Primera experiencia [Emil x Micky] Yuri on ice (one-shot)

Primera experiencia

Emil Nekola y Michele Crispino llevan aproximádamente tres meses siendo pareja. Todos los esfuerzos de Emil dieron sus frutos y ahora es completamente felíz al lado de su querido Mickey, pero solo había un pequeño problema, y era que en esos tres meses que llevaban siendo novios aún no se presentaba la oportunidad de dar el siguiente paso.

No era porque no quisieran, Emil realmente lo deseaba, deseaba dar todo su amor a su querido Mickey, pero no lo presionaría. Mickey por su parte también deseaba que eso sucediera, aunque por supuesto jamás lo admitiria; ambos solo esperaban la oportunidad perfecta para que su primera vez fuera mágica y especial.

[...]

En este momento ambos se encontraban en la sala del apartamento que compartían los hermanos Crispino. Sala había salido a una cena con su actual pareja Mila, (ya se habrán imaginado como reaccionó Michele al enterarse que su preciada y adorada hermana tenía pareja) y no tenia intenciones de regresar por esa noche, por lo que significaba que ambos tendrían el apartamento solo para ellos dos.

Se encontraban viendo una película, las luces estaban apagadas y ellos estaban sentados en el sillón muy cómodamente uno al lado del otro. Llevaban puestas prendas cómodas. Emil rodeaba el cuerpo del moreno con su brazo y éste a su vez descansaba apoyando su cabeza sobre el pecho de Emil. Era una situación muy tierna y amorosa y asi permanecieron un largo rato.

De un momento a otro, ambos se comenzaron a dirigir miradas discretas y rápidas, hasta que en una coincidieron; se quedaron mirándose durante unos segundos y cada vez estaban más cerca de los labios del otro, Emil decidió romper esos cuantos centímetros que los separaban para así poder apoderarse de los labios del más bajo. Michele solo se dejó hacer en ese tierno beso que poco a poco iba subiendo de tono; Emil mordió un poco el labio de Mickey por lo que éste le cedió el paso para que introduciera su lengua convirtiendo lo que al principio era un lindo y tierno beso, a uno apasionado y fogoso. Sus lenguas se entrelazaban una con la otra en sincronía perfecta creando una danza que comenzaba a excitar a los que realizaban el acto.

El oxigeno comenzó a faltar haciendo que éstos se separaran jadeantes y deseosos de más, rápidamente el más alto se volvió a apoderar de los labios del contrario siguiendo con ese maravilloso beso que segundos antes habían terminado. Colocó delicadamente una de sus manos sobre la mejilla del moreno acariciandola, mientras que con la otra empujaba suavemente contra su pecho para hacer que éste se recostara. El maldito oxigeno, que desgraciadamente sin él no podrían vivir, pero que ahora lo único que provocaba era el impedimento de seguir saboreando los labios del otro por más tiempo. Ambos se miraban directamente a los ojos, ya se encontraban excitados con un notorio rubor en sus mejillas; era completamente obvio que ambos querían más en ese momento, querían seguir besando los dulces labios del otro, querían acariciarse y tal vez, llegar a algo más.

El más alto se volvió a acercar dejando un corto beso en los labios del otro, luego uno en su mejilla, luego en su cuello donde comenzó a succionar un poco y seguir repartiendo besos en esa área. Mientras realizaba este acto, sus manos también se movieron agilmente levantando poco a poco la camisa de Michele y deslizándolas debajo de ella acariciando el torso marcado de éste; el más bajo solo jadeaba y disfrutaba de la atención que le estaban brindando, obviamente se sentia avergonzado, pero eso no quitaba que le gustaba por donde iba yendo el asunto. Emil seguía dando pequeños pero apasionados besos sobre el cuello y clavícula del moreno; de un momento a otro bajó su cabeza un poco más deteniéndose en uno de los pezones ya expuestos de Mickey, sin perder más tiempo lo lamió y comenzó a succionar un poco mientras que con una de sus manos tomó el otro pezón y comenzó a jugar con ellos.

- Ah~ - Michele rápidamente llevó sus manos a su boca cubriendola evidentemente avergonzado por el sonido que acababa de escapar de ella. Emil levantó la vista, el gemido de Mickey lo acababa de excitar aun más.