-Ahh!.... Sí m-más rápido Mark.... m-me vengo...- decía el pelinegro entre jadeos y gemidos.
-Hazlo Jinyoungiee...correte para mí...-gruño el pelirrojo, pues él también sentía que se vendría pronto.
Mark aumentó el ritmo de sus embestidas al mismo tiempo que, con su mano izquierda, tomaba el miembro de su amante para masturbarlo, mientras se apoyaba sobre las caderas del azabache con la mano derecha dejando marcas rojas por la fuerza con la que lo sostenía.
El pelinegro sintió un hormigueo en todo el cuerpo acumulándose en su vientre bajo, al momento de sentir su orgasmo cerca tenso su cuerpo por completo presionando su entrada y después de tres embestidas más se corrió en la mano de su novio -Aaahhh... Maaark... -gimió fuerte, ensuciando las sábanas blancas debajo de él, mientras el pelirrojo al sentir tal presión alrededor de su miembro no aguanto más y se vino dentro del azabache provocándole un último gemido por el placer del orgasmo.
Mark sacó con cuidado su pene (ahora flácido) del interior de Jinyoung haciéndolo suspirar por el repentino vacío que sintió, y desplomándose en la cama a un lado del pelinegro, lo miró con ternura al notar que poco a poco cerraba los ojos por el cansancio -Jinyoung...te amo...- le susurró el pelirrojo curvando sus labios en una hermosa sonrisa -yo también te amo Mark... - le contestó con apenas un hilo de voz mientras caía completamente dormido.
POV Mark
Salí del baño molesto con una toalla alrededor de mi cintura, aquella ducha de agua fría no había podido calmar mi gran erección con la que me encontré ésta mañana y no quería despertar a Jinyoungiee tan temprano solo para que me ayudara con "mi problema" pues hicimos el amor toda la noche y debe estar realmente cansado y adolorido.
Pude notar como Jingyoung se movía entre las sábanas, me acerqué a la cama riendo entre dientes por los pucheros que hacia dormido, es lo más dulce y hermoso que e visto en mi vida, mierda! en serio lo amo con locura.
Me recosté a su lado pegando mi pecho a su espalda y lo removí lento para que despertara - Buenos días bebé...no piensas levantarte?- susurré en su oído a lo que simplemente contesto con un "Mmhg".
Soplé en su oreja tratando nuevamente en despertarlo pero él ni se inmutó, comencé a desesperarme pues el calor de su suave piel y su delicioso olor tan embriagante estaban haciendo que mi erección creciera aún más y comenzaba a doler.
Tome su mano con algo de duda (y tal vez miedo) y la llevé directo a mi erección, no había ninguna respuesta por su parte ni positiva ni mucho menos negativa así que la sostuve firme y comencé a guiarla subiéndo y bajando en un lento pero delicioso vaivén.
Observé a Jinyoung morderse el labio inferior lo cual sólo provoco que me calentara aún más, gire su cuerpo y sostuve su pierna derecha sobre mi hombro de un solo movimiento e inmediatamente miré aquellos labios rosados que, a pesar de haberlos probado tantas veces nunca tendría suficiente de su sabor tan dulce y adictivo.
Intenté acercarme para besarlo pero cuando estuve a unos escasos centímetros, giro su rostro, no dijo nada, ni siquiera abrió los ojos, así que comencé a dejar un camino de húmedos y castos besos sobre su mandíbula, cuello y clavículas, cuando estuve a punto de besar uno de sus pezones me detuvo poniendo su mano en mi boca.
-¿Qué crees que haces Tuan?- me dijo entre abriendo los ojos y frunciendo el ceño, no pude evitar sonreír ante aquel acto tan débil de detenerme, lamí la palma de su mano y sentí como tensó su cuerpo debajo de mí, seguí besando su pecho esta vez dejando algunas marcas rojas, lamiendo, succionando y mordiendo sus pezones -Mmngh... Aaah m-mark- enredó sus dedos en mi cabello mientras jadeaba y aceleraba su respiración.
