¿Chico O Chica? (Sin Editar)

¿Sorpresa?

Isla iba ideando un plan en su cabeza que deberá poner en practica dentro de dos semanas que sería la salida a la feria con Timmy, hubiera querido que fuera antes pero el chico saldría fuera de la ciudad con su familia.

Cruza la calle y desde ahí logra ver que Mónica se despide de Martha, su madre.

—Hey Mónica, ¿qué haces aquí?

—Vine a buscarte — en su interior se debatía entre las mentiras que se le ocurrían para contarle a su amiga —. Pero no estabas, por eso ya me iba.

Isla estaba de espaldas a su casa, Mónica frente a ella vio que Eiden salía de ahí mismo pero al momento se volvió a meter.

—Bueno es tarde y no he comido, adiós Moni —. Besó la mejilla de su amiga pero esta la tomó de las manos impidiéndole moverse.

— ¿Tienes algo que decirme? — fue lo único que se le ocurrió, tal vez su amiga tenga algo bueno que decir y si no, pues ni modo ya habría ganado algo de tiempo para Eiden.

—He... no... Ah no sí, saldré con Timmy en dos semanas.

— ¿Timmy? ¿El nerd del grupo de Eiden?

— ¡No le digas así! Es un chico adorable y... — se detuvo, estaba por decirle que le sacaría la respuesta o sí o sí.

— ¿Qué? Oh demonios ¿qué ibas a decir? — Isla se mordió el labio, Mónica la miró sorprendida creyendo entender eso —. ¿Te gusta? ¿Te gusta Timmy?

— ¿Qué? ¡Claro que no! Me tengo que ir, adiós.

Mónica no se lo creía, había pasado tanto tiempo esperando que a su amiga le gustara alguien y cuando ella tenía un plan para que se enamorara de ese chico ella sale y dice que le gusta otro.

De camino a casa le marcó a Eiden quien respondió al instante.

— ¿Qué pasa?

—Creo que a Isla le gusta otra persona.

— ¿¡Qué!? ¿¡Quién!? — exaltado y angustiado, así se sentía, ¿cómo era posible que esa chica fuera tan... inestable? no estaba enamorada de ella pero algo le dolía. Su corazón martilleaba en el pecho amenazando con salírsele.

Mónica pensó en la respuesta, ¿y si Eiden se molestaba con Timmy? ¿Y si su amiga se enojaba con ella por hablar de más?

—No lo sé, pero es así y van a salir en dos semanas es todo lo que sé.

Todo lo que puedo decirte, se dijo a sí misma.

Colgaron.

Eiden se movía de un lado a otro indeciso de si lo que harían en dos semanas era lo correcto, si a Isla le gustaba ese otro chico todo se había ido por la borda gracias a las idioteces que hacía.

¿Por qué no solo decirle todo y ya? La sorpresa debía seguir en pie, al menos lo máximo que se pudiera seguir ocultando.