Introducción: El origen

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Cuentan las leyendas que nuestra civilización se originó cuando, en medio de su amor, la luna y el sol acordaron crear un ser, que fuera muestra física de su amor, el seria el encargado de cuidar y vigilar toda la creación, este ser, con su inteligencia, lograría crear un equilibrio entre todos los seres y energías que vivían y controlaban en aquel entonces la tierra

Primero crearon a una mujer, la mayor representación de amor, de paz y compasión, la llamaron Abigail, una mujer de tes blanca y pelo de color rojo, pero poco a poco la obscuridad encontró su debilidad (la soledad) y entro corrompiendo su alma, así que el Sol, buscando protegerla creó al hombre, un ser que guardaría sus sentimientos con tal de proteger a la mujer, encargado de cuidar su alegría y bienestar. Este hombre se llamó Abel, el sol decidió que darle una inteligencia mayor a cualquier ser.

Con el paso de los años Abel y su esposa Abigail conquistaron las especies y consiguieron completar el sueño de sus dioses, llegar a un equilibrio con todos los seres vivos.

Pero Abigail aun no se sentía completa, su amor era demasiado para el frío corazón de su hombre, y poco a poco la ciencia de este, lo alejaba de ella, haciendo que regresara su sensación de soledad.

Antes de que pasara, la luna le dio la oportunidad de tener hijos, así evitaría que la obscuridad llegara a ella de nuevo.

Sin esperarlo, la llegada del primer hijo, la acerco de nuevo a su esposo, ambos agradecieron al sol y a la luna.

Años después la mujer pediría otro hijo a la luna, y el hombre uno al sol.
De estas suplicas, la madre tuvo a gemelos.

Con el pasar de los años la pareja tuvo 7 hijos, 3 hombres y 4 mujeres.

La luna se enfocó tanto en su creación que olvido su relación con el sol, y poco a poco lo dejo de lado, lastimandolo. Aun así, por más que le hiciera, el sol se mantuvo fiel a sus sentimientos.

Tras tentaciones y un alma débil, la luna se corrompió y perdió su Luz. Aun así el sol no dejo de amarla, a pesar de que ahora era un mounstro, y no era la única que pasaba por esto, sino que Abigail, la primera mujer, también como si se tratase de un espejo, dejo que su alma se llenara de obscuridad.

La corrupción llego hasta el centro de la luna, quien en un ataque de ira contra el sol, decidió maldecir al hombre que había creado, por ser igual al sol. El hombre sabia que eso pasaría así que días antes, creó el "arma del relojero " y con un movimiento habil, desvío la maldición de la luna.
Nadie sabe si fue cuestión de suerte, ni si así lo quiso el hombre, pero la maldición golpeo a la mujer, llenando su alma de destrucción y odio. El hombre finalmente huyo con sus hijos y dejo a esta mujer encerrada en una cueva.

Abigail perdió todo rastro de humanidad en el proceso, volviéndose un demonio. Bajo al inframundo y creó un caos en el que juro encerrar al hombre que no había aceptado su castigo, sino que había desviado la ira de la luna hacia ella.

Como si de un divorcio se tratase, la luna y el sol dividieron a esos 7 niños, pero en su debilidad, la luna solo pudo reclamar a uno de los hombres y conservar a dos de las 4 mujeres

A los que el sol protegió y eligió los llamo Solé, estos "hijos del sol" serían de alma pura, pacíficos, muestras de el amor que aun le tenía el sol a la luna, les dio dones, como hablar con los animales, para que estos seres continuarán con el objetivo de llegar a un equilibrio absoluto, también les dio herramientas, que usarían el poder y fuerza de sus almas, para hacer que cada trabajo realizado fuera aun mejor.
En cambio, llena de ira, la luna los llamo "Une" , los hizo fuertes, fríos, sin corazón o sentimientos, les dio un alma llena de desesperación, y también les dio dones, les lleno la mente de ideas de odio y destrucción, y para cerrar con broche de oro, decidió darles armas, que al igual que las herramientas solé, usarían la desesperación de sus almas para producir odio y destrucción.

Viendo la acción de la luna, el sol acepto que ya no quedaba nada de aquel hermosa mujer de la que se había enamorado, sus sentimientos se habían perdido como su alma.

Para evitar que estos seres corruptos acabaran con los solé, el sol les lanzo una maldición: "Ustedes y sus herederos serán infertiles, jamás conocerán la felicidad y el amor, y si al morir su sangre se junta con la de un solé, se transformaran en demonios, en dioses de la muerte, y vivirán una eternidad de sufrimiento y tristeza y soledad "

Abel viendo que el Dios sol y la diosa luna acabarían asesinandose y destruyendo la creación, maldijo a sus propios dioses y los transformó en los astros que hoy conocemos, después lleno de pena, desapareció y jamás se le volvió a ver. Cuentan las leyendas , que su espada después seria confundida y seria renombrada como "la espada santa" que estaba clavada en una roca, siendo liberada por el rey Arturo, siendo este su último dueño conocido, después desaparecería sin dejar algún rastro, más que las marcas en la pierda en la que fue encontrada.

Los hijos de este hombre fueron los primeros hombres, las primeras comunidades, los principios de la humanidad.

....

Tras miles de años Los une y los Solé se volvieron a ver, ambos se asentaron al centro de un conjunto volcánico, en un valle cercano, un espacio amplio y una exuberante vegetación sin árboles que taparan la vista del conjunto de volcanes que formaban una barrera al exterior. Durante este tiempo vinieron generaciones, reyes y sacerdotes, sin una sola pelea, sin una razón para empezar una guerra.

Un día de verano, una sequía azotó este valle, los une en pleno verano y fechas de cultivar, morían de hambre, la totalidad de los cultivos murió, el invierno se acercaba y ellos no tendrían alimento alguno. Pero sorpresivamente los Solé conservaban algunos cultivos, suficientes para sobrevivir ellos, y los cientos de animales con los que convivían, estos animales eran valorados y respetados, como si de personas se tratase.

Alguien, desde las sombras, culpo a los Solé, diciendo que días antes, una bruja había hechizado los cultivos de la zona. La bruja? Era la hija del gobernador Solé.

Sin dudarlo dos veces los Une dieron por hecho este rumor, el odio regreso a sus corazones y poco a poco empezaron a dudar de sus vecinos. Aun así no hicieron nada, o eso creyeron los Solé....

Llegado el invierno, misteriosamente los Une sobrevivieron, sin comida alguna.

Cada año, los Solé celebraban una fiesta en primavera, cuando todos los animales de la planicie sin excepción, tenían a sus crías, los animales reconocían a los Solé, así que era una fiesta de belleza, de nacimientos, de versiones miniatura de animales varios.

La mayoría de los animales pasaba el invierno en una cueva que se formaba en el interior de un volcán muerto. La cueva parecía una pequeña fortaleza, y la entrada, con una forma de medio círculo, permitía que cualquier animal entrara a refugiarse.

Esa primavera, el gobernador solé siguió la tradición y los guió hasta la cueva, esperando la salida de los animales. Decepcionados regresaron, " tal vez se atraso un dia" decían.

Una semana de primavera paso y el valle no tenía ni un solo animal. El gobernador hablo y pidió paciencia, decía que la sequía previa había retrasado el ciclo de vida de los animales, o que se habían quedado dormidos, o que simplemente les había fallado su reloj biológico.

Tras un mes, el pueblo exploto y pidió que se explotara y se entrara a este lugar sagrado, para buscar a los animales, que día a día le daban vida al pueblo Solé.

Al llegar el explorador encontró cientos de cadáveres, algunos con fetos dentro de ellos, pero nada de carne. Y en la entrada, el moño de oro: un platillo clásico de los Une... Si, los Une habían matado a la totalidad de los animales para sobrevivir, ese año no habría festividad, no habría animales, no habría nada. Y tal vez nunca lo habría.

La pelea empezó. Los Solé los culpaban de la muerte de los animales, y los Une los culpaban de la maldición de sus cultivos (que por segundo año, no habían crecido)
.....

Tras cientos de años de un discurso bélico, finalmente un Une exploto, tomo su arma y degollo a la hija del gobernador.
Antes de morir, la adolescente menciono que ella sabia de la sequía, que su maestro le había avisado, y que ella en un acto de bondad había decidido usar toda su magia para proteger los cultivos de los Une, aun así habían fallado.

Finalmente alguien tuvo la idea de derramar su sangre en los cultivos, haciendo que las plantas volvieran a crecer, y este gesto, hizo que la guerra se desatara.....

Un corazón mecánico (Pulso de carne) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora