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▪En la colina donde los cerezos florecen▪

"Odio esta ciudad. Esta llena de todas las memorias que quiero olvidar. Ir a la escuela todos los días, hablar con amigos, y después regresar a la casa a la cual no quiero volver.
Me pregunto si esto cambiara si esto sigue así..¿Llegara el día en el que cambie?"

Min Yoon Gi se encontraba al inicio del camino largo hacia la escuela, teniendo estos pensamientos una y otra vez, Las hojas de los arboles y las pequeñas flores color lila caían sobre el a causa del viento. Levanto la vista y se encontró con un chico que le daba la espalda, se acerco a él un poco más y escucho lo que este dijo:

— ¡Pan Dulce!—Dijo con voz temblorosa. Yoongi se sorprendió. —¿Te gusta esta escuela? A mí me gusta mucho pero nada se queda como esta para siempre—Continuo sin voltear a verlo.

"Un chico al cual nunca había visto. Esas palabras no fueron para mí. El debe estar hablándole a alguien en su corazón". Pensó Yoongi.

— Cosas divertidas...cosas felices...no es posible que todas ellas se queden como están —Levantando la vista hacia el cielo y la luz ilumino su cara —Aun así, ¿Puede seguir gustándote este lugar?

— Solo tienes que encontrarla—Respondió
Yoongi.

En ese momento el volteo, mirándolo con ojos sorprendidos, el viento comenzó agitar su cabello como respuesta a su sorpresa

— Solo encuentra nuevas cosas divertidas y felices—Continuo diciendo— Vamos Yendo—Dijo suspirando.

El lo siguió, ajustando su paso a él, corriendo un poco para alcanzarlo comenzaron a subir la larga...larga cuesta.

***
La escuela estaba llena, ademas de aburrida especialmente el primer día. Yoongi se dirigió a visitar a su mejor amigo a su habitación y cuando llego se encontró con todo el equipo de rugby dándola una paliza.

—¿Ya aprendiste tu lección, Jungkook?—Escuche decir a uno. Otro lo tenia con los brazos en su espalda.

—¿Que crees que haces tocando tu CD tan alto todos los días?—Dijo otro con la voz furiosa.

—Pero si no lo escucho, no me entran las ganas—Respondió Jungkook.

—¡Scrum!—Grito el que tenia con los brazos a la espalda. Al parecer le harían una jugada rugby. Y así fue, lo mandaron a volar.

—¿No se cansan de hacer eso todo los días, verdad?—Pregunto Yoongi.

—¡Yoongi! ¡Deja de mirar ayudame!—Pidió Jungkook, que ya lo habían vuelto a agarrar.

—Me infectare de tu estupidez, así que no
—Respondió.

—¡Eres un desalmado!—dijo gritando.

Lo volvieron a sacudir y lo mandaron rodando por el piso, y por ultimo una patada. Yoongi miro Sorprendido.

En ese momento se escucho que alguien grito:

—¡Que bulleros! ¡ ya párenla!

Misae-san venia corriendo con una vara en su mano y con el delantal puesto. Todos salieron huyendo de ahí. Al parecer ella les inspiraba miedo.

—¡Por dios! Yo soy la que tiene que lidiar con las quejas de los vecinos—Dijo molesta mirando como corrían.

—Ser administradora suena como un trabajo pesado—comento yoongi mientras acariciaba a su gato.

—Misae-san...ven a salvarme más rápido por favor...—Pidió Jungkook desde el piso, cogiendo su delantal.

—Pero es tu culpa, ¿no es así?—Dijo ella, alejándolo de una patada—¿Por qué no aprendes la lección?

Clannad-YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora