CADA HIJUEPUTA DÍA.

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Cuando no me conocen, parezco realmente aislada, cuando una persona entra en mi vida se da cuenta que realmente no soy tan mala, que llego a ser bastante chistosa, e incluso creo que piensan que, en general, soy feliz, piensan que quizá, sólo quizá, podría valer la pena. Pero si alguien lograra entrar en mi cabeza, no imaginaría la cantidad de mierda que esconde, la perturbación infinita y las inmensas ganas de salir del cuerpo que detesto. 

Pero claro... Nadie puede hacer eso, con todos sencillamente me quedaré en palabras y acciones superficiales, nadie nunca podría saber lo que pienso y siento, prefiero seguir actuando como alguien normalmente capaz  de sonreír ante todo, como todos. Todos esconden alguna mierda en sus cabezas, que claro, nadie sabe, secretos incontrolables y depravaciones que los demás considerarían sin sentido... O enfermas. 

Yo, personalmente no poseo ningún tipo de depravación, sólo unas honestas ganas de morirme. Al principio pensé que la vaina esta de la locura sería temporal, dos años después encuentro que todo aquello que me dolió durante tanto tiempo y que no fui capaz de expresar a alguien más, sencillamente estaba aguardando, palpitando constantemente hasta que finalmente sólo se reveló. Pero sigue ahí, esperando para explotar, mandar a la mierda a todos y escapar para dejarme tranquila. Pero eso sería muy sencillo, probablemente me siga perturbando hasta que simplemente tenga el valor de quitarme la vida, y de paso liberar mi alma que taantas ganas tiene de salir. 

Maldita vida, y maldito tiempo que pasa tan lento, espero que la coca cola, los doritos y los cigarros realmente logren acelerar la caducidad de mi vida, así no tener que inflingirme dolor, ni a quienes fingen quererme cada HIJUEPUTA DÍA. 


FUCKLIFEWhere stories live. Discover now