Amour

Capítulo 2

Después de una conmovedora charla con Eloise sobre negocios además de haberme invitado a una de sus fiestas en su residencia, damos por terminada la sesión y salgo a comer algo, por las prisas no había comida nada pero Derek se me había adelantado estaba esperándome con un late acompañado de una magdalena de moras azules, era mi mejor amigo quien si no él conocía todo lo que me gusta, me siento en mi oficina para terminar de arreglar los papeles que deje inconclusos el día de ayer por salir con Danna a beber para después ir a su casa a terminar bien la noche.

— Señor Travis ya ha llegado la invitación para la fiesta de la señorita Jhonson.

— Andrea, pasa déjala por ahí estoy algo ocupado.

— También me pidió que le dijera, que si no asiste ella misma le ira a buscar a su casa y que eso no le gustara.

— Gracias Andrea, puedes retirare.

No me molesto en ir a casa para ponerme ropa cómoda o si quiera cambiarme la ropa solo voy directo a la fiesta tampoco llevo invitación espero que no sea una de esas típicas fiestas en las que si no tienes pase no entras, al llegar a casa de Eloise me percato que un letrero afuera dice feliz cumpleaños Eli, maldigo para mis interiores como es que no me di el tiempo para leer la invitación.

Como siempre que lo necesito Derek está ahí para salvarme le trasero trae un obsequio con globos y el pase de la invitación.

— Siempre me salvas amigo.

— Ese es mi deber como secretario y mano derecha, sin contar que somos amigos.

— ¿Vas a quedarte?, verdad. —Me gustaría Alec pero hoy tengo una cena muy importante.

— No me digas que es Mery

— Si, y ya voy tarde, así que toma todo esto porque me tengo que ir

Al entrar la cumpleañera está ahí montada en una silla que parece un trono más que una silla, la veo de reojo pero no pienso acércamele, como siempre mi mala suerte me acompaña grita mi nombre en medio de esas personas.

— Alec, cariño que me has traído.

— Eloise pues es una sorpresa así que deberías abrirlo para ver. — Ni yo mismo sabía que contenía el paquete que me dio Derek. —Annie, por favor deja esto en mi habitación y tráele un mojito de hierba buena a nuestro invitado. — No me detengo a mirar a la pequeña chica que toma el paquete que le entregan y desaparece.

Media hora ha pasado desde que llegue y ya me quiero ir pero esa mujer es astuta no deja de verme o tratar de besarme, es insoportable estar aquí quisiera estar en mi casa deleitándome con Danna o por lo menos viendo el partido de los dodgers, pero tengo que estar aquí hasta que pueda escapar o que se termine esta fiesta, la chica de antes regresa y me entrega el mojito, sí que se ha tardado, no me miras solo me lo entrega y sale corriendo, yo no muerdo pienso. No le tomo importancia y me dirijo hacia la cocina para escapar por la puerta trasera, sin darme cuenta alguien choca contra mí y riega algo que parece café sobre mi pecho. Siento un horrible escozor en todo mi torso así que me despojo de todo lo que llevo en la parte superior para poder echarme agua fría, después de todo ir a los scouts servía de algo.

— Lo siento señor no ha sido mi intensión. — Veo como tiembla será por el susto. — Pero estas loca o que mira por donde caminas mujer.

— Yo.oooo lo siento, me distraje por un momento.

Eloise se nos acerca me mira con cara de gata, antes de pasar a ver a la empleada que está enfrente mío. — Que es lo que te pasa idiota, mira lo que has hecho esa ropa que acabas de ensuciar cuesta más que tú mugrienta casa.

— No le hables así Eloise, estoy bien no ha pasado nada, ha sido mi culpa después de todo. — Nunca pensé que ella podría ser así me ha sorprendido tengo que admitir, siempre que estaba enfrente de mi era amable y muy mona.

— Como sea, lárgate de aquí eres una inservible. — ¡Largo!, le grita antes de que la chica salga corriendo despavorida del lugar.

— Lo siento Eli debo irme no puedo estar así toda la noche.

— No te preocupes cariño me gustas más así. — Me toca el pectoral izquierdo antes de que pueda evitarla.

— Y qué tal si nos olvidamos de esa idiota y salimos de aquí, hacia mi habitación. — Nunca podría estar con una mujer así, prefiero salirme por la tangente.

— No lo siento debo irme será en otra, lo prometo. — me da un beso en los labios y se marcha.