Capítulo 23

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Kyle Pov.

Existe un mal que puede llegar a matar a todo ser humano, un mal que no se lo deseo ni a mis peores enemigos. Un mal que saca la parte más idiota de tí, un mal que puede dejarte en una paz interna agradable y a la vez hacerte que tu corazón lata a gran velocidad. Un mal que hasta las mejores y peores personas lo han sentido alguna vez.

Ese mal se conoce como amor.

Nichole, Heidi, Rebeca, la señorita Ellen y Leslie nunca me hicieron sentir algo tan fuerte. Tal vez era el destino que me estaba preparando para todo esto.

La chica se fue con Luke y Stan, ______ y yo nos quedamos solos unos minutos. Se hizo un silencio incómodo, después de todo yo no podía concentrarme en otra cosa que no fuera ella, no podía dejar de verla, mientras que mi corazón recitaba millones de poemas, mis labios estaban cerrados creando estúpida sonrisa.

- Kyle - me llamó ______ haciendo que mi corazón palpitara aún más rápido.

- S- Sí - grité, causando que ella diera un pequeño salto debido al susto.

- ¿No sientes algo extraño? Me refiero a la chica, no que tienes un problema allí abajo -

Miré hacia mis pantalones y, en efecto, maldigo ser chico, un chico enamorado a lo imbécil.

- Descuida - dijo, poniendo su mano en mi hombro - Luke me enseñó que hacer, solo te diré que duele - ni siquiera pude preguntar a que se refería, en unos segundos sentí que todo en mi explotaba. _______ me había pegado en las bolas.

- Tus futuros hijos... - susurré adolorido, caí al suelo, sin darme cuenta de lo que había dicho y he de suponer que ella tampoco lo había notado ya que no dijo algo al respecto.

Estuve sufriendo unos minutos hasta que finalmente el dolor pasó. Me levanté y obviamente le reclamé, me explicó que, cuando habían cambiado de género, ella había despertado con el mismo problema y Luke aprovechó para probar su teoría.

Pasó algo de tiempo hasta que otro chico llegó para ayudarnos, al igual que con la chica este se me hacía muy familiar, pero la gorra tapaba su rostro. Lo único que se podía ver era un mechón verde.

- Un gusto, yo los ayudaré. Tal parece que mi compañera tuvo un problema de último momento. Vengan conmigo, por favor - el chico terminó de guiarnos. Nos señaló una puerta que sería donde estaría el dichoso premio.

- Creí que era la otra puerta - dije muy extrañado.

- Pues, mi compañera es nueva. No se puede aún la ubicación de las instalaciones - dijo, abriendo la puerta, estaba oscuro y frío, entramos y al momento de estar adentro el chico comenzó a reír y cerró la puerta con llave.

- ¡¿Pero que demonios?! - exclamé. Intenté abrir la puerta de mil maneras, pero era imposible. En ese instante se me vino a la cabeza una imagen, era el chico demonio que siempre nos hacia la vida imposible y seguramente la chica era su dichosa hermana.

- ¿Qué haremos? Aquí hace mucho frío - dijo______, me mordí el labio. Estábamos solos, en una habitación oscura y helada. Mi cuerpo se movió solo, la abracé ocupando la excusa que así podríamos conservar el calor.

Ella se separó de mí, se apoyó en la pared y se sentó, yo me senté junto a ella, temblaba pues su ropa no era tanto para la nieve como la mía. Además que yo estaba tan acostumbrado al frío que no sentía tanto la diferencia. Me quité mi querido ushanka y se lo puse, me acerqué más a ella, pasé mi brazo por el suyo.

- Kyle, ¿Crees que Stan y Luke estén bien? Esa chica tal vez los haya herido y... Tal vez por eso no vinieron - murmuró, le costaba admitirlo pero estaba nerviosa y un poco asustada.

- Descuida, yo sé que hacer - recordé que el chico demonio nos había dado una carta para transformarnos en nuestra versión superhéroe. Sin embargo, nunca creí que la usaría nuevamente así que la guardé en un cajón. Bien hecho, Kyle.

- ¿Entonces? - preguntó.

- Olvídalo, supongo que tendremos que esperar - Recordé que tal vez podríamos llamar a alguien pero nuestros celulares estaban en mi mochila, la cual tenía Stan. Todo estaba mal, incluso yo empecé a tener un poco de frío, acercándome a ______ un poco más, si es que era posible, para tener calor.

- Kyle, ese chico era Uma y su hermana ¿Verdad? - dijo, su voz era un tanto apagada - Creí que Uma había cambiado -

- Él dijo algo sobre su hermana, posiblemente lo haya obligado o algo. O solo nos engañó, que es lo más probable - Estaba dudando si preguntarle sobre todo esto, porque Luke y ella actuaban con tanta normalidad con respecto a los demonios esos y sobre que Shi se había convertido en robot de un momento a otro.

Siempre había tenido esa duda pero nunca me digné a preguntar, ya que los demás actuaban con tanta calma después de los desastres. Son unos completos idiotas, no me sorprende que tuvieran alguna pregunta, solo lo ven como el pan de cada día. Pero sé que lo anormal de este pueblo llega hasta un punto y ellos lo habían pasado.

- ______, sé que te incomodará mi pregunta, sé que me tienes un poco de confianza pero te pido que me digas la verdad ¿Qué son Luke, Shi y tú? - pregunté, no dije nada de sus padres ya que sabía que eran adoptados. Ella se sorprendió por mi pregunta, o eso creo ya que no se podía ver muy bien.

Ella suspiró, me explicó cada detalle de su pasado sin ningún terror. Parecía ser imposible, pero era todo verdad, eso explicaba la primera vez que sentí algo por ella, la vez del incendio en el edifico antiguo. Eran sus poderes, aunque ella no lo recordaba del todo. Me suplicó que guardara el secreto por seguridad, me abrazó diciendo una y otra vez que no debía decírselo a nadie. Correspondí a su abrazo.

- Claro que si, idiota - respondí, abrazándola más fuerte, ella soltó una pequeña risa, me miro a los ojos. Mierda, sus malditos ojos era como un cielo para mí, me volví a enamorar. Por reflejo besé su mejilla, la volví a abrazar para evitar ver su rostro.

Ahora la estúpida canción "Helpless" tenía sentido. Me sentía indefenso cada vez que la veía, cada vez que la escuchaba o simplemente con recordar su existencia.

Tan indefenso...

The lost twins (South park y tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora