi previa autorización.