Narra guido:
Estoy yendo a la casa de nuria. Hace dos semanas se cumplió un año de la primera vez que nos vimos. Estoy hasta las manos con ella. Los primeros meses parecíamos amigos con derecho, pero hace unos meses la cosa se puso mas seria. Viajamos juntos a Bariloche tres semanas y me sentí muy bien caminando de su mano. Solo quiero llegar y decírselo.
Me recibió con una remera mía que había dejado en su casa y bombacha, siempre esta desnuda y me encanta que sea así. Solo la tome de la cintura y la lleve a los besos hasta su cama. G: Hola hermosa. N: hola salvaje. -comencé a besar su cuello y acariciar sus pequeños pechos, me volvía loco, era una fiera. G: como estas?. N: Caliente bebe. -dijo en tono sexy y me reí. G: me gustas mucho Nuria. -acarició mi cara suavemente y me miro tierna. G: queres ser mi novia? -solté de golpe. Ella me miro sorprendida, sabia que esto no seria nada normal y para nada fácil. N: ¿vos estas bien guido? G: si y estoy muy seguro de esto. Aparte en unas horas nos esperan en casa y esta vez quiero llegar de tu mano. N: ¿es por tu familia? G: dale potra no me la hagas mas difícil. Queres o no queres. -me miro firme y con dulzura. N: si Guido Armido Sardelli, si quiero ser tu novia. -le sonreí feliz y comenzé a hacerla mía. Le arranqué su bombacha roja y adentré mi boca en su zona de placer, aquella que me volvía loco. Jugué con mi boca mientras ella me despeinaba. Subi con besos hasta llegar a su boca y ella comenzó a desnudarme, luego se subió encima mío para apoderarse de mis demonios. Amo como me mira fijo mientras me coje, podría dar todo por esa mirada celeste y oscura.
Narra Nuria:
Guido acaba de estacionar frente a la casa de sus padres y yo estoy super nerviosa. G: tranquila nena, la vamos a pasar genial. N: eso esperó. -Guido me beso suave y luego bajo del auto, me abrió la puerta como siempre y bajamos. Me guío hasta la reja negra y toco timbre. Comenzó a besarme pero la puerta nos interrumpió.