Una chica cristiana

1998.

31 de octubre.

-¡Tenemos que llevarla al hospital esto no es normal! ¡Ve por un taxi!

-¿Crees que voy a perderlo?

-No lo sabemos tenemos que llevarte al hospital

-No quiero perderlo mamá

-El taxi ya está afuera

-No lo vas a perder hija... respira, vamos con cuidado...

El taxi salió en marcha lo más rápido posible, la vida de un bebé se estaba viendo afectada y lo más importante era saber ¿cómo surgió ésta situación?El taxi aparco en la entrada del hospital, Susana y Pedro ayudaron a bajar a su hija y se dirigieron rápidamente a la sala de emergencias.

-Buenos días ¿en qué la puedo ayudar?

-Señorita mi hija está embarazada y necesita que la atiendan de inmediato, es grave, por favor

-No se preocupe señora, la llevaremos a uno de los cuartos de urgencias y el médico la atenderá de inmediato, sígame por favor

-Muchas gracias señorita...

Recuestan a Aurora sobre una camilla y rápidamente la llevan a los cuartos de urgencias, una vez estando Aurora acostada en  la cama el médico no tarda en entrar.

-Buenos días señora Aurora, soy el médico Esteban, me acaban de informar que necesitaba que la atendiera, dígame ¿cómo se siente?

-Doctor, es evidente que estoy embarazada tengo siete meses, pero hoy en la mañana que desperté y me levanté ví que había sangre en el colchón, me asusté mucho y rápidamente mi mamá me ayudó a cambiarme, me puse una toallas sanitarias pero seguía sangrando, como si estuviera en mi mes, tuve mucho miedo de que pudiera abortar en ese momento y me trajeron al hospital, no siento ningún dolor solo es el sangrado como la menstruación. Doctor ¿voy a perder al bebé?

-No hay que precipitarnos a decir que lo perderá, primero necesitamos hacer unos estudios... si usted dice que no hay dolor y que el sangrado es similar al de la menstruación, puede que no haya riesgo de perderlo mientras el sangrado sea pausado tal y como la menstruación. Pero sí tenemos que hacer unos estudios rápido para ver qué es lo que está provocando el sangrado y ver que no afecte al bebé. La tendremos en observación, tiene que quedar en el hospital.

Al día siguiente.

-Señora, tengo que decirle que usted no tiene siete meses de embarazo, tiene ocho meses. Y estuvimos haciendo unos estudios y no hemos encontrado absolutamente nada, necesitamos que se quede con nosotros para que podamos seguir haciendo estudios y podamos definir la causa del sangrado.

-Esta bien doctor, solo avise a mi marido de la situacion y dígale que cuide mucho a nuestro hijo Raul, y por favor, haga todo lo posible, ya tengo un hijo pero tengo tanto miedo de perder al bebé que viene en camino.

-No se preocupe señora, haremos todo lo posible. Cualquier dolor o malestar que sienta háganoslo saber para actuar de inmediato, pero sobre todo mantenga la calma.

Una semana después y Aurora seguía en la cama del hospital, el sangrado no se detenía y los médicos aún no encontraban respuestas.

Era noviembre y  desde que había llegado al hospital Aurora, todos los días le pida con todas sus fuerzas a Dios por su bebé, tenía tanto miedo que algo malo sucediera. Ya falta un mes para completar los nueve meses del embarazo hasta que...

-Buenas noches doña Aurora, vengo a darle noticias. Al fin hemos encontrado respuestas.

-¿Qué está pasando? ¿Mi bebé morirá?