-Parte única-

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Un joven pálido de cabellos oscuros como la fría noche de aquel día y ojos tan negros como su mismo cabello, que llevaba un esmoquin igualmente negro, aparentemente venía de una boda, iba conduciendo su lujoso auto negro por la carretera empapada de gotas de lluvia de manera rápida y desesperada como si escapara de alguien con rumbo desconocido.

¿Por que lo hacía?

Eso era facil,quería llegar a su departamento lo más antes posible, talvez... para llorar y por que digo esto? Pues venía de "celebrar" la boda de sus dos mejores amigos, seguro pensaran.

¿En que le afecta esto a el?

Pues digamos que... ¿Como te sentirías si el amor de tu vida que amastes desde que tienes memoria de un día para otro se casara con tu mejor amiga? ¿Te sentirías destrozado, cierto? Pues eso es lo que siente nuestro joven azabache.

Fingir estar feliz, tener que mostrar una sonrisa alegre, cuando enrealidad estas sufriendo por dentro,bte destroza...

Tener que ver la vestida de novia, tener que sonreírle cada vez que preguntaba si estaba feliz por ellos, era abrumador.

Aun recuerda aquel horrible día que desearía que nunca ubiera existido cuando sus mejores amigos le dijeron esas tan dolorosas palabras... somos novios, como si fuera ayer.

•••

Era un día normal por así decirlo el de cabellos negros estaba en el departamento de su mejor amiga Joy, junto a su también mejor amigo y la persona de la cual estaba enamorada profundamente, Freddy, los cuales lo habían invitado a ir aquel lugar ya que tenían que decirle algo muy importante.

El oji-negro vio como el oji-azul se sentaba en uno de los sofás seguido de la rubia la cual se notaba extrañamente cariñosa con el anteriormente mencionado, lo que hacía sentir al azabache ciertamente incómodo por la actitud de su mejor amiga, se sentó en uno de los sofás, justamente al lado suyo, cuando lo hizo la única chica habló.

-Fred, Freddy y yo tenemos algo importante que decirte- musitó la rubia de manera feliz mientras se apegada al brazo derecho del castaño que solo se mantenía callado -¡¡Somos novios!!- gritó eufórica,mientras tanto el de piel pálida casi gris, se quedó en shock mientras procesaba lo que acababa de decir la oji-zafiro... 'Somos novios, somos novios, somos novios' era lo único que se repetía en la cabeza del peli-negro.

No podía creerlo, realmente se negaba a aceptarlo, el estaba totalmente decidido a no aceptarlo.

-Oye ¿Estas bien Fred?- por fin pronunció palabra el castaño pero solo para sacar de aquel tranze al de cabellos oscuros que se encontraba en un estado de shock sin formular ninguna palabra mientras miraba a la nada,viendo que sus palabras no parecían despertarlo empezó a mover su mano de un lado a otro frente a su rostro lo cual funcionó.

-Si, si claro... estoy feliz por ustedes- dió una sonrisa forzada -Bueno creo que mejor yo me iré- se levantó de su asiento con dirección a la puerta de aquel departamento que ahora lo único que le hacia sentir era dolor,
realmente no se podía quedar un segundo más en aquel lugar, tenia que irse lo más antes posible si no lo hacia sentía que rompería en llanto frente a ellos en cualquier momento.

-¿Mmm?... ¿Tan rápido?- preguntó confundida la rubia por el repentino comportamiento de su amigo.

-Si... es que tengo algo que hacer... bueno adiós- salió de ese departamento con dirección al suyo, bajó al estacionamiento y se subió a su auto empezando a conducir, mientras unas lágrimas amenazaban con salir de sus hermosos ojos vacíos.

«Por favor, no //one-shot// Frededdy»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora