Todo lo que acabo de escuchar pinta una sonrisa en mi rostro y cuando Javier entra a la habitación no puedo seguir finjiendo estar dormida. Javier piensa que sí lo estoy y entra con cuidado pero al levantar su mirada se da cuenta que no es así
-Hola -abre sus ojos sorprendido
-regresaste pronto -digo sonriendo
-fue lo que dije, aamm ¿hace cuanto estás despierta?
-acabo de hacerlo -miento
-¿cómo te sientes? -pregunta
-me siento bien, creo que me han dado una buena atención aquí
-no sabes cuanto me alegra eso ¿el médico no ha dicho cuando sales?
-no, me imagino que se acercará en un rato para contarme como salieron mis análisis
-espero ya puedas irte a casa -ahí estarás más cómoda
-espero que pronto -respondo
- A que no sabes quién estuvo aquí mientras dormías
-¿quién? -finjo cara de duda
-Diana, te trajo esto -pone una bolsa de obsequio en mi camilla
-no te creo, tu hermana es tan linda no debió preocuparse
-anda, veamos que te trajo -ve con duda el regalo
-Eres la curiosidad andando -río fuerte
-lo sé -ríe también
-vaya parece que el héroe es tu nueva compañía -habla Roberto sorprendiéndonos a los dos y borrando las sonrisas de nuestro rostro
-que te importe poco lo que ella haga y con quien lo haga -responde Javier dándole una mirada desafiante
-disculpa, hablo con mi novia -me señala
-¿tu novia? ¿cuántas novias tienes? -ríe
-¿te importa? -se acerca a Javier
-suficiente, paren ya los dos, Roberto no sé que haces aquí -digo molesta y mi corazón empieza a dar piquetazos, el simple hecho de ver a Roberto altera mi estado
-quiero hablar contigo Samantha -trata de acercarse
-no te acerques a ella -Javier pone una mano en su pecho
-¿y quién eres tú para meterte en todo esto? -lo empuja
-¡Basta! ¡Roberto vete de aquí! -ahora mi pecho arde y me cuesta respirar
-porfavor deja que hable contigo mi amor
-¿mi amor? -dice Javier
-deja lo de mi amor que ya no lo soy, No quiero y tampoco tengo nada que hablar contigo -lo veo fijamente
-Cometí un error y quiero explicarte como pasó todo -trata de acercarse nuevamente
-¡dije que no te acerques a ella! -Javier se acerca a él muy intimidante
-¡saca a este imbecil del aquí Samantha o se va a arrepentir!
-No saldrá de la habitación Roberto quien saldrá de aquí serás tú así que porfavor vete que no eres bienvenido -hablo con dificultad
-¡Porfavor, solo quiero hablar contigo!
-¡que te vayas! ¿no la escuchaste? No está en condiciones de verte y menos de hablar contigo -Javier no lo deja moverse de el lugar donde está y Roberto sigue esperando mi respuesta
-está bien hablaré contigo, pero luego te largas Roberto
-Ppero Samantha
-déjalo, tú tranquilo -digo seria
-ya la escuchaste -le dice Roberto
Javier se da la vuelta en mi dirección
-¿estás segura? ¿quieres hablar con él? ¿te sientes bien?
-tranquilo, estoy bien
-bien, déja que me quede -dice angustiado
-¡que se salga! Quiero hablar a solas con mi novia -habla fuerte Roberto
Javier se acerca a mí y en el oído me dice "sígueme el juego"
-Haré lo que tu digas linda - dice Javier y Roberto lo ve confundido
-Solo serán unos minutos
-como digas -camina hacia la puerta, Roberto lo ve molesto y cuando está a punto de salir gira nuevamente hacia mí
-perdona, olvidé algo compermiso -le dice a Roberto mientras se acerca a mí de nuevo
-estaré en la puerta si necesitas algo avísame cualquier cosa -besa mi mejilla y sale de la habitación dejando en mí una extraña sensación
-vaya, que rápido buscaste consuelo -ríe sarcásticamente
-por lo menos no te traicioné -respondo
-¿dos días son suficientes? ¿Tan rápido te recuperas?
-es lo que menos importa Roberto, yo me pregunto si tú no sientes remordimiento por lo que hiciste
-de eso venía a hablarte, pero por lo que veo no fui yo el único de la jugada
-no digas cosas sólo por hablar por favor -ahora me cuesta mucho más respirar
-es lo que veo Samantha -responde molesto
-no vengas a reclamar nada, no tienes ningún derecho bien sabes que solo estuve contigo
-ya me quedó claro que no tengo derecho, gracias
-¿ahora eres tú la víctima? Por favor Roberto esos dramitas no te quedan
-¡felicidades! Deberías tener el premio a la más rápida en superar las cosas -el desfrivilador comienza a sonar y mi pecho a doler con intensidad
-y tú deberías tener el premio al hombre mas cobarde y sinvergüenza del mundo -agarro mi pecho
-venía a explicarte las cosas pero ya no tiene importancia -baja su mirada
-pienso lo mismo, ya no tiene importancia. Es más ni siquiera sé porque estas aquí.
Deja de buscarme, no me llames no me escribas para mí tú ya no existes así que te pido de favor que te vayas de aquí y dejes en paz mi vida, si tú ya no estas en ella puedo hacer lo que se me venga en gana y tú no tienes derecho nisiquiera de opinar porque desde el día que hiciste eso perdiste todo conmigo -he logrado decirlo a pesar del dolor que siento.Debido al sonido que hace el aparato que está a mi lado Javier entra preocupado a la habitación y al verme agarrando mi pecho intenta sacar a Roberto de la habitación
-¿qué estás haciendo idiota? ¡sal de aquí ahora mismo! Empuja a Roberto
-¿sabes qué Samantha? eso es lo que voy a hacer no te preocupes, vive tu vida que eso es lo que te gusta vete con quien se te dé la gana, con este pedazo de rata si quieres, igual a mí ya no me importará nada de lo que tenga que ver contigo. Gracias Samantha, que tengas una bonita vida -ríe sarcástico
-he dicho que salgas, no hagas que te saque
-claro, lo haré no te deseo lo mismo porque sé que no la tendrás por el tipo de hombre que eres -digo también pero esta vez casi sin aliento
-Thara y yo tendremos una relación formal -dice y se marcha golpeando fuerte la puerta -la máquina suena mucho más rápido y fuerte ahora, y mi pecho hace que me queje del dolor
-Samantha, preciosa tranquilízate
Fue suficiente ¡te vas! -saca a empujones a Roberto de la habitación-pues buena suerte -grito aunque la noticia me causa lástima, enojo, decepción y unas enormes ganas de llorar
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Nunca Fui Tan Feliz
RomanceSi la vida se pudiese cambiar, sé que de la mía no cambiaría nada. Cada momento y cada día nos da la certeza que estamos en este mundo para contar nuestra historia, porque en el habitan millones de historias distintas y esta es la mía, llena de mome...