Entre tus brazos

Episodio 3

No te vi en semanas, exactamente unas 3, la verdad es que no había pensado en ti hasta que Sakura me llamó a la puerta

-¡Hey Naruto! - me saludo alegre

-¿Qué sucede Sakura? -había recién despertado

-Mañana celebraré mi fiesta aquí, por si quieres venir, es a las 12

-Claro Sakura, ahí estaré, por cierto ¿qué hora es?

-Las 7:30 de la mñn

-¿Qué? ¿Tan temprano me despiertas?

-Se supone que en una hora más te vas a trabajar idiota, nos vemos - me dijo yendo a tomar el ascensor, pero no lo tomó justo subió Hinata, venía con un jeans negro y una chaqueta de jeans

Me miraste y reiste, y yo también te sonreí como un bobo, al parecer Sakura lo notó puesto que me lanzó su mirada asesina, me metí al departamento a ducharme e irme.

Pero en la ducha sólo pensé en ti Hinata y era extraño, puesto que no había pensado en ti en semanas pero ese día no pude dejarte de pensar en todo el maldito trabajo, de hecho sólo quería llegar y ver si estabas

Y cuando me bajé del auto me esperabas afuera con Sakura

-¡Hey idiota! - me había llamado mi gran amiga Sakura

-¿Qué sucede?

-Llévame -me dijiste acercándote a mí

Recuerdo que en ese entonces Sakura murmuró cosas como "Ya hice todo mi trabajo"

No sé si eras así con todos pero te acercaste lo suficiente a mí haciendo que el espacio de ambos se reduciera.

Reiste, ¡oh! no sabes cuánto extraño oír tu risa

Luego te alejaste y fuiste al asiento copiloto.

-¿Vamos que esperas?-me preguntaste sacando de tu bolso tus gafas de sol

Realmente eras auténtica, me subí a mi auto y comencé a manejar

Me miraste todo el camino no hablaste mucho, me sentía un poco incómodo, cuando llegamos bajaste primero y te acercaste a mí con la intención de esperarme a salir del auto.

Comprendiste mi dudas

-¡Hey Naru! No sucede nada malo conmigo

Me reí y me miraste molesta, habrás pensado que me reía de ti y sí, nunca quise aceptartelo pero me encantaba verte así, sólo que en ese entonces no lo entendía.

-¿Quieres entrar? - me preguntaste mientras buscabas tus llaves

Me negué, todavía me pregunto que hubiese pasado si hubiese aceptado, capaz hoy estaríamos juntos, tú sirviendo el helado de chocolate y yo escogiendo la película. No estaría aquí escribiendo nuestra historia.

-Tú te lo pierdes - me comentaste antes de irte

Te vi molesta y la verdad yo no lo entendía, era muy tonto en ese entonces y lo seguiré siendo Hinata, porque una persona no cambia así como así. Espero que tú no hayas cambiado.

Porque tu manera de ser va ser siempre la que te caracteriza Hinata.

Después de ese día seguí haciendo como de costumbres mis quehaceres, pero hoy salía antes, ya que era viernes.

Bajé las escaleras y en la recepción de la empresa te vi discutiendo con Shion, mi secretaria

Me acerqué a interrumpir cualquier cosa que no fuera trabajo

-¡Vete de aquí! Sólo ensucias este lugar

-¡Eres una víbora!

-¡Y tú una gata!

Llegué a escuchar sólo eso Hinata gritándole víbora y Shion gritándole gata.

-¿Qué sucede aquí?-interferi antes de que llegaran a los golpes. Tú te acercaste a mí bastante molesta y Shion agachó su cabeza al verme

-Naru, te vine a buscar y ella quiere sacarme de aquí - hablaste como pequeña, te miré embobado, estabas con un jeans y una sudadera

Te veías demasiado tierna. Entonces Shion notó que te había mirado como no había mirado a alguien más y enojada habló

-No es la primera ni será la última que vendrá a verlo señor, todas buscan lo mismo, su dinero. Permiso-comentó y se fue

Hinata gritó enojada, murmurando mil groserías.

-Maldita sea - murmuraste-¿Qué es para ti?

Pd. : Hinata, he de admitir que más que amar tu sonrisa amaba tus gestos al enojarte ¿qué loco no?