Un día común, la rutina es tan aburrida, son las ocho de la mañana la misma hora a la que me despierto siempre, observó el techo un momento, cojo el celular para revisar Facebook y WhatsApp, no hay nada relevante, nada emocionante como cada día. Ocho treinta de la mañana, me siento en la cama viendo aún mi celular, usando las vidas diarias de un par de juegos hasta que mi alarma me avisa que son las nueve de la mañana.
Decido levantarme, tomo lo primero que hay a la mano y me cambio para ir a trabajar, voy al baño mientras sigo jugando, cuando me doy cuenta ya son las nueve y media.
-Oh no, debo apurarme o se me hará tarde de nuevo- me digo a mi misma.
Salgo del baño y me coloco los zapatos, bajo rápido y arreglo mi maleta para irme, tomó una taza de leche, agarro la bolsa de mi comida y suena mi celular de nuevo, la alarma anuncia que son diez para las diez.
-DEMONIOS!- Exclamo- Ya se me hizo tarde de nuevo- agarro mis llaves- Ya me voy mamá, te veo al rato- Grito al ir saliendo de casa.
-Que Dios te acompañe hija, cuídate mucho y que llegues a tiempo- Me grita mi madre mientras yo salgo corriendo.
Camino rápidamente, la misma ruta, las mismas calles, la misma gente abriendo sus negocios, no saludo a nadie, nunca lo hago, me coloco los audífonos, escuchar música en el camino me lo hace más ameno. Son las diez con un minuto, llego a las puertas de mi trabajo, no está la señora de la puerta.
▪Que bueno que no está Juana, así no me va a molestar▪ Pienso mientras camino rápidamente al checador, tengo solamente cinco minútos de retardo permitidos, debo apresurarme si no quiero que me regresen, llego al checador el cual marca diez con tres minutos.
-Pff, justo a tiempo- digo mientras subo las escaleras a la oficina, recorro el mismo camino de todos los días para llegar a la oficina -Buenos días a todos- Digo al entrar.
-Buenos días Alex, ¿como estas?- Me pregunta la chica que se sienta al lado mio, Bethany, ella es la típica chica mimada, que cree que todo es suyo en el mundo, una hija de papi que solo trabaja porque no tiene nada mas que hacer, si esto fuera una escuela ella seria la barbera lame huevos del grupo, pero como no es la escuela es la consentida de los jefes, la clase de persona que no me gusta y con quien convivo solo porque tengo que hacerlo, soy tan hipócrita gracias a estas situaciones, no puedo simplemente decirle "me caes mal" porque tenemos que trabajar juntas y eso haría más tedioso el trabajo.
-Bien ¿y tú Beth?- Contesto mientras dejo mis cosas en la silla y voy al refrigerador a dejar mi bolsa de comida, me siento en mi silla y comienso a echarme aire con un papel que tengo en el escritorio.
-¿Venias corriendo?- Pregunta Beth.
-Se me hizo tarde de nuevo- Contesto ▪Cómo todas las mañanas y me hecho aire como todas las mañanas, ¿porque siempre me preguntas lo mismo?▪ Reclamo en mi mente mientras sigo echándome aire y prendo la computadora, es hora de ponerme a trabajar.
El tiempo transcurre rápido, realizo mi trabajo y sigo la rutina, rápidamente son las dos de la tarde, es hora de ir a comer.
-Oye vamos a comer, ya son las dos- Me dice Lia, ella es una historia completamente diferente a Bethany, Lia es una persona centrada, una persona que sabe que no es el centro del universo, es una persona que sabe escuchar y ayudar a los demás, alguien que trabaja para ganarse lo que tiene, una buena chica, la clase de persona con quien saldría sin problema y me agrada tener en mi vida.
-Si, dame un momento, mando este correo y nos vamos- Le contesto sin levantar la vista del ordenador, mando el correo y me levanto -Listo, vamonos ya.
Nos dirigimos al refrigerador, sacamos nuestra respectiva bolsa de comida y nos vamos al comedor a calentarla. Tomamos un par de sillas libres y nos sentamos a comer, reviso mi celular de nuevo, me río de un par de memes que le muestro a Lia quien también se ríe, continuamos comiendo sin decir nada hasta que yo hablo.
-Y... ¿Como van las cosas con Ian?
-Igual, aún no decidimos si mudarnos a vivir juntos o no.
-Mmmm ¿y que es lo que se los impide?- Pregunto sin interés alguno, solo quiero hacer conversación.
-El dinero y que ninguno ha vivido por su cuenta nunca, me da miedo ¿sabes?, ¿que pasaría si no funciona? ¿terminaríamos?.
-Pues no lo sabrán hasta que lo intenten, yo opino que junten dinero y decidan ya dar el paso siguiente, así se acercan un paso más a la boda- Le guiño el ojo mientras continuo comiendo.
-Jejeje puede que tengas razón -Se sonroja un poco mientras continúa comiendo.
Terminamos nuestros alimentos sin decir nada más, salimos del edificio y nos vamos a consumir un cigarro.
-Y tú ¿cuando conseguirás novio? -Me pregunta tomándome un poco por sorpresa.
-¿Un novio? ¿Para que querría un novio?.
-Sabes bien para que querrías un novio -Me dice con una expresión pícara en el rostro.
-Jajaja ya te he dicho que si quiero besos o sexo puedo conseguirlo cuando quiera de quien quiera sin tener que relacionarme sentimentalmente con la persona.
-Pero, ¿acaso no quieres sentir la emoción de la montaña rusa de sentimientos que son las relaciones?.
-Jajaja para nada, no quiero que mi vida sea un drama, estoy bien así, solo satisfaciendo mis necesidades de vez en cuando con un par de personas seleccionadas.
-¿No temes contagiarte de algo?.
-No lo hago con cualquiera y lo sabes, soy muy selectiva, primero los conozco y me aseguró que estén sanos- Termino dándo un buen jalón al cigarro.
-Bueno, eso sí, nunca te he visto irte con un extraño que acabas de conocer pero...
-Ni me verás hacerlo -La interrumpo, me comienza a fastidiar la conversación- Vamos ya de regreso, son las tres.
-Es verdad -Dice mientras ve su reloj- Vamos antes de que nos regañen.
Regresamos a la oficina a trabajar cada una en su puesto mientras pasa el resto del día, continuando con la aburrida rutina, dan las seis y media de la tarde, me estiro, me levanto de mi lugar y me voy al lugar de Sara, ella es la típica parlanchina que le gusta el chisme, pero es buena onda y no inventa nada, solo escucha lo que los demás tienen que decirle, aunque no estoy muy segura que sea buena idea decirle un secreto, puede que no se quede de ese modo, sin contar esto es una persona muy agradable y con quien puedes platicar sin pelos en la lengua, la clase de personas que me agrada tener a mi alrededor.
-Hola de nuevo- Le digo sentándome frente a ella.
-¿Que paso Alex?.
-Nada, estoy aburrida.
-Yo también pero ya solo falta media hora para salir -Me dice y sonríe.
-Siiii, ya solo media hora, que alegría, sabes, quiero hacerme un cambio -Digo pensativa.
-¿Cambio de que?-Pregunta levantando una ceja.
-No lo se, un cambio de look supongo, quiero verme diferente.
-Mmmm ¿y que planeas hacer?.
-Mmmm -Dudo un momento- Ya se, me cortaré el pelo.
-¿Qué? Pero si tu amas tu pelo largo.
-Lo se pero ya estoy cansada de ver lo mismo todos los días frente al espejo-Digo y me levnto- Pero bueno ya vere.
Me voy a mi lugar, termino un trabajo y apago la computadora, justo a tiempo, son las siete de la tarde, es hora de salir, recojo mis cosas, me despido de todos y me dirijo al checador, marco mi salida y me retiro a casa. Con los audífonos puestos me dirijo por el mismo camino que recorro todas las tardes para regresar a casa, compro un elote en el camino y me lo termino antes de llegar, en la entrada saco las llaves y abro, entro cerrando la puerta tras de mi, dejó las llaves en su lugar y me quito los audífonos.
-Ya llego por quien llorabas madre -Saludo - Oye, cortarme el pelo ¿Si?.
-¿QUE?!-Exclama mi madre- ¿Ahorita? ¿Porqué? -Me pregunta sorprendida.
-Si ahorita, porque si.
-Mmmm ¿estas segura?-Pregunta dudando.
-Si mamá, estoy segura, anda córtalo ¿Si?-Insisto.
-Ok, esta bien, siéntate y te lo cortaré-coloco una silla con periódico debajo
-Siiii, gracias mami -Digo mientras me siento.
Cepillo mi cabello para que no me jale mi madre, ya cepillado mi mamá comienza a mojrme el pelo y cortarlo, solo veo como caen poco a poco los mechones de cabello, estoy emocionada por el cambio que he decidido, cuando termina de cortarme el pelo le ayudo a levantar y barrer el espacio, me dirijo al baño y tomo un largo y relajante baño, salgo de bañarme y coloco una toalla enredada en mi pelo para que se seque, me coloco el pijama y bajo a tomar una taza de leche antes de ir a dormir, reviso una ultima vez el celular y me voy a dormir, se he terminado por fin un día más.
Mi alarma suena a las ocho de la mañana como cada día, abro los ojos y me quedo mirando el techo.
-Hoy será un día nuevo, cambiare la rutina- Me digo animada, tomo el celular y reviso Facebook y WhatsApp -Mmmm, supongo que hay cosas no que cambian- Me río entre dientes y me dirijo al baño mientras juego.
Me lavo las manos y salgo del baño, voy a mi cuarto y checo que podría ponerme hoy, veo la ropa que tengo, elijo unos jeans negros y una blusa azul marino con un escote en V, me pongo los zapatos y bajo a desayunar, me pinto los ojos y arreglo mis cosas, desayuno, suena mi alarma avisandome que son las nueve y media de la mañana.
-Excelente, hoy no tendré que correr- Me digo mientras cepillo mi ahora corto pelo- Ya me voy madre, te veo al rato- Me despido y salgo de casa.
-Cuídate hija, que Dios te acompañe- Se despide mi madre y cierra la puerta.
Hoy me siento animada, desperté con el pie derecho, quiero que mi rutina cambie y se que voy por buen camino, escucho música mientras camino al trabajo, llego a la entrada del edificio, son diez para las diez y hoy si esta Juana en su puesto.
-Buenos días Alex, que milagro que llegas temprano.
-Buenos días Juana, ya ve, me caí de la cama yo creo- Le dirijo una sonrisa fastidiada ▪Y de nuevo metiéndose en lo que no le importa, como jode que sea tan metiche▪ Pienso mientras entro al edificio y me dirijo al checador, saludo a un par de personas que me encuentro en el corto trayecto, cuando checo marca las nueve cincuenta y tres, subo las escaleras y entro a la oficina con los audífonos puestos aún.
-Buenos días a todos- Saludo sin quitarme los audífonos, no me interesan las típicas respuestas, dejó mis cosas en mi lugar y llevo mi bolsa de comida al refrigerador, me dirijo a mi silla para ponerme a trabajar, me quito los audífonos y prendo mi ordenador.
-¡No!- Grita Beth- ¿Porqué Alex? -Me pregunta.
-¿Qué te pasa Bethany? -Le pregunto confundida -¿Porqué que? Y ¿Porqué gritas como loca?.
-Alex ¿Porqué te cortaste el cabello? ¿Ahora como te voy a peinar?-Pregunta acercándose y acariciando mi cabello.
-Dejame -Le digo quitando su mano- Sabes que no me gusta que me agarren la cabeza ni que me peines, y me corte el cabello porque quise, punto- Digo un poco molesta ▪¿Qué? ¿Acaso tenia que pedirte permiso para hacerme lo que yo quiera o que pedo?▪ Pienso algo molesta con la actitud que ha tomado referente a mi decisión ▪Escuincla mimada y metiche, como me jodes▪ Sigo reclamando en mi mente.
-Te queda muy bien ese corte -Me dice Lia mientras se acerca.
-Gracias Lia-Le dirijo una sonrisa.
-¿Porqué decidiste contártelo si amabas tu largo cabello Alex?
-Porque, quería hacer un cambio y decidí que iba a ser esto y....
-Si lo hiciste, que buena onda -Me interrumpe Sara que va entrando a la oficina y nota mi cambio de look.
-Si Sara, ¿acaso no me creíste cuando te dije que lo haría? -Pregunto fingiendo sorpresa e indignación.
-La verdad no, pensé que no te atreverías -Se ríe un poco
-Obvio que si lo haría- Le enseñó la lengua
-Pues te quedo muy bien, me gusta el corte- Me dice y me enseña la lengua también
-Es verdad, te quedo muy lindo, lo único malo es que ya no podre peinarte -Dice finalmente Beth para no estar excluida en la conversación
-Gracias Beth y no te preocupes que no me molesta que ya no te acerques a mi cabeza -Le digo sonriendo -Pero bueno niñas, vamos a trabajar que para eso nos pagan jajaja- Nos echamos a reír y cada una se dirige a su lugar de trabajo.
El tiempo pasa rápido y dan las dos de la tarde, es hora de comer, me levanto de mi asiento y me dirijo al lugar de Lia.
-¿Nos vamos? -Le sonrió.
-Claro, vamos -Me dice y se levanta de su asiento.
Vamos al refrigerador, sacamos nuestra respectiva comida y nos dirigimos a calentarla, cuando Lia va a tomar una silla libre la detengo.
-No no no, hay vamos a comer afuera. -Le digo y me dirijo a la puerta
-Bueno, esta bien -Acepta sin problema.
Nos dirigimos a una banca que esta fuera del edificio, comemos y fumamos un rato.
-Está como mas agradable acá afuera ¿No?- Le pregunto mientras termino mi ultimo bocado y guardo mis cosas
-Pues si, esta tranquilo-Me dice guardando sus cosas -Pero ya son las tres, es hora de entrar -Me dice y se levanta de la banca.
-Está bien -Le digo mientras me levanto.
Nos dirigimos a la oficina para continuar con nuestro trabajo, dejó mis cosas en mi lugar y me dirijo a la puerta de la oficina, hoy aparte de mi cambio personal tengo una nueva tarea, aunque sólo me toque hacerla hoy porque no vino la persona que se encarga de ello, me ayuda a cambiar la rutina de este día. Bajo las escaleras y me dirijo al área de sistemas, me toca revisar que el trabajo se realice adecuadamente, camino tranquilamente hasta llegar.
-¿Hola? -Saludo mientras entro a lugar.
El área de sistemas es completamente diferente a la oficina, en lo que se parecen es que hay varias computadoras pero la diferencia es que en oficina es una por persona y aquí todas son para un solo ocupante, hay cables y otros aparatos que desconozco para que sirven.
-¿Hola?, ¿Estas aquí Dren?.
-Hola Fany -Dice una voz que sale de entre las maquinas.
-No soy Fany, soy Alex, hoy me toco hacer el trabajo de Fany por que no vino -Digo mientras me dirijo a donde proviene la voz.
-Oh ya veo, esta bien Alex -Continúa realizando su trabajo y me explica lo que hace Fany y que debo hacer hoy, cuando me doy cuenta ya son las cinco de la tarde.
-Se me fue toda la tarde aquí- Digo mientras me dirijo a la puerta.
-Si, fue más lento de lo habitual porque no sabias que hacer, pero aprendiste rapido- Me dice al tiempo que se acerca a mi -Y ¿a donde vas a ir tan linda?.
-Jajaja a ningún lado- Le respondo -Solo regresare a la oficina a trabajar.
-Yo pensé que iba a salir con tu novio o algo, ya que estas muy linda -Me dice mientras me recorre con la mirada y la detiene por un momento en mi escote.
▪¿Qué pedo con esos alagos?, mínimo debería intentar ser original, y debería ser mas discreto al verme el escote▪ Pienso mientras lo observó sin responderle.
-Lo siento si te moleste -Me dice y levanta la vista a mis ojos
-No me molestaste, no te preocupes -Respondo rápidamente
- Eso es bueno, a ver cuando salimos ¿No?
-Aja- Digo sin prestar atencion ▪Que poco original es este wey▪ Pienso mientras hago una mueca.
-Bueno, solo si quieres, ¿O te pega el novio?- Dice con una sonrisa
-No tengo novio -Respondo automáticamente ▪Que frase tan naca, ¿en serio ya a nadie se le ocurren cosas nuevas?▪ Pienso sin dejar de verlo.
-¿Y eso?, ¿Como es que una chica tan linda no tiene novio?.
-No necesito novio, no quiero drama en mi vida -Respondo un poco molesta, odio que la gente pregunte como o porque no tengo novio.
-Que bien, una chica independiente
-Aja, ¿y tú? ¿tienes novia? -Suelto la pregunta directa y cortantemente.
-¿Eh?, si, si tengo novia -Dice un poco nervioso.
-Mmmm ¿y cuanto tiempo llevan juntos?- ▪¿Qué onda con este wey?, me coquetea y tiene novia!▪.
-Un par de meses -Dice ya más tranquilo.
-Ya veo, que tierno -Digo sin mostrar ninguna interes- Bueno me voy, tengo que regresar a trabajar.
-Está bein, espero verte por acá de nuevo -Me dice y se despide de mano.
-Si, posiblemente -Le digo dándole la mano.
Regreso a la oficina, son las cinco y media de la tarde, voy al escritorio de Lia y me siento frente a ella.
-Lia ¿que haces?.
-Trabajar, obvio ¿y tú? ¿Porqué tardaste tanto? .
-Estaba en sistemas, como no vino Fany me toco hacer su trabajo y pues en lo que me explicaban se me fue el tiempo.
-Oh! Ya veo, ¿y que tal te fue con el chico de sistemas? -Dice con voz picara mientras me guiña un ojo.
-Jajaja ¿pues como me iba a ir?, bien, aprendí un par de cosas y ya -Le digo entre risas, Lia siempre trata de emparejarme con cualquier tipo.
-Y que tal, es guapo ¿no?.
-Jajaja para nada, no es mi tipo -Digo riendo -Además no te emociones tiene novia.
-No lo sabía.
-Aja, pero bueno, seguiré trabajando.
Me dirijo a mi escritorio, realizó un par de pendientes que tenia, mando unos cuantos correos y cando me doy cuenta son las siete de la tarde, es hora de salir, apago la computadora y me despido de todos, voy al checador, marco mi salida y me dirijo a casa, escuchando música y pensando en Dren ▪Que chico tan tonto, me coquetea y tiene novia, además sus cumplidos y frases son tan viejos, en serio ¿no pueden ya inventarse cosas nuevas?▪. Llego a casa, saludo a mi madre, meriendo algo y me dirijo a la cama, hoy fue un día divertido pero agotador, reviso el celular una ultima vez y me dispongo a dormir, un día más finaliza.

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Cambiando La Rutina
SpiritualElla solo esta harta de su rutina, quería solo un poco de emoción en su vida y encontró lo que buscaba y más