-Que? -No podia creer lo que estaba viendo. Estos pequeños mounstros estaban devorando a mis amigos delante mío. Eran como los cuervos. Eran salvajes.
-Un gran espectáculo, no creen? -Mire a Martin. Su pelo era blanco como la nieve y sus cuernos bien formados. Vestia un elegante traje negro. Su mirada era penetrante y me causaba escalofríos. Uno de los mounstros se le acerco.
-Aqui esta su capa, señor. -Se inclino ante el.
-Muchas gracias. -Agarro la capa y se la puso. -Ahora...quien queda?
Lucas agarro mi mano y empezamos a correr. Estábamos por llegar a la salida cuando dos de estos mounstros, todos ensangrentados nos impidieron el paso. Lucas en un ataque de furia pateo a uno, pero comenzaron a aparecer mas y mas.
-Estamos rodeados. -No se veía bien. Nada bien.
-No hay a donde ir...
-Porque? -Lucas y Martin me miraron. -Porque haces esto? -Cuando me di cuenta, estaba llorando.
-Violeta...
-Que es lo que quieres?
-Solo buscaba a la Sacerdotisa Mayor... Nada que les incumba a unos mortales.
Escuche un golpe. Me di vuelta. Lucas estaba tirado en el piso, con una gran mancha de sangre que no dejaba de agrandarse. Me acerque a el temblorosa.
-Oh por dios, Lucas! Lucas!!
-N...no te preocup... -Estaba muerto.
Los mounstros comenzaron a reír.