U n o.

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Querido lunes, te odio con toda el alma.

Ya estaba cansada de tener que despertar en la mañana para ver las patéticas caras de siempre, a las mismas personas cansadas de sus miserables vidas.

Papa nos llevo al retrasado de mi hermano Christian y a mi al instituto, un año mas y salgo de este infierno. Bufé.

Christian me miró -Trata de no matar a nadie pequeño demonio- al decir eso me empujó levemente con su ombro.

-No prometo nada- reí.

Me despedí de Christian y entre con la mochila colgando del ombro y las miradas se centraron en mi mientras me dirigía hacía mi casillero. Odiaba que estos inútiles se me quedaran viendo.

-¿Que tal Rebecca?- me pregunto Amy sonriendo mientras se acercaba.

Amy es de esas personas que siempre piensan en las consecuencias de una acción, es precavida, todo lo contrario a mi.

Se podría decir que ella y Isaac eran mis mejores amigos, los conozco desde que éramos unos mocosos.

-Todo igual, ya sabes-

-¿De que hablan?-

Ese era Isaac, era un chico de estatura normal, cabello rubio, claros y una sonrisa adorable. Era todo un patán.. pero un adorable patán.

Engancho su brazo por encima de mi ombro.

-De ti no, eso tenlo por seguro- Dije mientras apartaba su brazo de mi ombro.

Amy río.

Isaac sonrió -Tu siempre con tan buen humor por las mañanas-

Le saqué el dedo del medio y el sonrió.

Bonita amistad ¿eh?

Los tres hicimos nuestro camino hacía el aula de literatura. Amy y yo nos sentamos juntas e Isaac se fue con una de sus putas a la parte de atrás.

Este año había un chico nuevo. Cabello castaño, ojos cafés, mandíbula marcada y una chaqueta de cuero que resaltaba sus tatuajes. Por lo visto ya las lagartonas con mini faldas y exceso de maquillaje ya lo habían fichado. Lo compadezco.

Las clases fueron aburridas, como siempre, ¿En que mierda pensaban los que crearon el instituto? ¿Que droga consumían?

Creí que iba a morir de aburrimiento pero gracias al universo y los astros sonó la campana indicando el inició de receso, se podía decir que era mi materia favorita.. si es que cuenta como materia.

Nos sentamos en el pequeño jardín debajo de un gran árbol.

-Entonces según tu ¿las albóndigas de la cafetería están hechas de ratas?

Isaac tenía la idea de que la cocinera de la cafetería mataba ratas para hacer las albóndigas, este mas idiota no podía ser.

-Isaac querido, llaman del manicomio, dicen que no tomaste tu pastilla.

-A ver, solo piense lo, esa mujer esta loca, casi maniática, y además estas albóndigas saben horrible.

-Que la cocinera no sepa cocinar no es culpa de nadie-

Isaac se encogió de ombros.

Amy como es igual de idiota que Isaac siguio la conversación, yo por mi parte me recoste del árbol y me quedé viendo al frente.

Oh, ahí está el nuevo, y claro con Scarlett, la reina de las putas. Ella se merecía un récord guinnes por la mas grande puta y folladora de todas. No me sorprendería que tuviera sifilis. Rio en mi mente.

De repente el nuevo miro en mi dirección y le pregunto a Scarlett algo, ella puso cara de asco y no se que mierda le dijo, debería aprender a leer labios.

Desvíe la mirada.

**
n/a: Acasia Brinley como Rebecca Parker.

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