1960 barrio Emilio Botero
Andrés Chaparro nunca tuvo una vida repleta de lujos, su nacimiento tampoco fue la mayor alegría que pudiera experimentar su familia,una boca más que alimentar era lo que pensaron con su llegada, fue sometido siempre a reglas extrañas de su impaciente madre, tuvo que despertar a una fría realidad que no se desearía a ningún niño pequeño como él, obligado a ver con rudeza los constantes maltratos que infligía su padre hacia aquella persona que lo trajo con dolor al mundo, unas tías que lo rebajaban a un animal de granja, mientras estaba a sus cuidados, comía los desperdicios, hacia el aseo de su casa sin parar, mientras resistía las diferentes humillaciones que ellas le daban, no tenia a quien contarle, no tenía alguien para desahogarse, desde que tenia tres años era el encargado de conseguir su propio dinero si deseaba sobrevivir, ya no era un niño a los ojos de su familia, era un animal más, la única persona que le miraba con algo de misericordia en lo profundo de su ser era su madre, pero ni siquiera ella fue capaz de darle el cariño que necesitaba.
el 6 de junio de 1965, todo cambio para él, se dio cuenta que no tenia a nadie en su miserable vida, que no podía confiar en nadie, a las 5:30 mientras la tarde transcurría de manera fría su padre llego ebrio, Andrés se encontraba como todos los días lavando la loza, sintió un fuerte portazo procedente de la entrada se asomo con mucho cautelo para observar la escena, su madre quien se encontraba leyendo en uno de los sillones de la sala fue la elegida para recibir la furia que se albergaba en él, agarro la coleta que tenia su madre la levanto con fuerza mientra ella lloraba de dolor, tomo su frágil cuello e hizo una fuerte presión, Andrés con los ojos cristalizados corrió hacia el, y le grito que parara, que la iba a matar, su padre hizo una mueca de desagrado tiro a la mujer al suelo se acerco a su hijo con los puños cerrados, Andres quedo petrificado ante las acciones de su padre, lo tomo de la muñeca derecha y lo arrastro hacia uno de los cuartos que se encontraban en la parte baja de la casa, lo tiro con brutalidad y le cerro la puerta sin mirar atras, mientras andres golpeaba con toda su fuerza la gran puerta de metal, su padre lo miro con desprecio y le grito desde las escaleras "ESTO TE ENSEÑARA A NO ENTROMETERTE EN ASUNTOS AJENOS" "LE ESTABA ENSEÑANDO A TU MADRE BUENOS MODALES" sin fuerza alguna, lo único que logro hacer fue desplomarse en el suelo helado de la habitación que estaba completamente vacía, en sollozos trato de fijarse en más detalles. sus paredes estaban húmedas incluso podía mirar como algunas gotas de agua caían desde lo alto, con esfuerzo encontró una pequeña rejilla que le daría libertad pero por más que la forcejeaba no lograría salir por allí, sus dos tías bajaron al enterarse del castigo que le había impuesto su padre, ambas buscaban entre la oscuridad de la habitación el cuerpo pequeño de Andrés, lo encontraron sentado en posición fetal en una de las esquinas del cuarto, unos pensarían que ellas se apiadarían del pobre, pero solo bajaron a verlo para burlarse de su situación, mientras se carcajeaban una de ellas le dijo " no se de que te quejas, si, toda, tu vida perteneciste a un lugar lleno de ratas", Andrés a pesar de todo se sentia un poco feliz en el interior, al menos logró salvar a su madre, mientras veia hacia la puerta desolado, sintio una especie de suave azote en su pierna, era una rata, su tía Magda tenía razón había ratas y ahora viviria con ellas, pero no le parecia extraño, de todos modos ya no se consideraba él mismo ni siquiera un ser humano, ¿cómo si nunca fue visto y mucho menos tratado como tal? pasaron dos días y él seguía en el oscuro cuarto cual individuo olvidado, su estomago rugía del hambre, ya no tenia esperanzas de salir, ya no quería ni siquiera vivir, una pequeña rata paso por su lado y un deseo intenso de matar se apodero de él, no le tomo ni tres segundo cuando ya tenia agarrada la rata, sus dientes eran fuertes para poder arrancarle con desprecio la cabeza y alimentarse con su cuerpo, mientras la rata chillaba pidiendo auxilio, Andres dejo de dudar y empezó a morder, tan hambriento estaba que se la comió entera no le importo si estaba sucia o si le daba alguna enfermedad, al menos sacio su hambre, aprendió a sobrevivir bebiendo el agua que se filtraba por las paredes y comiendo una que otra rata o insectos que pasaba, 6 días pasaron cuando su padre le dio permiso a Julieth su madre a que le dejara salir, Julieth lo encontró lleno de sangre la boca, con sus prendas sucias y sus piernas mas delgadas, Andrés le abrazo como si no hubiese un mañana pero ella no le mostró afecto , es más solo le sentía repugnancia lo alejo de su cuerpo y lo mando a lavarse y cambiarse , su tío le dio algo de comer cuando ya había cumplido las ordenes de la madre, pan con queso y agua panela, el niño se lo devoro en menos de un minuto mientras su tío le veía como si fuera un bicho raro y asqueroso con ausencia de modales, pero que modales va a tener si lo criaron como si fuera un animal.
YOU ARE READING
La maldición de los Chaparro
Horrorhistoria basada en su mayoría en casos reales El peor error que pudo cometer Natalia España fue unir su vida con Andres Chaparro, las desiciones que tomas siempre se pagan en algún momento de tu vida, pero Natalia deberá pagar con sangre.