HENIO
Capítulo I
"MI PRIMER DÍA DE COLEGIO"
Creo que tuve buenos sueños. No los recuerdo bien. Casi nunca suelo acordarme, pero son siempre buenos. Siempre compruebo no haberme hecho pis en la cama. Hace tiempo que no lo hago. Es porque ya soy mayor. Hoy es mi primer día de colegio.
Me he despertado antes de lo habitual. No me puedo volver a dormir. Corro a la cama de mis padres. Me gusta dormir con mi mamá. Papá es muy grande, y me aplasta. Además me coge muy fuerte, no me deja respirar. Me da miedo decírselo, no vaya a ser que se enfade conmigo. Papá tiene mucho carácter. Nunca me ha pegado. Bueno, sólo una vez. Me tenía que vacunar y me dan miedo las agujas. Me dan mucho miedo. Salí corriendo del hospital y no paré hasta casa. Papá casi me envía de vuelta volando.
Hoy Papá también me abraza fuerte. Me escurro poco a poco y salgo a gatas del cuarto, hasta la cocina. Allí está mi madre, preparando el desayuno.
- Buenos días cariño ¿Cómo has dormido esta noche? - Me pregunta mi madre.
- Bien, aunque no me acuerdo de lo que he soñado, otra vez. Me he acordado al principio, pero luego se me ha olvidado.
- No te preocupes cariño, acabarás acordándote - Me tranquiliza mi madre al percibir que es un tema que me tiene realmente preocupado: No me acuerdo de mis sueños.
Me sirve un vaso de leche. Todas las tardes yo traigo de la leche de la casa de mi tía. Es mi tarea diaria. Cojo la lechera y cruzo el barrio hasta el huerto donde pastan las vacas de la familia. Mi tía es una señora gorda y amable siempre me pide que le dé un beso. Empieza a cansarme el tema. A fin de cuentas, ya soy mayor.
Mi padre se sienta mientras lee el periódico del domingo. Hoy es lunes 28 de agosto. El Sábado un grupo de soldados alemanes fueron apresados por el ejército polaco. El embajador francés visitó a Hitler, que es un señor que grita mucho por la radio y le rogó que hicieran las paces, de parte de su jefe, el primer ministro francés. Al no hacerle caso el señor que grita en la radio se lo rogó por las mujeres y niños en Europa. Parece que los dos habían sido guerreros en la Gran Guerra. El señor que grita en la radio, al parecer no respondió.
Le pregunto a papá como es el colegio. El es profesor. Dice que el colegio es un lugar donde aprenderé muchas cosas interesantes y jugaré con muchos amiguitos. Incluso me permitirán dibujar en un trozo de papel. Me recuerda que no debe pintar en las paredes. Tampoco en las del colegio.
Mamá me ha puesto un chaleco que odio. También odio el gorrito; pero no le digo nada a mamá. A ella le hace ilusión. Parece nerviosa por el colegio. Casi tanto como yo. Me ha preparado la mochila, con unas galletas y una manzana. Antes de salir de la casa y me ha tomado las manos y ha rezado " Pido a Dios que le otorgue a mi hijo paciencia para aprender, valentía para reconocer el mundo como realmente es y coraje para mejorarlo"
Al escucharla quedé un poquito confundido, yo creía que era mi madre quien me acompañaría al colegio pasando antes a recoger a Judá, pero parece que no, nos acompaña hasta la esquina y allí coge la dirección del establo de la familia, va a cuidar las vacas.
1.1.- MI AMIGO JUDÁ
No me gusta que mamá se vaya. Me siento seguro con ella. No es que papá no sea bueno, pero le tengo miedo. Me gusta el tacto de mamá. Me tranquiliza. Nos encaminamos hacia casa de Judá. Vive en el barrio rico. Pienso en cómo será el colegio, y los compañeros. Quizás coleccionen cromos de los 194 protagonistas de la bibli, desde Aaron hasta Zofar. Me animan a que coleccione todos los personajes, mientras memorizo sus vidas y sus enseñanzas. Tengo repetida a Séfora, esposa de Moises, hija de Jetro y madre de Gerson y Eliezer.
