A la Luna

O N E

Era de noche, luego de la competencia Luna se encontraba admirando el paisaje de su hermoso país, México.

Estaba algo triste porque habían perdido la competencia, gracias a que Ámbar los había traicionado.

Pero la castaña se sentía en paz, sentía calma en su interior, pero ahora que sabia quien era, no tenía idea que hacer o como actuar desde ahora.

Se encontraba sentada en la playa de su hermoso México y solo respiro profundo, sonrió levemente y nuevamente admiró cada detalle del paisaje que la rodeaba.

Luego de unos segundos sintió una mano en su hombro, giro la cabeza y subió levemente la mirada.

•-¿Gaston?- dijo asombrada pero con una enorme sonrisa -no vi a Nina por si acaso eh- rió.

•-¿Como sabias que te iba a preguntar sobre ella?- Gaston sonrió de lado.

•-¿Para que más me vas a hablar?- nuevamente la castaña sonrió mostrando todos sus dientes.

•-Buen punto- respondió girándose para irse pero se detuvo y volvió a mirar a Valente.

•-¿Que paso?- rió.

•-¿No te molesta si me quedo un momento?- preguntó rascándose la nuca incómodo.

Esta asintió alegre, pensaba que era un buen momento para conocer más al novio de su mejor amiga.

Gaston se sento a su lado.

Muy cerca para mi gusto- pensó Luna incomoda.

•-¿Y como estas? Pregunto, por lo de las competencia y todo eso- pronunció mirándola unos segundos y luego dirigió su vista a la Luna que brillaba frente a ellos.

•-Pensé que íbamos a ganar y que por fin Juliana iba a estar orgullosa de nosotros, que por fin si iba a valorar todo nuestros esfuerzo- la castaña se estaba poniendo nostálgica un poco -Pero...- recordó que había descubierto su verdadera identidad, pero no sabia si decirle a Gaston.

•-¿Pero?- preguntó Gaston intrigado, y esta vez no le sacaba la vista a ella, haciendo que esta se sienta algo nerviosa.

•-Es complicado- soltó.

•-Oh, esta bien, no te obligó a nada, cuando estés lista podrás decirlo- sonrió.

Luna lo miró con una leve sonrisa en sus labios.

Gaston le estaba cayendo bien, demasiado bien, y estaba segura de que era el indicado para su mejor amiga.

Sus miradas ya estaban demasiado conectadas, Gaston noto esto y volvió a mirar la Luna rápidamente.

•-Matteo- soltó Gaston de la nada.

•-¿Que?-

•-Matteo, ¿Que paso con él?- preguntó mientras agarraba una pequeña roca y la tiraba al agua.

•-Emm,mm- estaba lo suficientemente nerviosa como para que de su boca no salga ni una palabra.

•-Es complicado- dijo Gaston sonriendo.

•-Exacto, es complicado- rió.

•-Todo con Matteo es complicado- dijo chistoso, haciendo que Luna suelte una pequeña carcajada.

Gaston quedo asombrado con la risa de Luna, era alegre y tintineante.

Pero de repente la sonrisa se borro de su rostro.

•-¿Que tienes?- preguntó.

•-Gaston, ¿Que debes hacer cuando no sabes exactamente quien eres?- dijo mirando el suelo.

•-¿Como?- el chico estaba algo confundido.

•-Me siento como si fuera el Sol, pero también soy Luna, y todo es muy confuso- contó tapándose el rostro con sus dos manos.

Gaston no entendía de todo.

•-Mira Luna, puedo decirte que eres una mezcla de ambas tienes la belleza de la Luna y la luz del Sol, no tienes que elegir cual ser- dijo, y con cada palabra la sonrisa de Valente se hacia mucho más grande.

Luna explotaba de alegría, eso era lo que necesitaba algún consejo.

Por impulso lo abrazo, dejando a un Perida confundido.

Pero el chico salto una pequeña risa.

•-Luna, tu corazón late muy rápido- dijo mientras sonreía.

No recibió ninguna respuesta y estaba confundido, pero luego sonrió cerrando los ojos, sintiendo el abrazo.

Y Luna estaba con los ojos como platos por lo que había dicho.

Pero ninguno se alejaba.