¿Quien eres Mi Princesa?

"Alianzas de Oro" 4ta parte.

Estaban en un pequeño cuarto detrás de la parroquia de San Lorenzo, los invitados llenaban los dientes y ya sólo faltaba la novia.
Lila se armó de valor y se levantó de la silla donde había tratado de relajar sus nervios en vano.

A estas alturas ya no era tan importante, el bebé saldría del horno en 7 o 6 meses, lo que necesitaba era un héroe y este la esperaba dentro de la iglesia.

-¡ Yo también estoy lista!-

Tomada del brazo de su madre lila salió de la habitación y paso tranquila por el caminito de piedra a las puertas de la iglesia.

El órgano de la parroquia comenzó a tocar la marcha nupcial y todos voltearon a ver a la novia en los pies de la entrada.

-¡ Te vez preciosa hija!- le dijo su padre al oído mientras está se tomaba de su brazo y la llevaba al altar.

-¡ Gracias papá!- le dijo esta ruborizada.

Con cada paso que daba su estómago parecía recordarle que estaba lleno de mariposas, los asistentes tenían la boca abierta al admirar el predios vestido de la joven.
Era un diseño tan exclusivo como desconocido el diseñador.
Aquella maravilla era digna de una reina.
Marinette tomo su lugar y sintió como su ego se inflamada con cada Alago de los presentes, se suponía que debía sentarse al lado de Bridgette, pero Félix le había ganado su lugar y al lado de este se encontraba Adrien y un lugar vacío seguido de Adrianne la cual palmeaba el asiento a manera de invitación.
Quedando así en medio de los gemelos Agrest.

La misa pareció ir de lo más lenta, no todos sabían latín, pero repetían la oración, bridgette sonreía y oraba como todos los demás.

Pero a Félix no lo engañaba, conocía bien esa sonrisa falsa y ensayada, era la misma que le ponía cuando el la trataba de alejar con su desprecio.

Era la misma sonrisa que se ponía para hacerle ver qué sus palabras no la dañaban, era su sonrisa optimista... Y falsa.
Cuando los novios pronunciaron los votos, Félix deslizó la mano y tomo la de Bridgette.

Tal como lo supuso, está estaba tensa, sintió que temblaba bajo su mano, ¿Era rabia?,no, ¿Miedo?, No Bridgette no era cobarde o miedosa, de ser miedo o rabia no estaría ahí.

Era dolor, le dolía, en el fondo se había enamorado de ese hombre y verlo casarse con otra era una tortura.
Bridgette deslizó sus dedos entre los de Félix y los apretó ligeramente, el la miro de soslayo y vio que tenía los ojos cerrados.
Le estaba tomando toda su fuerza de voluntad para no llorar y eso era admirable.

Si el ya odiaba a Rafael, está boda solo avivaba las llamas de su odió.

🍴🍷🔪

El alcohol fluyo como un río, no fue una bebida barata sino la más fina, Virgilio terminó borracho como una cuba, no todos los días tu hija se casaba.
Los 6 hijos de Virgilio se hicieron cargo de los gastos del banquete y de la bebida.
El piao Chong se encargó de que las mesas estuvieran bien atendidas.

Al llegar la media noche, los novios subieron a un carruaje y partieron de luna de miel, lila no regresaría hasta que tuviera al bebé.

La fiesta siguió adelante sin los novios, fu se quedó dormido en una mesa y Feng se tuvo que encargar de buscar a alguien que lo ayudará a cargar a Wang a un carruaje.
Su primera opción fue Félix, pero hizo la idea a un lado cuando vio al joven dirijirse a su nieta.
Félix le tendió la mano a bridgette, ella no dijo nada, miro aquella mano como si no supiera que hacer con ello.
Después de unos momentos que parecieron eternos ella tomó su mano y lo siguió al salón la melodía era tranquila y harmoniosa.

Feng sintió como su corazón se alegraba y al igual que su nieta, hizo una pequeña plegaria.