Capítulo 4

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  Los tres chicos llegan a la cantera, Bill se levanta de inmediato y se acerca a ellos.

— N-nos pre-preocupamos por ustedes —suspira aliviado.—

— Hola —saluda ____ al chico moreno .— ¿Mike Hanlon, no?

— Así es —sonríe levemente.—

— Yo soy ___ Tozier, ella es Beverly Marsh y el Ben Hascom —los presenta con amabilidad.—

—  ¡Tuvimos una guerra de rocas genial! —exclama el pelinegro.— Fue lo más genial que hice en toda mi vida.

—  Fue contra Bowers y sus amigos. Eso lo hizo aceptable, creo —opina el judío.— Cómo sea, hoy  fue un día ajetreado, ¿que hacemos ahora?

— ¿Vamos a la heladería? —todos asienten ante la propuesta de Beverly....—

   La pelirroja se acerca a ____ y acaricia su mejilla:— Tu vienes conmigo, no quiero que subas a la bicicleta de otro —le dice con burla y ella ríe.—

— Bien, vamos, Bev —susurra con alegría.—

   [...]

  Estacionan en el principio de un callejón y se acercan al carrito de helados.  Las últimas en pedir fueron las únicas dos chicas del grupo.

— Frutilla, y Chocolate —dice Beverly al vendedor.— Para ella uno de vainilla y limón.

  El hombre, con una amistosa sonrisa, voltea para preparar los helados:—¿Cómo es que sabes mis sabores favoritos? —Beverly se encoge de hombros.—

— Nos conocemos hace años, niña,  te conozco a la perfección —toma los helados y ___ pone el dinero.—

— Te invito yo —mira al hombre.— Muchas gracias —caminan hasta los chicos y se sientan en el césped.—

— Se transforma en lo que más le tememos —termina de contar Ben.—

— ____, ¿tu lo viste? —ella asiente ante la pregunta de Bill.—

— Primero era una araña, demasiado grande, luego lo vi a el.

— ¿Podemos comer helado en paz?. Esto de...de Eso me tiene harto —todos miran a Stan.— Es verano, ¡debemos divertirnos! ¡Somos niños!

   Durante el tiempo que estuvieron en el parque, nadie dijo nada. Las únicas que disfrutaban el momento en silencio,  eran Beverly y ____, quienes se miraban picaramente de vez en cuando.

    La niña Tozier se confundía cada vez más.  Moría de ganas de que ella y Marsh fuesen pareja, ambas se sentían así, pero desde el beso jamás se propusieron ser pareja.

— ¿Que hay entre Beverly y tu, eh? —su hermana se sonroja de inmediato.—

— Nada, Richie Bocazas Tozier. ¿Y que te importa tanto? —ríe. El detiene la bicicleta frente a su casa y los dos bajan.—

— Me importa mucho, porque no solemos expresarnos bien entre nosotros. Ya  sabes, me refiero a que nunca hablamos de nuestros problemas o de cómo nos sentimos, ___ —se pone nervioso, deja escapar un suspiro y se acomoda las gafas.— Sabes que te apoyo, aunque no sea demostrativo.

— Bueno... ¿Recuerdas que hace unos días salí con ella a Rosie? —pregunta, Richie asiente.— Ese día, nos besamos.

— ¡Woah! ¿Tu primer beso?

— Así es, ¡y fue increíble! Pero... hui —Richie golpea su propio rostro con su mano.— ¡Entre en pánico!  ¿Si?

— Bien, puede ser entendible.

Mi Linda Pelirroja -Beverly Marsh-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora